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La presencia femenina en Hollywood no parece mejorar

CINE. "Mulán", "Emma" y "Black Widow" son algunos de los 41 estrenos que restan para 2020, de los cuales sólo cinco son dirigidos por mujeres.
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En 2008, Kathryn Bigelow marcó un hito cuando se convirtió en la primera mujer en la historia de Hollywood en obtener el Oscar a mejor dirección por la cinta "The hurt locker". Lo que se pensó podría ser el impulso que la industria cinematográfica necesitaba para aumentar el reconocimiento al trabajo femenino se vio interrumpido por la realidad: en la última entrega de los premios, sólo 12 de los 113 directores nominados en todas las categorías eran mujeres.

Esto no es una novedad. En el estudio "Inclusión en la silla del director", la doctora Stacy L. Smith identificó que desde 2007 hasta el pasado año, de los 1.448 realizadores de las películas éxito de taquilla, sólo 57 eran mujeres. Y si bien la presencia femenina en la última entrega de los Oscar aumentó respecto a su versión anterior en un 6%, de acuerdo a Martha Luzen "no sabremos si 2019 fue sólo un buen año o el comienzo de una tendencia al alza hasta que veamos las cifras de 2020 y 2021".

Diversidad de estilos

La diversidad en los papeles, la dirección y producción es un tema que se ha cuestionado desde hace más de una década y que se vio reforzado por el movimiento "Me Too" que hoy cobra más fuerza por la reciente decisión del jurado que encontró culpable a Harvey Weinstein por acto sexual criminal en primer grado y violación en tercer grado.

Hasta ahora, sin embargo, los números no parecen mejorar, ya que de los estrenos programados para lo que queda del año, sólo 5 de las 41 películas están dirigidas por mujeres.

La primera en llegar a las salas nacionales es "Presencias del mal" (12 de marzo), la cual cuenta la historia de una joven institutriz que es contratada por un hombre que debe hacerse cargo de sus sobrinos tras la muerte de sus padres, pero pronto descubrirá los secretos que ocultan los niños y la casa. Esta adaptación del libro "The turn of the screw" de Henry James cuenta con las actuación protagónica de la canadiense Mackenzie Davis.

La directora es la italiana Floria Sigismondi, que en 2010 llevó a la pantalla la historia del grupo de punk rock "de sólo chicas" The Runaways, famoso en los años 70. Sin embargo, es más conocida por dirigir videos musicales de Katy Perry, Björk, Interpol y Marilyn Manson, entre otros artistas.

Le sigue "Mulán", el remake de la película animada de Disney que cuenta la historia de Hua Mulán (Liu Yfei) quien se infiltra en el Ejército Imperial para ocupar el lugar de su padre en la guerra con los invasores el Norte, debido a su débil estado de salud.

Si bien la cinta pospuso su estreno en China debido al Coronavirus, llegará a nuestro país el 26 de marzo bajo la dirección de la neozelandesa Niki Caro, quien dirigió "Whale Rider", cinta que ganó el Independent Spirit Award en 2003 a mejor filme extranjero. Con "Mulán", Caro se transformó en la segunda mujer a cargo de una película de más de US$ 100 millones de presupuesto en los estudios de Mickey, luego de Ava DuVernay por "Un viaje en el tiempo".

El 23 de abril, en tanto, llega a la pantalla grande "Emma", una sátira social que además aborda el proceso de pasar a la adultez. La historia basada en el libro de Jane Austen, se centra en Emma Woowdhouse (Anya Taylor-Joy), una joven adinerada que gusta hacer de casamentera para sus amigas dejando de lado sus propios sentimientos.

La producción es el debut en la dirección de un largometraje de la fotógrafa Autumn de Wilde, quien ha estado a cargo de las portadas de los CD de diversos artistas como Elliott Smith, The White Stripes, She & Him y Beck, así como también ha realizado videos musicales y comerciales.

Un nuevo nicho

Un género cinematográfico en que las mujeres comienzan a hacerse un espacio es el de superhéroes. Este año comenzó con "Birds of prey: and the fantabulous emancipation of one Harley Quinn" de la realizadora Cathy Yan, quien después de trabajar como reportera para "Los Angeles Times" y "Wall Street Journal en Nueva York", debutó como directora con "Dead Pigs", película que recibió un Premio Especial del Jurado por actuación en conjunto en Sundance.

A fines de abril, específicamente el jueves 30, se estrenará "Black Widow" que cuenta con las actuaciones protagónicas de Scarlett Johansson en compañía de Florence Pugh y Rachel Weisz, entre otras. La cinta narra la entrega a la KGB de Natasha Romanova para convertirse en su agente definitivo hasta la separación de la URSS, un año después de los acontecimientos de "Capitán América: civil war".

