Críticas de core UDI al intendente
Jefa de bancada en el Consejo Regional, María Fernanda González, acusó a Jorge Martínez y al Gobierno Central de poca sintonía con la región. Que los duros cuestionamientos provengan desde el interior de Chile Vamos replica el quiebre que vive el Ejecutivo con muchos de sus parlamentarios.
Pocos días después que el Presidente Sebastián Piñera recibiera en el Congreso un portazo de su propia coalición al intento de oponerse al retiro del 10% de los fondos previsionales, el intendente de Valparaíso, Jorge Martínez, tiene que enfrentar las críticas de su sector en el seno del Consejo Regional. Aunque ambos fenómenos son diferentes en varios niveles, sí responden al mismo distanciamiento y quiebre que hoy es evidente entre el Ejecutivo -o sus representantes regionales- y los dirigentes de Chile Vamos que ostentan cargos de elección popular.
La consejera regional por Valparaíso y jefa de bancada de la UDI, María Fernanda González, abrió los fuegos: emplazó al Gobierno Central a tener mayor sintonía con las demandas de la ciudanía y criticó la priorización hecha por el Ejecutivo -a cargo del intendente Martínez- para los proyectos que finalmente debe aprobar el Core. "Somos nosotros, los consejeros regionales, y seguramente los alcaldes y concejales de la zona, quienes reciben todas las quejas y consultas sobre por qué los beneficios no llegan a los más afectados o cuáles son los reales proyectos que se están generando en la Región de Valparaíso para reactivar la economía, recuperar el empleo. (…) Y la verdad, muchas veces no sabemos qué responder, porque no sabemos o no comprendemos cuáles son las estrategias y qué énfasis tienen tanto el Gobierno Central como el Gobierno Regional", espetó González.
Aunque a dicha petición se sumaron representantes de otras bancadas, los dardos principales vienen desde el propio Chile Vamos. La crítica a un Ejecutivo debilitado por los efectos de la pandemia no representa un riesgo para quienes las emiten, pero del mismo modo surge la duda razonable sobre la estrategia que usan los consejeros, quienes en siete meses más deben poner su nombre en una papeleta y competir por su reelección o, si lo ambicionan, elevar sus expectativas para alcanzar un cupo en la elección de diputados. Es cierto que crispar el ambiente político regional ha sido una herramienta eficaz en esta pugna eterna entre cores e intendente por la asignación de los recursos regionales; sin embargo, vivimos un ambiente distinto, particularmente tenso a nivel nacional, ad portas de elecciones inéditas -constituyentes y gobernador regional-, y con necesidades crecientes debido a la pandemia. No le sirvió al argumento de la consejera UDI que el mismo presidente de la instancia, el PPD Manuel Murillo, descartara la falta de participación en decisiones sobre la inversión regional ("el diálogo ha sido completamente directo", expuso). Lo que queda, por tanto, es una tarea al interior de Chile Vamos, cuyos dirigentes se han enfrascado con demasiada frecuencia en disputas internas y rencillas pequeñas, sin atender a los efectos que dichas pugnas pueden generar en el trabajo que requiere el manejo del Poder Ejecutivo. Desde el lado de la Intendencia, Martínez debe comprender que el ejercicio de un cargo tan importante requiere del esfuerzo colectivo más amplio posible.