La frustración itálica tras quedar a un paso de la final
BÁSQUETBOL. El entrenador de Sportiva Italiana repasó lo que fue la serie contra Sergio Ceppi, que dejó a los porteños muy cerca del ascenso a la Liga Nacional.
En un duelo infartante, que recién se definió con una bandeja a falta de seis segundos para el término del tiempo regular, Sportiva Italiana cayó en el segundo juego ante Sergio Ceppi por 76-74, quedando fuera de la final por el ascenso a la Primera División de la Liga Nacional de Básquetbol.
Después de haber perdido en el gimnasio Arlegui de Viña del Mar, los porteños estuvieron muy cerca de extender la serie a un tercer partido. De hecho, los itálicos tuvieron una ventaja de 11 puntos en el segundo cuarto, pero no fueron capaces de sostenerla y al entretiempo se fueron ganando por dos puntos (39-37), aunque probablemente mereciendo un poco más. Los últimos minutos del periodo decisivo fueron palo a palo, con varios errores y pérdidas para ambos quintetos.
"El partido nosotros lo llevamos a que fuera así, con mucho vértigo, y ellos también se estaban jugando la opción porque creo que de haber habido un tercer partido nosotros estábamos mejor físicamente", sostiene Gianluca Pozo.
El entrenador itálico aún mastica la rabia: "Estamos frustrados todavía por haber quedado fuera, pero tranquilos porque jugamos a lo que habíamos jugado todo el año y se nos escapó el partido por detalles. Dominamos gran parte del juego, pero tuvimos un mal cierre y ganaron ellos".
Haciendo un análisis de lo que fue la serie contra los de La Cisterna, Pozo asume que buena parte de la llave se definió en Viña del Mar, en el inicio del cruce.
"El segundo partido fue lo que esperábamos para toda la serie y fue ilógico que hayamos perdido como lo hicimos en Viña. No habíamos perdido nunca por más de 10 puntos y justo jugamos muy mal el partido que no debíamos", explica el DT de los porteños.
"Pero es parte del crecimiento que supongo tenemos que tener como equipo y espero que no nos vuelva a pasar. Sentía que ya habíamos pasado esa etapa en el primer semestre cuando ganamos como cinco partidos seguidos donde era ganar o quedar eliminados. Ahora nos topamos gente de mucha experiencia en los otros equipos, sobre todo (José Luis) Campos, que metió un triple de casi la mitad de la cancha cuando el partido estaba empatado", agregó Pozo.
Ahora el objetivo de Sportiva Italiana será mantener al plantel para el próximo año dar el salto, conscientes, eso sí, que están en un lugar de privilegio dada la realidad del club.
"Hay que pensar que llegamos más lejos de lo que tendríamos que haber llegado por un montón de razones: presupuesto, experiencia de los jugadores y mía, estatura. Creo que fue una muy buena liga para la realidad que tenemos en el club. Igual nos sentimos cerca de haber podido llegar a la final, esa fue la sensación con la que quedamos", confesó Pozo, ya pensando en dar vuelta la página hacia el 2020.
"Fue una muy buena liga para la realidad que tenemos en el club. Igual nos sentimos cerca de la final".
Gianluca Pozo, DT de Sportiva Italiana
Cambiar el piso, el próximo desafío
En Sportiva Italiana uno de los grandes anhelos es cambiar el piso de la cancha del gimnasio Antonio Valenzuela. "La idea es tener una localía como corresponde y no depender de quien nos preste el gimnasio ni ese tipo de cosas", dice Gianluca Pozo, añadiendo que "el piso tiene que ser de madera. Eso nos daría un salto grande como club en un montón de cosas, pero en la cancha sería jugar donde entrenamos". Sportiva busca apoyo privado para financiar una obra de unos 30 a 40 millones de pesos.
30-40 millones de pesos costaría el cambio del piso de la cancha del gimnasio Antonio Valenzuela.