La película está a cargo de Cate Shortland (51), quien ha participado en varios festivales de cine y ganado premios gracias a trabajos como "Somersault" (2004) y "Lore" de 2012.

Finalmente, el 4 de junio se estrena "Mujer maravilla 1984", la segunda parte de la película de 2017 que le valió al personaje interpretado por Gal Gadot el reconocimiento por las Naciones Unidas como Embajadora Honoraria para el Empoderamiento de las Mujeres y las Niñas. La cinta sitúa a la superheroína en un enfrentamiento con Ann Minerva (Kristen Wiig), una antropóloga británica que después de localizar la ciudad perdida de Urzkartaga y tropezar en un antiguo ritual, se transforma en Cheetah.

Su directora es Patty Jenkins, quien comenzó su carrera a los 16 años cuando participó del rodaje de un documental sobre una reunión de la generación beat en su ciudad. Sin embargo, consolidó su trabajo en 2003 con "Monster", una película que cuenta la historia de la asesina en serie Aileen Wuornos protagonizada por Charlize Theron, quien ganó el Oscar, el Globo de Oro y el Oso de Plata en el Festival de Berlín por este rol, mientras que Jenkins recibió el Premios Independent Spirit a la mejor ópera prima.

Roya Sadat: la afgana que rompió las barreras del cine

CINE. Se trata de la primera mujer directora en la era postalibán.
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"Three Dots", un cortometraje en formato de video digital que se grabó en dos semanas, fue el debut de Roya Sadat como directora. Algo que si para el resto del mundo puede ser complejo, para ella -una afgana de nacimiento- fue mucho más.

¿La razón? En esta entrega aborda el tema de los matrimonios forzados, frecuentes en Afganistán, y fue premiado en muchos festivales. Pero lo hizo con el temor constante de que fuera objeto de un ataque de los talibanes, enemigos del cine y de las mujeres activas. "Envolvía las cintas en plástico, porque pensaba que si se metían con nosotros, las tirarían en el desierto", recordó la directora en una entrevista con AFP.

Los talibanes -una facción política-paramilitar fundamentalista islámica sunní- estuvieron en el poder entre 1996 y 2001, y al momento del rodaje acababan de ser expulsados por una coalición internacional liderada por EE.UU. que invadió Afganistán tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. Ellos, los mismos que durante cinco años habían colgado las televisiones de farolas y enclaustrado a las mujeres, se encontraban a pocos kilómetros del rodaje en la provincia de Herat.

Generando espacios

Junto a su hermana, la directora fundó una productora (Roya Film House) para continuar con las obras de denuncia de la vida de las mujeres de su país. Pero no se quedó tranquila, en 2013 creó el primer festival de cine femenino en Afganistán y cinco años después recibió el premio internacional Mujeres Valientes, entregado por la primera dama de Estados Unidos, Melania Trump.

El reconocimiento llegó después del lanzamiento del largometraje "A letter to the president", el cual cuenta la historia de una mujer encarcelada por haber matado accidentalmente a su marido violento, otro tabú afgano revelado por la cineasta.

"Tenía miedo de las reacciones malas", confesó, aunque se sintió aliviada cuando en una proyección en Kabul el público aplaudió a la protagonista, quien abofeteó a su esposo después de pegarle.

A través de la reivindicación de los derechos femeninos en sus películas, Roya Sadat quiere ayudar en la reparación del daño causado por los cuarenta años de guerra en la sociedad y cultura afgana. "Quizá sea fácil reconstruir un edificio destruido por la guerra, pero no lo es cambiar la mentalidad de las personas", aseguró, añadiendo que "la única forma de hacerlo es a través de la cultura, los medios de comunicación y sobre todo el cine".

Ello le ha significado ser amenazada de muerte en innumerables ocasiones por los sectores más conservadores, que están en desacuerdo con su trabajo.

Los inicios

La directora vivió 38 de los 40 años de guerra. Comenzó a escribir en la escuela primaria poemas, cuentos y obras de teatro. Cuando lo talibanes tomaron el poder cerraron las escuelas de niñas y las mujeres fueron confinadas a su casa, pero Sadat estaba autorizada para trabajar como enfermera y en el hospital creó un centro cultural clandestino con el que organizó representaciones de una de sus obras.

"Comparábamos los tiempos de los talibanes con la era preislámica, cuando las niñas eran enterradas vivas", rememoró, diciendo que "era muy peligroso. Todavía me cuesta creer que hubiéramos podido actuar".

Hoy por hoy teme que las tropas estadounidenses se vayan, pues "se olvidarán de nosotras como durante los años del régimen de los talibanes".

"Quizá sea fácil reconstruir un edificio destruido por la guerra, pero no lo es cambiar la mentalidad de las personas. La única forma de hacerlo es a través de la cultura".

