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Calculo que con todas las obras realizadas, estamos capacitados para llegar (con seguridad hídrica) al año 2040, en una serie histórica razonable. Si la serie histórica de acá al 2040 es que no va a caer una gota, nos estaríamos convirtiendo en un Antofagasta y ahí hay que pensar qué hacemos".

eso hubo gente afectada durante el día. Desarrollamos medidas de mitigación con estanques y aljibes, pero a un número muy limitado de clientes le afectó.

"en toda la región estamos muy cubiertos"

- En una visita a la planta El Sauce, en Aconcagua, el superintendente de Servicios Sanitarios dijo que Esval construyó estanques de seguridad para eventos de alta turbiedad acotados a 10 o 15 horas de duración, y que "estamos trabajando con la empresa para tener soluciones más a largo plazo".

- Lo único que se puede hacer es tener estanques de acumulación suficientes para salvar eventos, pero también hay que acotar los temas a la estadística. Uno puede tratar de tener cubierto todo, pero siempre habrá un evento para el cual no está asegurado. Entonces, se trata de tener la cobertura para las cosas que estadísticamente pasan. En este caso, tenemos un corte muy acotado de 4 a 6 horas que se produce una vez cada 100 años. Hay que ver cuál es la lógica de tener cubierto un corte por ese lapso, porque a lo mejor tengo que multiplicar la capacidad de los estanques por dos, tres o cinco, en circunstancias que no van a estar operativos más de cuatro a seis horas cada 100 años. Creo que hemos pasado por un enorme éxito y tendemos siempre, como es lógico, a mirar a las personas que se han visto afectadas. Pero la región ha funcionado a la perfección y nadie ha tenido ni siquiera alerta amarilla.

- Si en un escenario futurista y optimista el Aconcagua recuperara su caudal, ¿habría que tener estanques en las plantas San Juan, Las Vegas, Concón?

- El estanque de seguridad que tenemos es el embalse Los Aromos. Ahora, con el proyecto Aromos-Concón, tenemos la planta de Concón conectada con él. Mientras otras compañías están desarrollando estanques artificiales para cubrir un número de horas, tenemos la suerte de haber desarrollado un proyecto que no solo nos permite llenar de manera más eficiente el embalse, sino que estar conectados con el embalse mediante una tubería. Es nuestro estanque de reserva en caso de turbiedades. Y eso es una fortaleza gigantesca.

- ¿Y en la planta Las Vegas?

- En el caso de Las Vegas hemos desarrollado pozos propios y convenios con el empresario agrícola Jorge Schmidt, lo que nos permite prácticamente suplir de manera continua con agua subterránea todo lo que necesita esa planta, que funciona normalmente con agua superficial. Entonces, nuestras dos plantas principales están totalmente cubiertas con agua subterránea y con el embalse Los Aromos, y eso de manera casi indefinida. Tendría que venir un evento gigantesco, de meses, para que tuviéramos un problema de suministro. Hemos conseguido esa cobertura mucho más allá de lo normal, porque son soluciones que están hechas para la sequía, pero cubren la posibilidad de turbiedades. En el caso de Los Andes, planta El Sauce, sí son estrictamente para turbiedades, y si un evento de turbiedad tiene más longitud de lo que está preparada la planta, podríamos tener un problema acotado. Pero en general, en toda la región estamos muy cubiertos.

- ¿Qué nos diferencia de Santiago en el aspecto geomorfológico relacionado con el suministro de agua? ¿Somos más frágiles o más resilientes?

- Una de las ventajas de la Región Metropolitana es que funciona absolutamente por gravedad. Ellos tienen la cordillera y también el embalse El Yeso, con una acumulación importante, baja por gravedad y se reparte en los ríos Maipo y Mapocho. Pero si hay un evento de turbiedad, se mezcla con ella y pasa a ser agua turbia también. En nuestro caso tenemos una capacidad de acumulación mucho menor que El Yeso, que es Los Aromos y Peñuelas -que desgraciadamente está seco-, y en el caso de Los Aromos cada invierno hay que llenarlo para gastarlo en el verano. Entonces, tenemos de malo que hay que usarlo como pulmón anual, llenarlo y vaciarlo. Pero lo bueno es que está conectado por una tubería a nuestra planta de Concón, así que el agua embalsada no tenemos que mezclarla con la del río para que llegue a la planta, y eso da una autonomía mucho mayor cuando hay eventos de turbiedad.

