"No éramos sólo 25 personas caminando, era un montón de gente pensando en lograr la meta"
La marcha "De la Quinta a La Moneda" fue una de las manifestaciones más importantes de las últimas semanas, a raíz del estallido social que vive el país.
La travesía partió la tarde del miércoles 30 de octubre desde el frontis de la estación Limache de Metro Valparaíso, con el objetivo de llegar hasta la sede de Gobierno y entregar una carta al Presidente Sebastián Piñera, que resumía gran parte de las demandas que han movilizado a la ciudadanía.
Leonardo Martínez, vocero de la marcha, comentó las motivaciones que lo llevaron junto a sus compañeros a llegar hasta la capital desde Limache e hizo una valoración personal de lo que fue la histórica movilización que logró una amplia adhesión de la población.
- ¿Cómo se gestó la idea de la marcha hacia Santiago?
- Fue una actividad autoconvocada, no hubo una organización previa detrás. Cuando nos reunimos en la estación de Limache el día miércoles, a las 6 de la tarde más o menos, casi nadie de nosotros se conocía, nunca nos habíamos visto antes y en ese lugar comenzamos a organizarnos y a trabajar en el proceso de cómo íbamos a desarrollar la marcha, incluso ajustar detalles respecto de la ruta. Comenzó a operar una especie de comunidad que se fue organizando en el camino, que logró finalmente llegar a Santiago, demostrando que muchas veces ni siquiera es necesario tener una organización previa para desarrollar una situación. Mientras haya voluntad de hacer las cosas y todos estemos apuntando hacia el mismo objetivo, se puede cumplir y de la forma planificada.
- ¿Cuál fue el momento más significativo que recuerde dentro del trayecto?
- Lo más significativo de todo, sin lugar a dudas, fue que la idea de ir caminando hasta Santiago motivó a las personas a ayudar a este grupo que iba caminando. Me refiero a todas las comunidades que nos fueron recibiendo, a la gente que espontáneamente paraba en la carretera y nos daba agua o comida. Incluso a la gente que simplemente nos daba comida en la calle y nos decía "vamos chiquillos, sigan, estamos con ustedes". Éramos 25 personas que nos habíamos unido, pero muchísima más gente se unió a la idea. Por ejemplo, nos recibieron en la medialuna de la quebrada de la cuesta La Dormida, en Tiltil, en Polpaico, en Huertos Familiares, en Lampa, en Batuco, en Los Cortijos cuando llegamos a Santiago. No éramos sólo 25 personas caminando, era un montón de gente que estaba enfocada, pensando en que esto había que lograrlo; y si bien no estaban caminando, estaban haciendo su propio esfuerzo para hacer que esto fuera realidad.
Fueron dispersados
- Cuando llegaron a Santiago, la gente se fue sumando por la avenida Independencia hasta llegar a La Moneda.
- Sin miedo a equivocarme, creo que esta marcha terminó con más de 600 personas en la caminata misma. De hecho, tengo cuatro amigos míos que me estaban esperando en Santiago, en la avenida Independencia, y se sumaron a marchar conmigo. En la práctica, uno se dio cuenta que en la marcha fuimos 25 los que partimos, pero finalmente mucha gente se sumó y terminamos siendo 600, incluso más que eso.
- ¿Cuando llegaron a La Moneda pudieron entregar la carta, o fue tal como se vio que estuvieron 7 minutos hasta que Carabineros los dispersó?
- Uno de los cambios que se hizo fue porque sabíamos que en La Moneda no nos iba a recibir nadie, entonces lo que se decidió como equipo, porque todas las decisiones se consultaban y las decidíamos como grupo, que en vez de hacer un documento e intentar entregarlo a La Moneda, porque sabíamos que no iba a suceder, se decidió que íbamos a dar un punto de prensa o, a través de las redes sociales, íbamos a leer el petitorio. Al leerlo, íbamos a cumplir con el proceso de difundirlo, para que toda la gente entendiera lo que se había trabajado en el camino. Hubo algunas personas que, obviamente, trabajaron mucho más en el desarrollo de este petitorio y se lograron desarrollar una idea bastante más concreta, pero finalmente no fue posible. El grupo llegó, se instaló fuera de La Moneda, estuvo unos pocos minutos y Carabineros comenzó a dispersar al grupo, ni siquiera permitieron que se hiciera esta marcha ni siquiera llegaron a preguntarnos lo que íbamos a hacer o a decirnos que esperáramos 20 minutos para hacer lo que íbamos a hacer. Solamente fue como se vio en las imágenes, apareció el guanaco y comenzó a dispersar a todos los que estaban sentados, sin hacer ningún destrozo. Esta marcha fue total y absolutamente pacífica, pero fue finalmente reprimida con violencia, lo que demostró un poco el cómo se está actuando en contra de todos. No estoy diciendo que ante la gente que actúa con violencia se deba actuar con calma, pero hay muchísima gente, creo que un gran porcentaje de la población, está actuando con tranquilidad, en paz, sin violencia, pero aun así reciben violencia de vuelta. Ese es el problema, en resumen.
Petitorio
- ¿Que decía el petitorio que levantaron durante el trayecto?
- Los puntos más importantes no son muy distintos de los que está presentando la comunidad a nivel nacional. Tiene que ver con el cambio de la Constitución, levantar una asamblea constituyente, los cabildos locales; tiene que ver con las mejoras en salud, con una alternativa o un cambio respecto de las AFP, la desigualdad en cuanto al acceso a la salud, la educación. No fue muy distinto de lo que el país en general está exigiendo y que finalmente todos nos hemos dado cuenta de que no estamos siendo escuchados y no está habiendo cambios ni intenciones reales de mejorar. En la práctica, siguen pasando cosas, todos los movimientos siguen, y eso tiene que ver con lo que es central para toda la comunidad.
- ¿Han podido hacer alguna reflexión todos los que participaron en la marcha?
- Después de esto no nos hemos podido reunir, seguimos hablando sólo por un grupo de WhatsApp. Somos de distintos lugares, de Valparaíso, La Calera, Limache, Viña, Quilpué, de todos lados de la Quinta Región, por lo que no se podría dar un resumen de parte de todo el grupo que compuso "De la Quinta a La Moneda". Pero a título personal puedo decir que se logró mucho más de lo que pensábamos, en el sentido de que tanta gente se sumó, que quiso aportar, que quiso estar presente. Los mismos medios de comunicación cubrieron tanto nuestra acción que, a mi juicio, hicieron superar toda expectativa que tuviera antes. La gente que nos veía en las calles era más mucho más de lo que hubiese imaginado de lo que iba a suceder y se sintieron representados, parte de esto. Esa era la idea, que la gente se sintiera parte de lo que nosotros estábamos haciendo, que no estaban excluidos, que era por cada una de las personas de este país, no por nosotros. En resumen, hicimos que la gente tuviera otra voz más, aparte de todas las que ha habido, otro punto en el cual dijeran que los están representando.
"Comenzó a operar una especie de comunidad que se fue organizando en el camino, que logró finalmente llegar a Santiago" "(El petitorio) no fue muy distinto de lo que el país en general está exigiendo y que finalmente todos nos hemos dado cuenta de que no estamos siendo escuchados" "Lo más significativo de todo, sin lugar a dudas, fue que la idea de ir caminando hasta Santiago motivó a las personas a ayudar a este grupo que iba caminando" "Esta marcha fue absolutamente pacífica, pero fue reprimida con violencia, lo que demostró cómo se está actuando en contra de todos"