Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Deportes
  • Clasificados
  • Servicios
  • Espectáculos

Covid-19: diseñan escafandra inspirada en equipo bomberil

PANDEMIA. Anestesista de la Clínica Ciudad del Mar y del Van Buren creó, junto a su esposa y una colega, innovador elemento de protección para personal médico.
E-mail Compartir

Cristián Rojas M.

Un innovador elemento de protección para personal médico, denominado esclavina con visor, fue el que desarrolló el anestesista Carlos Narváez, de la Clínica Ciudad del Mar y del Hospital Carlos van Buren, quien junto al crucial aporte de su esposa, Katia Sandoval, y de su colega Solange Saravia, logró materializar este proyecto que ahora se utilizará en ambos centros asistenciales.

"Una persona muy importante en el desarrollo del modelo fue mi señora, que es una profesional del ámbito de la educación, no es de la salud, pero viendo la necesidad, estuvimos trabajando y bajó tutoriales de YouTube elaboró un modelo, ya que a ella le gusta y es aficionada a la modistería, entonces fue diseñando patrones hasta que elaboramos una esclavina sin visor y ese prototipo comenzamos a usarlo en el Van Buren, más la mascarilla N-95 y un escudo facial, y ahí nació la idea de colocarle un visor", expuso Narváez.

Inspirada en bomberos

Indicó que "fue un desarrollo que hicimos en función de la necesidad de elementos de protección personal, y viendo cómo se protegen el rostro y el cuello los bomberos, que usan un sistema que se llama esclavinas o escafandras, que son como pasamontañas, pero que no reúnen las características clínicas que nosotros necesitamos, puesto que requerimos que sean de material impermeable similar al que usamos en pabellón, y que sean fáciles de retirar".

El médico hizo hincapié en que "estas esclavinas son sólo para procedimientos de mayor riesgo, no es para todas las personas ni para todos los que atienden pacientes, sino que es especial para procedimientos que son de mayor riesgo con los pacientes covid positivo. Esos procedimientos son, por ejemplo, intubación endotraqueal, cuando uno necesita darle anestesia general a un paciente y el anestesiólogo o el intensivista cuando intuba un paciente covid tiene que estar cerca de la boca, cerca de la orofaringe del paciente, y si es positivo uno está expuesto muy directamente a la exhalación del paciente y, obviamente, al virus".

El otro procedimiento para el que está diseñada la esclavina con visor es la traqueotomía, explicó Narváez, recalcando que "no todas las acciones en salud necesitan esto, que es específico, pues uno tiene niveles de protección según el procedimiento que hagan con el paciente, y este es el nivel más alto de protección, cubriendo el pelo, el cuello, y uno queda como encerrado, es una barrera más potente frente al paciente, porque además uno está muy cerca y necesitas abrir la boca del paciente".

El médico destacó que la esclavina puede ser un complemento de otros implementos similares ya desarrollados, como los escudos faciales, señalando que "es una suma, o sea, el elemento de protección personal más potente es la mascarilla N-95, y lo otro es la protección de las mucosas de los ojos, y para eso uno puede utilizar antiparras o escudos faciales".

"Son solo para procedimientos de mayor riesgo, no es para todas las personas ni para todos los que atienden pacientes".

Carlos Narváez, Médico que la elaboró

Ya van 6.500 escudos faciales

A toda máquina avanza la campaña por desarrollar 10 mil escudos faciales para el personal de la salud pública de la región, iniciativa que llevan adelante la U. de Valparaíso, los hospitales Carlos van Buren y Gustavo Fricke, las municipalidades de Valparaíso y Viña del Mar, los Servicios de Salud Valparaíso/San Antonio, Viña del Mar/Quillota y Aconcagua, la UTFSM, PUCV, UVM, y UAI, junto a la comunidad maker de Valparaíso. Desde la Universidad de Valparaíso informaron que las solicitudes para fabricar escudos faciales ya superan las 6.500.

Familia diseña un ventilador mecánico a precio accesible

QUILLOTA. Iniciativa de emprendedores para mejorar atención de contagiados.
E-mail Compartir

La familia liderada por Óscar y Jorge Coddou, emprendedores de Quillota acostumbrados a trabajar en metales y maquinaria en la maestranza Jaca, al ver la problemática generada por la falta de ventiladores para camas UCI de la región, decidieron unir fuerzas y crear un prototipo de ventilador mecánico de bajo costo, que ayude a enfrentar la carencia.

Tras casi un mes de trabajo lograron lo que parecía sumamente complicado. Crearon un aparato autónomo, que permite la asistencia respiratoria y mantener con vida a una persona.

"Hemos logrado configurarlo de tal manera que se pueda regular el volumen y frecuencias por minuto. Cuenta con un sistema de protección y alarma en caso de desconexión y funciona mecánicamente gracias a que cuenta con un motor muy poderoso, el que acciona todo el mecanismo, sin necesidad de engranes ni partes móviles que puedan fallar o desgastarse", expresó con orgullo, Óscar Coddou, uno de los creadores del ventilador mecánico.

El aparato tuvo un costo de producción que no supera el millón doscientos mil pesos, muy accesible si se considera que importarlo desde el extranjero cuesta entre 15 y 30 millones de pesos, dependiendo de sus características.

Valora ejemplo

"Aplaudo totalmente el esfuerzo y trabajo realizado por la familia Coddou, no sólo porque demostraron que se puede fabricar en Chile y en la región un ventilador mecánico de calidad, sino porque además están dando el ejemplo para que otros empresarios puedan imitar la construcción y crear más ventiladores. Además, sirve de llamado a las autoridades regionales para inyectar capital de trabajo y apoyar esta iniciativa", sostuvo el consejero regional Manuel Millones, quien visitó el taller y observó en terreno el funcionamiento del nuevo equipo.

El ventilador mecánico prototipo está listo para ser utilizado, a la espera de recursos que permitan elaborar una serie de ellos. Además, cuenta con una batería transportable, que hace que el equipo sea aún más útil.