Punta Piqueros
La anulación del permiso de edificación del Hotel Punta Piqueros, producido al acogerse un recurso de "ilegalidad" presentado por el Comité Pro Defensa del Patrimonio de Viña del Mar, significa un golpe mortal para este proyecto hotelero que se construye en Concón. Poco importó que la construcción estuviera avanzando con los debidos permisos y próximo a su recepción final.
Esta sorprendente decisión es una pésima señal para la industria turística, la que, desde el estallo social de octubre, pasa por un difícil momento. Para superar esta crisis se necesitan medidas que apoyen al turismo y no que pongan trabas a su desarrollo. Se debe impulsar y facilitar las inversiones privadas en un sector tan estratégico para Chile como es el Turismo.
Resulta incomprensible que nuestras autoridades administrativas, políticas, judiciales y ambientales actúen con esta lógica tremendamente dañina para el desarrollo del país. Se corre el riesgo de espantar al capital de inversión, deteriorar nuestra debilitada imagen país e impedir la creación de nuevas fuentes de trabajo.
Alejandro Hughes Vicepresidente Hoteleros de Chile
Paros y demandas
Los organizadores de los paros no quieren tomar en cuenta que:
1.- Sus demandas, aunque perentorias y excesivas, han sido reconocidas. 2.- El Gobierno y el Congreso comenzaron a atender las demandas económicas. 3.- Gobierno y oposición lograron un acuerdo para plebiscitos sobre una nueva Constitución. 4.- Cada marcha ha sido seguida invariablemente de barricadas, pillaje, saqueos y fuego. 5.- Los paros son inaceptables, ya que atropellan el derecho de quienes quieren trabajar para reconstruir lo quemado y necesitan solventar su diario sustento.
Jugar con fuego es peligroso: quema.
Juan Suárez Molina
Derechos humanos
Los derechos humanos no son sólo propiedad de quienes salen a las calles, también tienen los mismos derechos quienes quieren trabajar, desplazarse y realizar sus actividades diarias. Sería bueno que esto lo recordaran quienes convocan incesantemente a marchas que sólo terminan en violencia.
Marcela Gajardo M.
Orden público
Después de ver a Valparaíso y Viña del Mar destruidos, se le debe exigir al intendente, Sr. Jorge Martínez, que muestre más decisión y firmeza en el empleo de sus carabineros y, en paralelo, que demande al alcalde Sharp por incitar a las manifestaciones, odio y destrucción.
Seguir haciendo sólo declaraciones públicas es continuar mostrando falta de carácter y debilidad, un clásico de este gobierno.
Rafael González Rosenqvist
Facultades
La disuasión es un efecto que se logra mediante la amenaza de un daño que el disuadido no está dispuesto a aceptar. Para que ella sea efectiva, el disuasor no sólo requiere tener la capacidad para ejecutar la amenaza, sino que, además, la voluntad para llevarla a cabo.
Al respecto y en relación con el proyecto de ley que permitiría que las FF.AA. resguarden infraestructura crítica y servicios públicos esenciales, sin necesidad de decretar estados de excepción constitucional, cabría comentar que ello de nada servirá si los militares no tuviesen la facultad para emplear sus armas letales contra quienes atenten contra tales instalaciones y la seguridad de que no serán procesados y encarcelados por "violar los derechos humanos".
El deber primero del Estado es mantener el orden público y la seguridad de la comunidad nacional, a fin de que las diversas actividades puedan ser desarrolladas con normalidad y tranquilidad. El Estado no sólo tiene el derecho, sino que el deber de defenderse y de mantener la plena vigencia del orden institucional, haciendo uso de la violencia legítima -de la cual el Estado tiene el monopolio- si ello fuese necesario para lograr tal cometido.
Adolfo Paúl Latorre
Prioridades
Nadie está libre de pecado, y es que son los mismos parlamentarios que acusan los que son parte del problema. En ese contexto, no deja de llamar la atención que, en el intertanto de resolver urgencias sociales, legisladores intenten simultáneamente destituir a un Presidente.
Una acusación de este estilo y propiciada por parlamentarios con credenciales democráticas, sólo ratifica lo herida que puede estar la institucionalidad del país que sustenta una acusación sin mayores fundamentos para reforzar un país en el que no supieron absorber las demandas.
Hoy la tarea es recuperar la confianza, fortalecer la democracia y volver a priorizar la agenda legislativa, pero sobre todo realizar transformaciones profundas y medidas claras contra el abuso, privilegios y desregulaciones.
Quien no comprende las principales motivaciones, dudo mucho que esté libre de pecado y sea digno de tirar la primera piedra.
Patricio Saavedra Bahamondes