MEDIDAS FRENTE AL DÉCIMO SEGUNDO AÑO DE SEQUÍA

- Entramos al décimo segundo año consecutivo de sequía con Los Aromos al 15,8% de su capacidad, Peñuelas con 0,9% y La Luz, que es más pequeño, con 77,5%. ¿Qué podemos esperar para el año en materia de suministro?

- Una cosa es lo que podemos esperar, y la otra es la filosofía con la que debemos trabajar. Tenemos que esperar lo mejor, pero estar preparados para lo peor. Las previsiones hablan de un año neutro o con Fenómeno La Niña, lo cual quiere decir que muy probablemente será un año seco. Y lo que debemos hacer es preparar nuestras instalaciones para que así sea.

- ¿Y cómo lo están haciendo?

- En todo el sistema del Gran Valparaíso, que es el que más complicaciones tiene por la sequía, ya que es muy grande y sus fuentes están en zonas del río donde hay una afectación importante, lo que hemos hecho ha sido fundamentalmente fortalecer la capacidad de respaldo de la planta Las Vegas, que está al final de la segunda sección del Aconcagua. Eso con fuentes subterráneas que nos permitan inyectar aguas en el caso de problemas con las fuentes superficiales a esas alturas. Y en el caso de Concón, hemos desarrollado una capacidad de extracción de aguas subterráneas del acuífero del Aconcagua mucho más potente en los últimos años. También una planta especial de tratamiento de manganeso para no dejar agua sin utilizar. Y por supuesto, el proyecto estrella que es la gestión eficiente y el relleno artificial del embalse Los Aromos.

- Al inaugurar la conducción Los Aromos- Concón, el ministro de Obras Públicas señaló que dará mayor seguridad hídrica a más de un millón de habitantes del Gran Valparaíso y el Litoral Norte y que es una solución de largo plazo, hasta 2040.

- La tubería que une el embalse con la planta, posibilita utilizar cada gota de agua sin perder nada, y además, durante los pocos meses que tenemos agua en la cuarta sección del Aconcagua, tomarla en la planta e impulsarla hasta Los Aromos. Es una tubería reversible que, cuando estamos extrayendo agua del embalse, se usa en el sentido embalse-planta. Y cuando hay agua en el río, opera en el sentido río-embalse para llenarlo artificialmente. Incluso en los años de peor sequía somos capaces de bombear por dos meses y eso nos permite acumular cinco o seis millones de metros cúbicos adicionales a lo que normalmente usamos, lo que da espaldas suficientes para aguantar estos periodos. Calculo que con todas estas obras, estamos capacitados para llegar al año 2040, en una serie histórica razonable. Si la serie histórica de acá al 2040 es que no va a caer una gota, nos estaríamos convirtiendo en un Antofagasta y ahí hay que pensar qué hacemos.

CONEXIÓN CON AGUA POTABLE RURAL Y DESALACIÓN

- Al informar a los senadores de la región el balance de la sequía, usted señaló que algunos de los proyectos permitirán la interconexión de APRs que están en situación crítica a las redes de Esval en el futuro. ¿Cuántos sistemas y de qué zonas?

- Los sistemas de Agua Potable Rural funcionan de manera autónoma y dependen de la Dirección de Obras Hidráulicas. Muchas de sus fuentes son pozos de poca o gran profundidad, que con la extensísima sequía se han visto muy debilitados tanto en los caudales como en la calidad del agua. Nosotros hicimos un estudio que nos permitió determinar que el 75% de los APRs de la región está a menos de 10 kilómetros de la red de Esval, que con una extensión les podría entregar agua para que ellos la gestionasen autónomamente, como dice la ley. Pienso que este proyecto que estamos desarrollando con la DOH, y que obviamente necesita el visto bueno de cada comunidad de agua potable rural, sería muy positivo. Muchas veces nos encontramos con la reticencia y desconfianza de los APR, que piensan que de alguna manera nos estamos inmiscuyendo en su gestión. Pero nuestra intención no es esa porque además la nueva ley contempla que nosotros no podemos gestionar el agua potable rural, sino solo poner la fuente a su disposición.

- ¿La planta desaladora está suspendida?