Roya Sadat, Directora

La presencia femenina en Hollywood no parece mejorar

CINE. "Mulán", "Emma" y "Black Widow" son algunos de los 41 estrenos que restan para 2020, de los cuales sólo cinco son dirigidos por mujeres.
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En 2008, Kathryn Bigelow marcó un hito cuando se convirtió en la primera mujer en la historia de Hollywood en obtener el Oscar a mejor dirección por la cinta "The hurt locker". Lo que se pensó podría ser el impulso que la industria cinematográfica necesitaba para aumentar el reconocimiento al trabajo femenino se vio interrumpido por la realidad: en la última entrega de los premios, sólo 12 de los 113 directores nominados en todas las categorías eran mujeres.

Esto no es una novedad. En el estudio "Inclusión en la silla del director", la doctora Stacy L. Smith identificó que desde 2007 hasta el pasado año, de los 1.448 realizadores de las películas éxito de taquilla, sólo 57 eran mujeres. Y si bien la presencia femenina en la última entrega de los Oscar aumentó respecto a su versión anterior en un 6%, de acuerdo a Martha Luzen "no sabremos si 2019 fue sólo un buen año o el comienzo de una tendencia al alza hasta que veamos las cifras de 2020 y 2021".

Diversidad de estilos

La diversidad en los papeles, la dirección y producción es un tema que se ha cuestionado desde hace más de una década y que se vio reforzado por el movimiento "Me Too" que hoy cobra más fuerza por la reciente decisión del jurado que encontró culpable a Harvey Weinstein por acto sexual criminal en primer grado y violación en tercer grado.

Hasta ahora, sin embargo, los números no parecen mejorar, ya que de los estrenos programados para lo que queda del año, sólo 5 de las 41 películas están dirigidas por mujeres.

La primera en llegar a las salas nacionales es "Presencias del mal" (12 de marzo), la cual cuenta la historia de una joven institutriz que es contratada por un hombre que debe hacerse cargo de sus sobrinos tras la muerte de sus padres, pero pronto descubrirá los secretos que ocultan los niños y la casa. Esta adaptación del libro "The turn of the screw" de Henry James cuenta con las actuación protagónica de la canadiense Mackenzie Davis.

La directora es la italiana Floria Sigismondi, que en 2010 llevó a la pantalla la historia del grupo de punk rock "de sólo chicas" The Runaways, famoso en los años 70. Sin embargo, es más conocida por dirigir videos musicales de Katy Perry, Björk, Interpol y Marilyn Manson, entre otros artistas.

Le sigue "Mulán", el remake de la película animada de Disney que cuenta la historia de Hua Mulán (Liu Yfei) quien se infiltra en el Ejército Imperial para ocupar el lugar de su padre en la guerra con los invasores el Norte, debido a su débil estado de salud.

Si bien la cinta pospuso su estreno en China debido al Coronavirus, llegará a nuestro país el 26 de marzo bajo la dirección de la neozelandesa Niki Caro, quien dirigió "Whale Rider", cinta que ganó el Independent Spirit Award en 2003 a mejor filme extranjero. Con "Mulán", Caro se transformó en la segunda mujer a cargo de una película de más de US$ 100 millones de presupuesto en los estudios de Mickey, luego de Ava DuVernay por "Un viaje en el tiempo".

El 23 de abril, en tanto, llega a la pantalla grande "Emma", una sátira social que además aborda el proceso de pasar a la adultez. La historia basada en el libro de Jane Austen, se centra en Emma Woowdhouse (Anya Taylor-Joy), una joven adinerada que gusta hacer de casamentera para sus amigas dejando de lado sus propios sentimientos.

La producción es el debut en la dirección de un largometraje de la fotógrafa Autumn de Wilde, quien ha estado a cargo de las portadas de los CD de diversos artistas como Elliott Smith, The White Stripes, She & Him y Beck, así como también ha realizado videos musicales y comerciales.

Un nuevo nicho

Un género cinematográfico en que las mujeres comienzan a hacerse un espacio es el de superhéroes. Este año comenzó con "Birds of prey: and the fantabulous emancipation of one Harley Quinn" de la realizadora Cathy Yan, quien después de trabajar como reportera para "Los Angeles Times" y "Wall Street Journal en Nueva York", debutó como directora con "Dead Pigs", película que recibió un Premio Especial del Jurado por actuación en conjunto en Sundance.

A fines de abril, específicamente el jueves 30, se estrenará "Black Widow" que cuenta con las actuaciones protagónicas de Scarlett Johansson en compañía de Florence Pugh y Rachel Weisz, entre otras. La cinta narra la entrega a la KGB de Natasha Romanova para convertirse en su agente definitivo hasta la separación de la URSS, un año después de los acontecimientos de "Capitán América: civil war".

