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Detalles del nuevo guión que tendrá el Museo Palacio Rioja desde diciembre

MUSEO. Comedor tendrá un nuevo circuito y contará con diversidad de objetos en la mesa. Hall de Mediación situará históricamente al visitante y contará detalles de la familia.
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Flor Arbulú

El terremoto de 1906 dejó a Valparaíso en el suelo y a Viña del Mar con graves daños. Trajo consigo, además, una inusual migración de las familias más acomodadas del Puerto hacia la vecina Ciudad Jardín y significó un auge en la construcción de magníficas residencias que hasta el día de hoy se conservan, como son los palacios Ariztía y Rioja.

Esta contextualización es parte del nuevo guión museográfico que tendrá el Museo de Artes Decorativas de Viña del Mar contar de diciembre. Ello gracias al proyecto "Habilitación museográfica integral Museo Palacio Rioja", que recibió recursos por poco más de 21 millones de pesos del Fondo de Mejoramiento Integral de Museos, convocatoria 2019, del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, y que significará una nueva habilitación del hall de mediación y el salón comedor.

Saldando deudas

"Teníamos una deuda con la comunidad de situarnos en el momento sociohistórico, tanto local como internacional, y establecer ahí nuestras similitudes y diferencias de cuándo la familia vivió en esa casa", explica Paula Araya, coordinadora del recinto que está bajo el alero de la Municipalidad de Viña del Mar, sobre este nuevo aspecto.

Por otra parte, añade, "el palacio se ve como una infraestructura gigante y queríamos que las personas pudiesen ingresar y acercarse; humanizar los contenidos del museo y la historia para que la comunidad residente y visitante sienta mayor conexión con el pasado, fortaleciendo la identidad local".

Desde esta perspectiva, lo que se buscaba es que pareciera que "el espacio estuviera habitado" y para ello era fundamental "mostrar aspectos más íntimos de la familia", conformada por el español Fernando Rioja y la boliviana Sara Ruiz, y sus nueve hijos.

En este objetivo fue fundamental donación que hizo el sacerdote Kepa Bilbao en 2018, que implicó 517 objetos para el Palacio entre platería, porcelanas y otros. Fue la historiadora, exconcejala y actual asesora de la Unidad de Patrimonio de la Municipalidad de Viña del Mar, Eugenia Garrido, la encargada de elegir los objetos para el comedor, seleccionando 58.

"Fuimos viendo los muebles que teníamos en el comedor por el estilo, tratando también de visualizar la época en que el palacio estuvo activo, en manos de la familia. Entonces en la primera vitrina pusimos platos de porcelana, unos floreros muy lindos, y después bueno soñamos muchísimo con todo esto, cómo podríamos ver la mesa puesta", comenta.

Es en este minuto que entra en juego Arca, sociedad que se ganó la licitación para trabajar en el desafío de poner en práctica lo que consideraba el proyecto. Uno que tiene algunas variables que lo hacen interesante, pero también complejo.

Andrea Hermans, restauradora y conservadora que ofició como vocera de la entidad, sostiene que "uno de los desafíos más interesantes que presenta el proyecto Rioja es que esto es una casa". Es "súper distinto de cuando tú entras a un museo de artes decorativas propiamente tal en que a lo mejor te pasean por las épocas y destacas las marcas de las porcelanas, o los artífices o creadores de ciertos estilos. Pero esto es una casa, una casa que fue habitada por una familia, por una familia numerosa y bastante particular por lo demás", agrega.

Grandes desafíos

Fernando Rioja Medel llegó a Valparaíso en 1879, donde se afincó. "Él, si bien llegó bastante bien posicionado, no fue con un tremendo capital y logró hacer de eso un imperio económico", destaca Hermans.

Él fue el fundador de la Chilena de Tabaco, pero sus prósperos resultados económicos le permitieron actuar en un amplio espectro de negocios que iba desde la producción de cigarrillos, pasando por oficinas salitreras, bancos y empresas de diversas actividades.

"El señor Rioja no fue un empresario común y corriente. El señor Rioja fue un magnate a nivel internacional, o sea, su fortuna era comparable a la de Vanderbilt o Rockefeller, a ese nivel", dice Hermans.