- No, hay varios proyectos de desalación de otras compañías en la Quinta Región y nosotros estamos conversando con ellos porque estamos convencidos de que llenar la costa de proyectos de esta naturaleza no tiene mucho sentido. Resulta mucho más lógico aunar las necesidades de distintos sectores, como el consumo humano, el industrial y el agrícola, de modo que si se necesita desalación, esté concentrada en pocos proyectos como para hacerlos óptimos. Estamos en contacto con ellas y nuestra idea es tener la desalación como una fuente de respaldo; generar una relación cercana y estar en línea para que, cuando eso pueda ser una necesidad permanente, los proyectos tengan la capacidad de crecimiento y la posibilidad de cerrar contratos con nosotros y que ofrezcan a ambas partes la seguridad adecuada.

Rotura del colector y más facultades para sss

- Respecto de la rotura del colector intercomunal de alcantarillado a la altura de Las Cucharas, ¿por qué se rompe una tubería de esa naturaleza con un temblor chico, si la norma chilena de sismo resistencia para infraestructura es muy rigurosa?

- Se está realizando una investigación al respecto, pero se suman varias situaciones y probablemente el sismo sea lo que definitivamente activa la rotura. Ahora bien, es cierto que en la zona de la tubería había lo que probablemente sea un vertedero ilegal, pues habían tirado encima grandes piezas de concreto, y otras circunstancias que hay que tratar con cuidado porque, como digo, todavía están en investigación, pero puede ser que juntas configuren un escenario en que el sismo gatilla lo ocurrido.

- El senador Navarro anunció un proyecto para aumentar las competencias de las superintendencias, en este caso sobre las sanitarias, y permitir que los consumidores las puedan demandar ante episodios que atribuye a inoperancia. ¿Qué opina?

- No sé a qué refiere exactamente ese proyecto, pero si alguien piensa que la Superintendencia no tiene la capacidad de fiscalización ni de seguimiento, de sanción o interlocución directa con los clientes, está muy alejado de la realidad. Si hay que fortalecerla, tendría que saber exactamente en qué ámbitos, pero nosotros no tenemos ningún problema porque la idea es que la Superintendencia nos fiscalice todo lo que quiera, y que con esos controles sepa que estamos realizando nuestro trabajo como tiene que ser, y sobre todo, que los usuarios estén tranquilos en cuanto a que estamos haciendo las cosas como se tienen que hacer. Como tenemos la tranquilidad de que esto es así, no tenemos ningún problema en que se nos fiscalice las veces que sea necesario. 2

Al entrar al décimo segundo año de sequía, una cosa es lo que podemos esperar, y otra es la filosofía con la que debemos trabajar. Tenemos que esperar lo mejor, pero estar preparados para lo peor. Las previsiones hablan de un año neutro o con La Niña, es decir, muy probablemente será un año seco".

Estamos prácticamente a prueba de bombas porque somos capaces de vivir sin el río. La cuarta sección del Aconcagua, donde está la planta de Concón, no ha tenido nada de agua durante 215 de los 365 días. Debimos preparar nuestro sistema para sobrevivir dos tercios de la temporada sin esa agua".

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Inversiones: esfuerzo centrado en el desarrollo de capacidad productiva

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Más de $300 mil millones invirtió Esval en los últimos cinco años y prevé una suma similar para el quinquenio que viene. José Luis Murillo subraya que "el esfuerzo ha estado centrado fundamentalmente en el desarrollo de capacidad productiva, de grandes proyectos como el de Los Aromos". Ejemplifica con la ejecución varios pozos en la zona de Llay-Llay, las interconexiones de los derechos hídricos del empresario agrícola Jorge Schmidt con la planta Las Vegas, cuya zona de captación también se ha mejorado; con una tercera línea para tratamiento de agua, especialmente la de pozos, en la planta de Concón, donde también se ha desarrollado una planta de manganeso, así como pozos adicionales con una capacidad de consumo para una zona completa como San Antonio. "Pero también ejecutamos proyectos para la reposición de redes, hemos tecnificado de manera muy importante nuestra red, que es la que tiene más sensores y la más monitorizada de Chile para prevenir posibles incidencias y hacer una gestión más eficiente. Hemos implementado también nuevos sistemas de ampliación y cambios de tecnología en plantas de tratamiento de aguas servidas. Son inversiones que en general hace todo el sector sanitario, pero que en nuestro caso, en la Quinta Región, donde sufrimos de manera especial y muy virulenta el cambio climático, nos hace estar especialmente enfocados en temas productivos y de fuentes adicionales para conseguir los espacios que necesitamos". 2