Diagnóstico preciso para un tratamiento personalizado
El primer paso para ofrecer un tratamiento adecuado para los sarcomas, incluyendo los retroperitoneales, es realizar un diagnóstico preciso. Esto es, poner el nombre y apellido correcto a cada tipo y subtipo, lo que es relevante puesto que sus pronósticos son distintos y algunos de ellos cuentan con terapias específicas.
"La palabra sarcoma implica un universo de tumores. Decir sarcoma es muy amplio, y clasificarlos según sus aspectos morfológicos (forma y distribución de las células), como se sigue haciendo en muchos lugares, tiene poco impacto en la toma de decisiones, ya que no estamos extrayendo la información más importante para categorizarlos correctamente: cuál es la biología especial de cada tumor, qué vías metabólicas y oncogénicas utiliza para crecer, evadir la respuesta inmune, perpetuarse o producir metástasis", explica el Dr. Felipe Buscaglia, anatomopatólogo de FALP.
Esta es la función de las técnicas de biología molecular aplicadas a los estudios de anatomía patológica que se han desarrollado en los últimos años. Por un lado, la inmunohistoquímica utiliza anticuerpos para buscar proteínas (marcadores) específicas que se expresan en determinados tumores; a ella se ha sumado la Hibridación Fluorescente in Situ (FISH), que usa sondas (fragmentos de ADN marcados) para identificar alteraciones en el material genético. "La más común en los sarcomas son fusiones de genes (translocaciones de cromosomas) que no deberían unirse", ejemplifica el especialista.
FALP cuenta hoy con los paneles de inmunohistoquímica y FISH más completos del país, reuniendo en su Laboratorio de Anatomía Patológica una variedad de marcadores y sondas que permiten diagnosticar prácticamente todos los sarcomas de tejidos blandos.
"Hemos tomado el desafío de liderar este proceso de innovación en Chile y Sudamérica. Gracias al nuevo panel de FISH, hemos podido diferenciar más tipos y subtipos de sarcomas. Junto con la tecnología, es clave la experiencia acumulada por el equipo de patólogos en esta enfermedad poco frecuente, lo que obedece al volumen de sarcomas al que estamos expuestos: el año pasado hicimos casi 150 diagnósticos y este año proyectamos llegar a los 200, lo que es considerable. En definitiva, con estas herramientas es posible cambiar el pronóstico de un paciente, que con un diagnóstico basado en la biología de su tumor puede acceder a un tratamiento personalizado", finaliza.