Cartas
Plan Regulador Intercomunal
El actual Plan Intercomunal de Valparaíso se promulgó el año 1996, por lo que el territorio de la zona norte de la región se encuentra normado por un instrumento que data hace 24 años. Pues bien, dada la necesidad de modernizarlo, durante el año 2008 la Seremi Minvu sometió a evaluación ambiental su actualización. Dicho procedimiento administrativo culminó con la RCA aprobatoria el año 2012. No obstante, el instrumento aún no ha entrado en vigor.
Así las cosas, el "nuevo" instrumento fue desarrollado en base a estudios técnicos ejecutados en los años 2007-2008, los que recogieron la realidad de la zona para ese entonces, de tal manera que las amenazas actuales en el sector, escasez hídrica, loteos ilegales (irregulares para algunos), nuevas áreas de protección ambiental y presencia de industria extractiva en la zona no se encuentran evaluadas ni ponderadas en instrumento de planificación territorial alguno.
En consecuencia, el nuevo Satélite Borde Costero Norte quedó desactualizado debido a los largos ocho años de espera para su aprobación y promulgación. Lo cuestionable es que la autoridad sectorial ha justificado el inicio de ejecución de la RCA del instrumento a través de una ficción jurídica para salvar su caducidad. Con la aprobación del Core del proyecto de plan intercomunal, solo resta la firma del intendente regional para que el PRI-V-SBCN reingrese nuevamente a Contraloría, el que, una vez tomado razón, se encontrará con una realidad totalmente diferente a la que intentó algún día regular.
Luis Eduardo Cantellano Ampuero Abogado
Andrea Molina I
En esta sección, el día martes, don Arturo Morales expresó lo que considera una "prueba más de la decadencia de nuestra política", aludiendo a la candidatura de doña Andrea Molina a la alcaldía de Viña del Mar. Tales pruebas serían, entre otras, que sus competencias y méritos para gobernar la comuna son "inexistentes", para luego preguntarse si no tendremos a nadie "debidamente calificado o calificada" para dirigirla.
Desde luego, todo lo anterior son afirmaciones o, mejor, descalificaciones, pero en ningún caso pruebas, porque el sentido de éstas es, justamente, acreditar hechos. Es muy probable que la calidad de la política en el país no pase por un buen momento, pero no son las descalificaciones, sea por sexo, domicilio o profesión, el mecanismo idóneo para mejorarla.
Utilizando el lenguaje adecuado, las pruebas en el caso de la señora Andrea Molina son: ejerció el cargo de diputada por dos períodos, postuló a senadora por la región en las últimas elecciones; desempeña actualmente un trabajo centrado en problemas sociales en una municipalidad compleja, como es el caso de La Florida; y, retrocediendo en el tiempo, demostró por varios años su preocupación por esos mismos problemas en un exitoso programa de televisión.
Raúl Celis M. Abogado
Andrea Molina II
Sin conocer a don Arturo E. Morales P., me permito apoyar y felicitar su carta, publicada el día 15 de diciembre, con respecto a la candidatura de Andrea Molina a la alcaldía de Viña del Mar. Es una vergüenza que Chile Vamos actúe en la forma politiquera en la que está manejando las candidaturas a diferentes puestos políticos.
La Sra. Molina podrá ser una excelente persona, no la voy a juzgar, pero para alcaldesa de Viña del Mar, ¿conocerá siquiera la durísima realidad de nuestra municipalidad? ¿Qué pasó con la posible candidatura del Sr. Raúl Celis, vecino de una vida de nuestra ciudad, conocedor 100% de nuestra realidad y que se desempeñó en forma ejemplar durante su periodo como intendente de nuestra región?
Es muy difícil, en nuestra tercera edad, comprender tanto nuevo sistema, por no decir "arreglín". ¡Pobre Viña del Mar!
Marisa de la Noi
Capitalización vs. reparto
Pocos profundizan el valor de tener un sistema de capitalización individual por sobre un sistema de reparto en estos momentos de apremio económico.
En primer lugar, no existirían ni el primer ni el segundo retiro del 10%, sobre todo para los trabajadores más vulnerables que cotizan eventualmente y no logran un mínimo de años cotizados para lograr una pensión de reparto.
Hoy, si bien el primer retiro dejó a más de 2 millones de personas con saldo cero, con un sistema de reparto no tendrían ni la plata ni derecho a pensión.
Por otro lado, no tendríamos US$200.000 millones que poseemos en ahorros previsionales y el gasto en pensión por parte del Estado sería mucho mayor que el de hoy, por los vicios propios del modelo de reparto, como inflar los últimos años de sueldo para aumentar las pensiones futuras.
Ya se presentó un proyecto para un tercer retiro previsional, el cual nuevamente es posible solo bajo nuestro actual modelo previsional, el de capitalización.
Eduardo Jerez Sanhueza
Restricciones y fiscalización
El día miércoles 9 del presente pude constatar que la Ruta 5 se veía totalmente llena de vehículos saliendo de Santiago hacia el sur. Obviamente, en parte era por el eclipse, en parte por la cuarentena que se imponía a Santiago, en parte por gente que inició la Navidad y otros, probablemente, adelantando las vacaciones.
Pero viendo la transmisión del eclipse, me llamó la atención que algunos entrevistados decían proceder del área de la salud y que habían tomado un "descansito" aprovechado el eclipse. Evidentemente, el personal de salud es el que ha sufrido las mayores exigencias laborales, merecen descansar, pero es personal muy necesario, más aún ahora. Asimismo, podrían ser posibles portadores del virus o podrían, también, contagiarse en ese descansito.
Si existe una incoherencia de este tipo, la desobediencia de Punta Arenas frente a las restricciones impuestas parece solo un juego de niños, más aún cuando esa gente requiere trabajar; y no desafían a la autoridad por capricho, sino por necesidad.
Pedro Campos Arizabalo
Autoridad
Ante los hechos de violencia que todavía padecemos, es hora de advertir que, en lugar de una crisis de autoridad, tenemos una "crisis de autoridades". Aquí lo relevante no es que existan alumnos desobedientes o ciudadanos irrespetuosos, sino que existan directores de escuela, profesores, padres, policías, alcaldes y presidentes que no estén dispuestos a hacer valer su autoridad. En definitiva, no están dispuestos a hacer su trabajo.
Juan L. Lagos Fundación para el Progreso