Otro aspecto relevante es que "él fue un inmigrante, que es un tema que nos interesa mucho destacar por la contingencia (...) nos interesa mucho destacar que él no era chileno, y que tampoco llegó millonario", pero que gracias a lo cual "tuvo esta casa espectacular", la que mandó a hacer en 1909 le encargó al arquitecto francoportugués Alfredo Azancot.

Pero, "por sobre todas las cosas, nuestra intención es destacar que no era sólo un potentado económico, sino que también era un padre de familia, que tenía hijos e hijas, y que tenían un estilo de vida muy privilegiado, pero no por eso dejaban de ser personas", asegura la integrante de Arca.

En este sentido, una materia importante a la hora de crear el guión museográfico fue la paleta de colores y los estilos preestablecidos. "No podemos con la museografía llegar a irrumpir o alterar esto, sino que tenemos que entrar de una manera sumamente cuidados y neutral, y tratar de ser un complemento y una guía para el visitante, y no algo que vaya en contra, y que juegue de mala manera con las cosas que ya existen".

Esto se encadena con otro aspecto que es la puesta en valor de los objetos donados. Para ello quedará en el comedor, por ejemplo, colocado un puesto. "Como no nos daban las fuerzas para toda la mesa, porque es enorme, tratamos de poner un puesto en la mesa tal como era en la época", dice Eugenia Garrido.

Ésta también destacó el hallazgo de "unos menús muy interesantes. Uno de cuando vino el príncipe de Baviera, Fernando de Borbón, que se hizo una comida de gala", y el "otro que es del aniversario de las bodas de plata del matrimonio Rioja". "Un papel tan simple como el menú nos da bastante información: la música que se tocó, lo que se comió", acota la historiadora.

Paula Araya, por su parte, indica que "además de implementar y colocar con más vida el comedor, también vamos a tener una apertura del circuito". Esto quiere decir que si antes se podía ver a la distancia, "este proyecto también considera cercar esa zona y te va a permitir visualizar desde adentro el comedor y ver dónde se colocaban los músicos en el balcón interior", detalla.

Apoyo en imágenes

La otra área de intervención será el que desde ahora se llamará Hall de Mediación, que es la entrada del museo. Aquí, comenta Andrea Hermans, ya "está en las bases de diseño bastante avanzado lo que es la introducción, y lo que es la contextualización de las personas" para que el público "se puedan situar en este momento histórico".

Todo, eso sí, "resumido en textos breves", dice la restauradora, lo que "también es un tremendo, tremendo desafío" porque es mucho el material a resumir. "Para eso -detalla Hermans-, nos hemos valido de imágenes y en eso una de las donaciones últimas ha sido sumamente interesante, porque nos ha brindado fotografías de la familia".

Por ahora el museo permanece cerrado, pero una vez que la comuna avance a fase3 podría reabrir, ya que según el protocolo del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural dictado el 1 de septiembre, en el paso de "Preparación" se permitirá la apertura de estos recintos con menos restricciones de acceso, siendo la oferta disponible al público y el foro lo definirá cada unidad de acuerdo a sus particularidades y capacidades, entre otras características.

Proyecto considera la integración de las personas no videntes

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La coordinadora del Museo Palacio Rioja, Paula Araya, comenta que uno de los problemas que enfretaban es que "no teníamos dónde llevar la comunidad ciega, donde pudisen tocar, y este proyecto nos va a permitir eso".

En este sentido, Andrea Hermans detalla que "tenemos considerado tres módulos para personas no videntes para que sean agradables para los que ven y útiles para los que no ven". "Afortunadamente tenemos contacto en este momento con una dirigenta de una agrupación de no videntes de Viña del Mar que nos está brindando su apoyo", agrega.

"Tuvimos una reunión el viernes pasado con ella, afortunadamente le gustó la idea y quieren seguir apoyándonos", sobre todo porque "lo que nosotros habíamos pensado de los módulos para no videntes está en proceso de transformación, porque no servía para nada", acota.