Hasta el pasado viernes 18 de septiembre, todo parecía sentenciado para que el pedalero eslovaco Primoz Roglic (Jumbo-Visma) cruzara este domingo la meta de París como el flamante campeón de la edición 2020 del Tour de Francia. Sin embargo, a un día del final para la tradicional vuelta gala, en la etapa de contrarreloj y contra todo pronóstico, su compatriota Tadej Pogacar (UAE Emirates) pulverizó el reloj para ganar su tercera etapa en el premio francés y la vigésima de esta edición.

Fue una actuación de antología para el joven de 21 años, oriundo del municipio de Komenda, quien aniquiló las aspiraciones de Roglic con una exhibición con pocos precedentes para quien se dice es el alumno de Primoz. Una contrarreloj de 32,6 kilómetros con final en la Planche des Belles Filles con un crono de 55.55 minutos, aventajando en 1.21 a Tom Dumoulin y Richie Porte. Una masacre en velocidad pocas veces vista estos últimos años en el Tour.

Adiós a cómoda ventaja

El "terremoto" Pogacar y su alocada carrera a contrarreloj de ayer le permitió meterse al bolsillo los 57 segundos de ventaja que tenía Roglic, líder desde la novena etapa del Tour, y lo llevó de súbito a la cima. La perla del equipo UAE, segundo en la Vuelta a España de 2019, subirá al primer escalón del podio hoy en París.

Fue una sorpresa mayúscula, pero hubo más marejada ayer. Roglic será segundo y tercero, el australiano Richie Porte (Trek Segafredo), quien a su vez fulminó al colombiano Miguel Ángel "Superman" López, relegándolo en la sexta plaza.

"Honestamente, no pensaba dar la vuelta a la situación. Roglic ha rodado bien en toda la carrera, hoy ha tenido un mal día, pero nadie lo podía saber. Solo cuando ha llegado y me ha saludado me he dado cuenta de que había ganado la carrera", dijo un enfervorizado Pogacar, el ganador más joven de la tradicional prueba desde la Segunda Guerra Mundial.

"No me doy cuenta todavía, no lo asumiré pronto, me faltará tiempo. Estaba contento con el segundo lugar de la general y ahora me veo con el 'maillot amarillo', todavía no sé cómo ha sucedido", cerró.

Una terna arbitral argentina, encabezada por Fernando Rapallini, y otra venezolana, con Jesús Valenzuela como juez principal, fueron designadas ayer por la Conmebol para dirigir los encuentros de Copa Libertadores que este miércoles jugarán Colo Colo y Universidad Católica.

Los albos, que vienen de ganar a Peñarol, tienen un duelo trascendental esta semana con Athletico Paranaense, rival con quien comparte el primer puesto del grupo C, con seis unidades.

Rapallini dirigirá en el encuentro que se disputará en el estadio Arena de Curitiba (19:15 horas). El réferi dirige en el torneo continental desde 2015 y ha arbitrado sólo a dos clubes chilenos en la competencia: Deportes Iquique, en 2017 (0-0 con Guaraní): y Palestino, este año (1-1 con Cerro Largo).

Por su parte, Valenzuela, activo en la Copa desde 2015, no ha dirigido a una escuadra chilena en esta competencia. El duelo de la UC con América de Cali, a disputarse en el estadio Pascual Guerrero (21:30 horas), será su partido número 13 en el torneo, tras su debut en la goleada de River Plate sobre Binacional de Puno, por 8-0.

Tres chilenos dirigen

La representación nacional no sólo estará con el campeón y subcampeón del fútbol chileno en cancha, puesto que la Conmebol también confirmó que los árbitros Roberto Tobar, Cristián Garay y Piero Maza dirigirán en Argentina y Bolivia.

El miércoles 23, en Buenos Aires, Tobar estará en el duelo entre Tigre y Bolívar de La Paz, mientras que Garay hará lo propio en el match de Defensa y Justicia frente a Olimpia. El jueves 24, Maza visitará Cochabamba para arbitrar el duelo entre Jorge Wilstermann y Peñarol, en el Estadio Félix Capriles de la "Llajta", como se conoce a la ciudad boliviana.

Por último, el partido de Barcelona de Guayaquil ante el Flamengo de Mauricio Isla lo dirigirá Diego Haro (Perú); mientras que el match de Alianza Lima de Mario Salas y Patricio Rubio ante Racing de Gabriel Arias, Eugenio Mena y Marcelo Díaz, lo arbitrará Ivo Méndez (Bolivia).

Después de su derrota, en la primera ronda del MS 1000 de Roma, ante el croata Borna Coric (26° ATP), Cristian Garin (21° ATP) se alista para debutar la próxima semana en el ATP 500 de Hamburgo ante otro duro escollo, el japonés Kei Nishikori (35° ATP).

Fue un sorteo poco favorable para la primera raqueta nacional. El nortino, desde su regreso a las pistas luego del confinamiento por el coronavirus, ha jugado cuatro partidos entre el abierto romano, el MS 1000 de Cincinnati y el US Open, con un saldo de una victoria (ante el estadounidense Ulises Blanch, en la primera ronda del Grand Slam norteamericano) y tres derrotas, que lo han hecho bajar en el ranking ATP, del puesto 18 al 21.

Aunque no registra partidos previos ante el nipón de 30 años, el duelo se prevé complicado para Garin, frente a un jugador que fue número 4 del mundo en 2015 y que en tres ocasiones alcanzó los cuartos de final en Roland Garros, escala posterior a la participación de Garin en el torneo germano. El partido aún no ha sido programado, por lo que podría disputarse entre mañana y el martes.

A un paso de la final

Otro tenista chileno en competencia, Gonzalo Lama (888° ATP), cayó ayer en una de las semifinales del ITF M25 de Klosters, en Suiza, ante el danés de 18 años, Holger Vitus Nodskov Rune (725º ATP), por parciales de 6/3, 3/6 y 6/1 .

La joven promesa nórdica se medirá esta mañana en la final al holandés Jesper de Jong (289°), quinto cabeza de serie.

En damas, la chilena Bárbara Gatica (460° WTA) cayó en las semifinales del W15 de Santarem ante Martyna Kubka (852° WTA) por 6/2 y 7/6.