Katherine Escalona M.

Más de tres horas duró ayer el Concejo Municipal extraordinario y autoconvocado para analizar el informe elaborado por el Departamento de Control del municipio de Valparaíso sobre el "Programa Comunitario de Fortalecimiento de Espacios Públicos y Patrimoniales de la Comuna de Valparaíso", que da a conocer una serie de anomalías administrativas por parte de la casa consistorial.

Las conclusiones del documento fueron refutadas por la administración del alcalde Jorge Sharp, quien descartó cada uno de los cuestionamientos y puso en entredicho el trabajo realizado por la entidad fiscalizadora municipal, deslizando una eventual mala fe de los responsables. Dijo que todo estaba en regla y cuestionó el informe por el daño, según su visión, provocado a los 15 funcionarios nombrados en el programa del año 2019.

"Estos trabajadores han sido expuestos no por un eventual problema administrativo que se pueda haber incurrido, no por la responsabilidad de la jefatura, sino por la aparición de un informe que, en definitiva, expone los antecedentes de tal forma que deja en situación de indefensión y de atentación a la dignidad de esos trabajadores ante la opinión pública y el show mediático que se ha construido sobre el tema", aseveró Sharp.

Insistió que "la Municipalidad de Valparaíso actuó en todo momento conforme a la ley, (...) no transgredimos la ley, no transgredimos la importante opinión del Concejo Municipal, actuamos incluso acorde a nuestros propios decretos alcaldicios que hemos ido dictando", restando validez a la controversia que, a su juicio, pudo haberse visto en una comisión y no citar a sesión extraordinaria. "Es un ataque electoral" que se enmarca en las elecciones municipales, expuso en sus duros descargos.

Sharp relevó que "esta administración reguló la contratación de trabajadores a honorarios, (...) cuestión que tampoco nunca observó el Departamento de Control", como tampoco el Concejo Municipal.

En tanto, el director jurídico municipal, Nicolás Guzmán, analizó el informe y descartó cualquier irregularidad, como fue la tónica de todos los funcionarios que intervinieron en la sesión de ayer. El abogado afirmó que, por normativa, el programa no debía pasar por el Concejo y que las contrataciones estaban en regla. Sobre las fichas de desempeño de los contratados que no figuran en 2020 y este año, lo atribuyó a la pandemia. "El programa existe, el decreto alcaldicio existe, los contratos existen, la estación de servicio existe y las fichas de desempeño, al menos hasta el año 2019, por lo que acabo de señalar (pandemia), existen", sostuvo Guzmán.

Funcionarios

Waldo Burgos, Pamela Ampuero y Macarena Carroza, funcionarios aludidos en el informe, también hablaron. El primero, exdirigente vecinal, detalló que "manifestamos nuestro malestar por el actuar irresponsable del (departamento de) Control, que permitió la filtración del informe, desprolijo desde el punto de vista de su procedimiento, ya que como señalamos anteriormente, no se requirió el informe de los directores ni jefes responsables para recolectar información ni tampoco se nos citó".

La historiadora Macarena Carroza descartó cualquier anomalía y validó incluso con ejemplos en millones de pesos lo que sería su importante gestión en este programa.

Los funcionarios presentes en el Concejo y que representaban a 11 de los 15 contratados en 2019, pidieron al municipio tomar acciones legales contra quienes los han sindicado como presuntos operadores políticos o que no habrían cumplido sus funciones profesionales establecidas.

También apuntaron a los concejales que cuestionaron el programa, los cuales incluso deberían pedir públicas disculpas.

Justifica conclusiones

Tras escuchar las intervenciones, el concejal Iván Vuskovic (Ind.) propuso que ante el tenor de las imputaciones era necesario escuchar al director de Control, Christian Paz, cuya repartición realizó el informe ahora impugnado por gran parte de la administración de Sharp. El funcionario subrayó que nunca actuó de "mala fe".

Paz recalcó que "se ha dicho, o al menos así lo entendí, que yo habría actuado de mala fe, con mala intención, cuestión que, en verdad, no es así alcalde. Los que me conocen saben que no es así, yo soy un funcionario que lleva 18 años en la municipalidad, nunca envuelto en un sumario, nunca he tenido alguna anotación de demérito".

Contrariado por los cuestionamientos, lamentó "que se me atribuya mala intención, mala fe o dolo, creo que es injusto con mi trayectoria profesional en el municipio". Reconoció que "alguien puede tener una visión diferente respecto del contenido de mis conclusiones, eso es válido, eso siempre es posible. De hecho, Nicolás (Guzmán) da cuenta de que su visión jurídica es diferente a la mía, eso es posible, pero de ahí a sostener (...) que yo habría actuado de mala fe, lo repito, lo quiero descartar categóricamente".

El abogado insistió que actuó dentro de su rol. Detalló que "mi labor es hacer seguimiento a esa auditoría operativa y verificar si se han adoptado o no medidas correctivas" e informó que, hasta ayer, no había recibido ninguna reconsideración o documento por parte de la administración. Los funcionarios de planta, la Multigremial de Trabajadores y los concejales apoyaron su gestión.

La edil Marina Huerta (DC), quien verá la materia en la Comisión de Régimen Interno, consignó que Paz no está inventando, sino que "está relatando hechos y eso parece que molesta". Esbozó que "esta administración habría creado una suerte de municipio paralelo, es una cuestión muy grave y tiene que ver con los honorarios externos". Llamó a tomar acciones concretas, las que no fueron dadas a conocer por parte de la administración. El alcalde Sharp precisó que iba a estudiar el caso. Un eventual sumario no se estableció.

"No transgredimos la ley, no transgredimos la importante opinión del Concejo Municipal, actuamos (...) acorde a nuestros propios decretos".

Jorge Sharp, Alcalde de Valparaíso

"Que se me atribuya mala intención, mala fe o dolo, creo que es injusto con mi trayectoria profesional en el municipio".

Christian Paz, Director de Control

El intendente regional, Jorge Martínez, respondió a las duras palabras que el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp -que busca su reelección-, hizo a La Estrella de Valparaíso, donde lo acusó de confundir su rol político con el profesional, complicando las gestiones con la comuna que dirige.

"Independiente de las diferencias, debe primar el interés común y ese es el problema que hemos tenido con el actual intendente. Creo que el intendente confunde su rol político con el profesional, más parece un jefe de campaña que una autoridad que piensa en el desarrollo de la región", dijo el jefe comunal.

Al respecto, Martínez le respondió también en fuertes términos: "Lamento mucho que, nuevamente, no haya estado en la reunión de alcaldes de ayer, donde se habría podido dar cuenta que nuestro esfuerzo está centrado en la pandemia y en el apoyo económico a los más vulnerables en todas las comunas, incluyendo Valparaíso, evidentemente. En todas las comunas, independientemente de la ideología que tenga el alcalde, porque nos interesa la población y no hacemos ninguna discriminación".

Añadió: "Estoy dedicando todo mi tiempo a la pandemia y a apoyar económica y socialmente a nuestros sectores más vulnerables. Le recomiendo que, en vez de estar generando discusiones artificiales, se dedique a los problemas que tiene en su municipio, que, por lo que sé, son muchísimos y algunos bastante graves. Que se concentre en eso".