Cartas
Núcleo de la sociedad
Como otros, este año de teletrabajo ha sido un encierro con mi señora y dos pequeños en un departamento, balanceando lo doméstico, lo familiar y lo laboral. En esto último, por suerte, he podido flexibilizar y rendir.
Sin embargo, no todos tenemos la misma suerte. Una amiga tiene reuniones desde las 9 am hasta las 4 pm. ¿Cómo cuida a su hija de 2 años? Otra cercana asiste a una videoconferencia de 8 am hasta la 1 pm, de forma ininterrumpida, tras una preparación que exigió todo el fin de semana. ¿Qué crianza es posible con este régimen?
"La familia es el núcleo fundamental de la sociedad", según dicta la actual Constitución. Pero ¿rige esta afirmación al sector público y privado, a los mandos medios y jefaturas que propician estos sacrificios domésticos? Obviamente, no.
Si lo antes dicho no cambia, nos desplomaremos, cual edificio sin base.
Ignacio Javier Miranda Saldívar
Educación de los hijos
En carta dirigida a El Mercurio de Valparaíso, mi colega Camila de la Maza, abogada de la Corporación Opción, refiriéndose a la misiva que yo enviara anteriormente a este mismo matutino acerca del derecho preferente de los padres a educar y guiar el desarrollo progresivo de sus hijos, y en la que afirmo que el Estado no debe intervenir en ello, excepto si se trata de situaciones de vulnerabilidad, nos recuerda que también el Estado debe proteger los derechos de la infancia por medio de políticas públicas en beneficio de la niñez, como, por ejemplo, una oferta pública educacional dirigida a todos los niños y niñas. Concuerdo con ella.
El punto que se abre, entonces, es el contenido de esas políticas públicas y el derecho de los padres a pronunciarse sobre su aceptación. El ejemplo de la educación es un muy buen ejemplo. ¿Cuál será el contenido de la política educacional del Estado hacia los niños? ¿Se transmitirán conceptos ideológicos o culturales que impliquen una visión única y oficial de la vida? ¿Podrán los padres, según sus propias creencias, rechazar dichos contenidos, o les serán impuestos vía ley o decreto?
Mi afirmación es que, por sobre todas las cosas, son los padres los únicos capacitados y naturalmente llamados a decidir acerca de la formación valórica y cultural de sus hijos, como de guiar su progresiva autonomía, y el Estado no puede ni debe, ni siquiera a pretexto de garantizar derechos, intentar sustituirlos, obligarlos o contradecirlos; su tarea es complementaria.
Francisco Bartolucci Johnston Abogado
Plan de Descontaminación
El lunes 5 de marzo, este medio publicó una noticia titulada "Vecinos cuestionan en tribunal ambiental la reformada red de monitoreo del aire", en la que se sugiere, erróneamente, que el móvil de la ciudadanía sería frenar la política pública.
Tal como sucedió con el Plan de Descontaminación, si bien presenta mejoras respecto de la versión anterior, también presenta retrocesos. A pesar de haber una mesa en la que estos temas se deben abordar (CRAS), la lógica impositiva del Estado continúa; y las personas que sufrirán las consecuencias de la implementación de una política que no se hace cargo de la realidad del lugar, fueron tratadas como espectadores. Esta realidad contrasta con lo ordenado por la Corte Suprema en el caso de las intoxicaciones masivas del 2018.
Los peaks de SO2 siguen envenenando a la población bajo el amparo de la ley, en medio de una pandemia que afecta principalmente los sistemas respiratorios -tan maltratados en estos lugares-, implicando un riesgo latente de enfermar y morir, ante la ausencia de camas UCI en la zona.
Es incorrecto culpar a la ciudadanía por ejercer sus derechos y buscar la mejora de las políticas públicas, las que no apuntan al resguardo de los derechos de las personas y comunidades, que han sido injustamente destinadas "al sacrificio".
Alejandra Donoso Cáceres Abogada, Máster en DD.HH., directora ejecutiva ONG Defensoría Ambiental
Bienes esenciales
¿Desde cuándo el alcohol es más necesario que las prendas de vestir? Concordamos que ni lo primero ni lo segundo son de primera necesidad; sin embargo, la vestimenta es más necesaria, ya que todos los días la utilizamos y nos cambiamos.
Esta decisión de las autoridades es totalmente absurda, no sé qué criterio están utilizando para elegir prioridades. ¿Acaso los políticos creen que nos podemos vestir de alcohol? El lunes de cerveza, el martes de pisco, el miércoles de whisky y podría continuar cambiando un licor todos los días.
Ojalá que las medicinas y el alimento, por lo menos, sean de primera necesidad.
Montserrat Rodríguez Ríos
Frases presidenciales
El Presidente Piñera, al lanzar el plan de vacunación contra la influenza, precisó que "nunca la noche está más oscura que justo antes de amanecer". En enero pasado, en la Enade, en medio de una esperanzadora adquisición de vacunas y mejores expectativas económicas, había también declarado: "Estamos viendo una luz al final del túnel".
Evidentemente, la autoría de la primera cita no pertenece a ningún guionista de la película "El caballero de la noche", como han deslizado algunos medios, más bien se atribuye al teólogo, erudito e historiador inglés Thomas Fuller, impresa en una de sus obras de 1650, "La hora más oscura es justo antes del amanecer". Y aunque cautivante y emotiva, la agudeza no parece ser científicamente correcta. No existiría mayor oscuridad en dicho momento, aunque sí podría estar más frío. La negrura dependerá de la posición del sol, de la luna, del observador y de otras consideraciones.
La segunda idea, del túnel, aparece ya impresa en publicaciones del mundo anglosajón en el siglo XIX, y hasta puede verse plasmada en la tabla "La Ascensión al Empíreo", de "El Bosco" (alrededor de 1500).
Otros epigramas, también de Fuller, propicios para discursos presidenciales y la sombría situación actual de Chile, son: "Todo es muy difícil antes de ser sencillo" y "El hombre honesto no teme la luz ni la oscuridad". Por supuesto, para ganarle a la pandemia y a la crisis económica, siempre es posible desempolvar el añoso lema de nuestro primer escudo nacional, el de la Patria Vieja, que rezaba: "Post tenebras lux".
Kenneth Ledger Toledo
Controversias y soluciones
Los chilenos tenemos una capacidad impresionante para meternos en problemas. Muchas veces entramos en discusiones que no tienen fundamentos, pero que son una posibilidad de hacer noticia. Nos hemos acostumbrado a criticar todo. No aceptamos que otros tengan una opinión distinta a la nuestra. Considero que las controversias deben ser llevadas de forma tal que nos entreguen resultados positivos y no derivar en peleas con medio mundo.
Jorge Valenzuela Araya