Claudio Ramírez

Sólo bastó que el mes de abril entrara en la medición regional del desempleo para comenzar a ver en los números -porque en la realidad ya es evidente- los efectos que muestra la emergencia sanitaria en la actividad económica de la zona y, por lógica consecuencia, en el empleo.

El boletín elaborado por el INE para el trimestre móvil febrero, marzo y abril, arrojó una tasa de desocupación de 10,7%. Una cifra de dos dígitos que no se veía desde el periodo junio-agosto de 2010 (10,4%) y que sólo se superada por la registrada en el trimestre marzo- mayo de ese mismo año cuando el indicador para el territorio alcanzó un 11%.

La medición que se evidencia en el último trimestre móvil está 2,2 puntos por arriba de la alcanzada el año pasado en el mismo lapso y muy por sobre la tasa nacional (9%). En resumen, los ocupados en el periodo retrocedieron 7,3% en doce meses, lo que equivale a 63.232 personas menos.

Al observar las actividades económicas, el descenso anual en ocupados estuvo explicado por Enseñanza, la cual retrocedió en un 17,7%, Transporte en un 18,7%, Agricultura y Pesca en un 13,7% anual, mientras que comercio registró una variación negativa de 5%.

Pero uno de los aspectos más relevantes del informe es que tanto los empleos asalariados como por cuenta propia descendieron en 7% y 7,5% respectivamente (ver recuadro).

"Las proyecciones para nuestra región no son buenas, debemos recordar que aún no entramos en cuarentena total, sin embargo, es muy probable que esto ocurra y debemos prepararnos para este escenario que inevitablemente seguirá impactando al empleo (...) Nuestro trabajo debe estar focalizado en reactivar la economía, especialmente, apoyando la recuperación de las empresas de todos los tamaños", comentó el presidente de la Asociación de Empresas de la V Región (ASIVA), Ricardo Guerra.

Hasta un 14%

"Si ya durante el mes de abril esperamos que los resultados del trimestre móvil de febrero-abril se ubicasen dentro de un piso mínimo del 10%, mantenemos nuestra proyección para los siguientes trimestres, con un peak que debiese ocurrir durante el trimestre móvil de mayo-julio posiblemente en torno al 14%", comentó la gerenta general de la Cámara Regional del Comercio de Valparaíso (CRCP), Marcela Pastenes, añadiendo que es difícil saber hasta dónde podría llegar el impacto de esta crisis en el empleo. "Esto dependerá tanto de la duración de la emergencia sanitaria como de la reactivación económica de las empresas", precisó.

El titular de la CChC Valparaíso, Gian Piero Chiappini, advierte que en este escenario, "el Estado podría jugar un rol clave para la reactivación de la economía regional y la generación de puestos de trabajo, dinamizando la actividad a través de la inyección de recursos a los ministerios que hoy pueden impactarla, como son el Minvu y el MOP".

"Este aumento nos da cuenta de una dolorosa realidad que no puede dejarnos ajenos. Hemos visto los primeros efectos del covid-19 en esta medición, por cuanto ésta abarca desde el mes de febrero hasta fines de abril de 2020, registrándose un retroceso en los niveles de ocupación", dijo la seremi del Trabajo, María Violeta Silva, remarcando el aumento del desempleo tanto femenino como en el segmento entre 35 y 54 años, que son generalmente los jefes de hogar. Asimismo, destacó las medidas tendientes a minimizar esta afectación como la ley de protección del empleo.

"El peak debiese ocurrir durante el trimestre móvil de mayo-julio posiblemente en torno al 14%".

Marcela Pastenes, Gerenta general CRCP

"Nos da cuenta de una dolorosa realidad que no puede dejarnos ajenos. Hemos visto los primeros efectos del covid-19 en esta medición".

María Violeta Silva, Seremi del Trabajo

El profesor de la Escuela de Negocios y Economía de la PUCV, Rodrigo Valdés, advirtió que la cifra de desempleo conocida ayer en la región, es el primer reflejo de un periodo muy complicado.

"Para mí es sólo la punta del iceberg porque los indicadores que lanza el INE básicamente son rezagados, ya que corresponden al trimestre móvil y todavía no se ve el efecto que ha tenido la pandemia en la zona central del país y, particularmente, en la región", dijo.

Respecto a lo que puede venir, remarca que en el próximo informe la tasa podría alcanzar niveles del 11% o 12%, y en el futuro aún más. "Es muy difícil hacer una proyección porque son muchas variables, pero si el desempleo llegara al 15% no me sorprendería", recalcó.

El académico también mostró inquietud por la falta de ingresos, lo que repercute directamente en el poder adquisitivo, algo que también se evidencia en el boletín. "Cuando las personas no tienen dinero para comprar no adquieren productos en el canal formal, pero tampoco en el sector informal y por lo mismo ambos tipos de empleo se ven igualmente afectados", dijo el profesional, quien advirtió que, desde el punto de vista económico, hay una tormenta perfecta que requerirá una gran inyección de recursos por parte del Estado.

Pero hay otro punto que dificulta una eventual recuperación, y es que en esta época del año sectores importantes para la economía regional tienden a bajar su actividad como la agricultura y la construcción.

"Entrando al invierno es muy complicado enfrentar la situación, pues se expresa el mayor desempleo en sectores clave que ya han sido afectados", enfatizó.

"Es muy difícil hacer una proyección porque son muchas variables, pero si el desempleo llegara al 15% no me sorprendería".

Rodrigo Valdés, Académico de la Escuela de, Negocios y Economía PUCV