La película está a cargo de Cate Shortland (51), quien ha participado en varios festivales de cine y ganado premios gracias a trabajos como "Somersault" (2004) y "Lore" de 2012.

Finalmente, el 4 de junio se estrena "Mujer maravilla 1984", la segunda parte de la película de 2017 que le valió al personaje interpretado por Gal Gadot el reconocimiento por las Naciones Unidas como Embajadora Honoraria para el Empoderamiento de las Mujeres y las Niñas. La cinta sitúa a la superheroína en un enfrentamiento con Ann Minerva (Kristen Wiig), una antropóloga británica que después de localizar la ciudad perdida de Urzkartaga y tropezar en un antiguo ritual, se transforma en Cheetah.

Su directora es Patty Jenkins, quien comenzó su carrera a los 16 años cuando participó del rodaje de un documental sobre una reunión de la generación beat en su ciudad. Sin embargo, consolidó su trabajo en 2003 con "Monster", una película que cuenta la historia de la asesina en serie Aileen Wuornos protagonizada por Charlize Theron, quien ganó el Oscar, el Globo de Oro y el Oso de Plata en el Festival de Berlín por este rol, mientras que Jenkins recibió el Premios Independent Spirit a la mejor ópera prima.

Roya Sadat: la afgana que rompió las barreras del cine

CINE. Se trata de la primera mujer directora en la era postalibán.
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"Three Dots", un cortometraje en formato de video digital que se grabó en dos semanas, fue el debut de Roya Sadat como directora. Algo que si para el resto del mundo puede ser complejo, para ella -una afgana de nacimiento- fue mucho más.

¿La razón? En esta entrega aborda el tema de los matrimonios forzados, frecuentes en Afganistán, y fue premiado en muchos festivales. Pero lo hizo con el temor constante de que fuera objeto de un ataque de los talibanes, enemigos del cine y de las mujeres activas. "Envolvía las cintas en plástico, porque pensaba que si se metían con nosotros, las tirarían en el desierto", recordó la directora en una entrevista con AFP.

Los talibanes -una facción política-paramilitar fundamentalista islámica sunní- estuvieron en el poder entre 1996 y 2001, y al momento del rodaje acababan de ser expulsados por una coalición internacional liderada por EE.UU. que invadió Afganistán tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. Ellos, los mismos que durante cinco años habían colgado las televisiones de farolas y enclaustrado a las mujeres, se encontraban a pocos kilómetros del rodaje en la provincia de Herat.

Generando espacios

Junto a su hermana, la directora fundó una productora (Roya Film House) para continuar con las obras de denuncia de la vida de las mujeres de su país. Pero no se quedó tranquila, en 2013 creó el primer festival de cine femenino en Afganistán y cinco años después recibió el premio internacional Mujeres Valientes, entregado por la primera dama de Estados Unidos, Melania Trump.

El reconocimiento llegó después del lanzamiento del largometraje "A letter to the president", el cual cuenta la historia de una mujer encarcelada por haber matado accidentalmente a su marido violento, otro tabú afgano revelado por la cineasta.

"Tenía miedo de las reacciones malas", confesó, aunque se sintió aliviada cuando en una proyección en Kabul el público aplaudió a la protagonista, quien abofeteó a su esposo después de pegarle.

A través de la reivindicación de los derechos femeninos en sus películas, Roya Sadat quiere ayudar en la reparación del daño causado por los cuarenta años de guerra en la sociedad y cultura afgana. "Quizá sea fácil reconstruir un edificio destruido por la guerra, pero no lo es cambiar la mentalidad de las personas", aseguró, añadiendo que "la única forma de hacerlo es a través de la cultura, los medios de comunicación y sobre todo el cine".

Ello le ha significado ser amenazada de muerte en innumerables ocasiones por los sectores más conservadores, que están en desacuerdo con su trabajo.

Los inicios

La directora vivió 38 de los 40 años de guerra. Comenzó a escribir en la escuela primaria poemas, cuentos y obras de teatro. Cuando lo talibanes tomaron el poder cerraron las escuelas de niñas y las mujeres fueron confinadas a su casa, pero Sadat estaba autorizada para trabajar como enfermera y en el hospital creó un centro cultural clandestino con el que organizó representaciones de una de sus obras.

"Comparábamos los tiempos de los talibanes con la era preislámica, cuando las niñas eran enterradas vivas", rememoró, diciendo que "era muy peligroso. Todavía me cuesta creer que hubiéramos podido actuar".

Hoy por hoy teme que las tropas estadounidenses se vayan, pues "se olvidarán de nosotras como durante los años del régimen de los talibanes".

"Quizá sea fácil reconstruir un edificio destruido por la guerra, pero no lo es cambiar la mentalidad de las personas. La única forma de hacerlo es a través de la cultura".

Roya Sadat, Directora