Exigen reformular planes de ayuda ante lenta reactivación
ECONOMÍA. Boletín laboral de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI) advierte una baja en el ritmo de recuperación de empleos.
Mientras que 45 mil personas recuperaron sus empleos entre agosto y octubre de 2020, entre septiembre y noviembre solo lo hicieron 32 mil. Así lo constató el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en un informe que el Centro de Economía y Política Regional (CEPR) de la U. Adolfo Ibáñez utilizó como base para elaborar su último Boletín Laboral sobre la región de Valparaíso.
Tomando datos de septiembre, octubre y noviembre, el centro de estudios advierte una notable pérdida de fuerza en la reactivación de la economía, y alerta sobre la necesidad de reformular los planes para la recuperación de puestos laborales.
"Los resultados no son para nada inesperados, porque la tendencia es clara. A medida que aparecen nuevas restricciones sanitarias, la recuperación va a tender a bajar su velocidad. Nos vamos a seguir recuperando, pero cada vez a un nivel más lento, que incluso podría estancarse", asegura Esteban López, director ejecutivo del CEPR. Según señala el informe, hay dos motivos para desconfiar de que la reactivación económica vaya a mantenerse: la distancia entre las cifras actuales y las prepandemia, y el hecho de que este repunte sea altamente sensible a las restricciones sanitarias impuestas.
Teniendo como referencia la reducción de empleos entre junio y agosto de 2020 (24%), se ha recuperado menos de la mitad de los puestos de trabajo, y la región sigue estando un 14% por debajo de 2019, con una tasa de desocupación de 11,9%.
Cambios irreversibles
"Es posible que los niveles de ocupación se queden debajo de los niveles prepandemia hasta el mes de marzo, abril e incluso mayo. De hecho, hay una parte de los empleos que nunca se van a recuperar, entonces no vamos a llegar a las cifra prepandemia a menos de que haya una creación de empleos nuevos", sostiene López, haciendo referencia a los puestos laborales que han sido eliminados a causa de la automatización de procesos y los cambios en los hábitos de consumo.
Según explica el académico, "hay cambios temporales y otros permanentes. Por ejemplo, había una proporción grande de personas que compraban presencialmente en los supermercados, el comercio o las ferias, y que ya no lo va a hacer nunca más, con la masificación de las compras online. Pero también hay formas de consumo que no van a cambiar, especialmente aquellas que tienen que ver con la venta de una experiencia, como una comida en un restaurante".
Reeducar a la fuerza laboral
El boletín expone que, de los 758 mil ocupados de este trimestre, un 42% se desempeña en ocupaciones que han tenido una importante contracción a causa de la pandemia, ligadas a la ejecución de tareas simples y rutinarias. "Tenemos que hacer el esfuerzo de reentrenar a la población que no podrá recuperar sus empleos donde trabajaba antes. La pregunta del millón es dónde generamos más empleos y medidas de capacitación, y cómo nos proyectamos como región", concluye el director del CEPR.