Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Deportes
  • Clasificados
  • Servicios
  • Espectáculos

(viene de la página anterior)

E-mail Compartir

Eso sí, la cientista política de la Universidad de Valparaíso (UV), Javiera Arce, considera "un desacierto de lo más absoluto" mantenerse en la línea de las primarias convencionales, que es el mecanismo que ha impulsado Paula Narváez. "Acabamos de tener una primaria donde uno de los sectores convocó a 1.600.000 personas, el otro casi un millón más. Ni por mucho eso va a convocar una primaria de la ex Nueva Mayoría, y eso inmediatamente te puede dejar muy mal parado para la elección general, y muy deslegitimado. No veo a la gente muy entusiasta yendo a votar por Yasna o por Paula, de hecho no veo a la gente entusiasta por Paula", sostiene.

Por su parte, el académico de la Facultad de Artes Liberales de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI), Fernando Wilson, indica que es una incógnita la competitividad de la centroizquierda y que con el diario del lunes "podemos decir que para Yasna Provoste fue un error brutal no haber aceptado las permanentes incitaciones del PS y de Paula Narváez, de haber hecho una primaria convencional. Eso le habría permitido conquistar un voto, erigirse y haber podido competir en la intensa campaña que tuvo lugar, particularmente en el último mes y sobre todo en las últimas dos semanas. Jugó a la segura, se confió, se dejó estar en un escenario extremadamente dinámico y ahora tiene que partir recuperando camino".

Ante este escenario, el magíster en Ciencia Política estima que la figura de Sichel podría "ser una alternativa muy llamativa para los conservadores, los tradicionales 'guatones' y 'colorines' de la DC", y ser una "amenaza real" para la presidenta del Senado. Y por el lado de la izquierda, sostiene que el nombre de Boric supone un nuevo problema, ya que para dicho tipo de votante ella "siempre va a ser DC, lo que la convierte en algo simplemente intocable, está al mismo nivel que la derecha".

Por lo mismo, entendiendo la dificultad de crecer hacia cualquier lado del espectro político, sumado a la posibilidad de algunos votantes de centroizquierda prefieran a Boric, Wilson indica que la candidatura de la exministra de Educación "hoy día, claramente está en una posición muy disminuida respecto a cómo estaba el sábado (pasado) en la noche, y en este momento me atrevería a decir que su rol, más que aspirar realmente a la Presidencia o disputar la segunda vuelta, es apuntalar la campaña parlamentaria de la DC".

"En este minuto, va a tener que morder la bala y enfrentar una candidatura de mal pronóstico, o al menos que parte bastante atrasada. Va a ser muy interesante ver las encuestas de la próxima semana, en términos de que este escenario es completamente nuevo, de cómo se baraja la interacción Boric-Sichel, y derivado de ello, la capacidad que tenga Provoste de conquistar el centro", agrega.

Sacar votos en la izquierda

Jorge González, ingeniero comercial y doctor en Ciencias Políticas de la Universidad de Texas, en Austin, asume la compleja posición en que entra Provoste al debate presidencial e indica que la primera recomendación de asesores electorales "sería que salga a sacarle votos a Boric", aunque enfatiza que el problema "es que el Frente Amplio ha hecho una de sus principales fortalezas ideológicas el poder criticar a la Concertación que se acomodó con el modelo que dejó la derecha, lo que tiene una gran ventaja, porque simultáneamente atacas a la Concertación y a la derecha".

En la misma línea, señala que Provoste tendría que apostar por un votante "más joven que el votante tradicional de la Concertación, que hoy día tiene 15 a 20 años más en promedio que el votante promedio del FA", lo que puede dificultar su comienzo. Además, pone sobre la mesa un tema no menor, que es el financiamiento de campaña y dónde podría ir a buscar recursos para financiarla, frente a un oficialismo que podría contar con una gran suma de dinero.

"El tema de los recursos, sin perjuicio que hay financiamiento público, va a ser un tema crítico, porque la derecha va a hacer de esto una campaña donde va a colocar recursos y la plata no es que haga la diferencia total, pero sí incide. Yo tengo la impresión de que le va a costar mucho a Provoste poder contar con recursos como los que contó la ex Presidenta (Michelle) Bachelet, en algún momento cuando Endesa, Banco Santander, grandes empresas hicieron grandes contribuciones; incluyendo las de Soquimich, pero eso lleva además otras connotaciones", subraya.

Volviendo al plano electoral, González remarca que Provoste "tiene poco tiempo para anular lo que ha sido la estrategia del FA, en la cual ellos van a tener que insistir. Qué es lo que le podría ayudarle y lo que uno escucha por ahí, es que están incentivando a que aparezcan una o más candidaturas a la izquierda de Boric. Yo tengo la impresión que si eso no ocurre, esa campaña (Boric) puede muy rápidamente mostrarse superior a Provoste, manteniendo el mismo contexto anterior, que el FA acusa a la Concertación de haberse achanchado".

Pole position en noviembre

Retomando los llamativos resultados del domingo, Fernando Wilson, asegura que no solo rompe de cierta forma con la "percepción de maximalismo que en algunos sectores políticos dominaba desde el 18-O", sino que también expresa "claramente que lo que se quiere, por parte de la sociedad chilena, sobre todo considerando bastante la maciza participación para un estándar de primarias, 3 millones de personas, es moderación y caras nuevas. Las propuestas de Daniel Jadue, claramente demolieron la seriedad de su propuesta, evidentemente la población chilena no quiere eso, ya sea votantes prospectivos de él que no fueron a votar o votantes ya sea de centro izquierda o de derecha, asustados que fueron por Boric, para noquearlo como tanto se dijo en redes sociales".

Para el caso de Sichel, el académico de la UAI trae a colación los argumentos de Joaquín Lavín, respecto de la necesidad de un gobierno "moderado y negociador", los cuales a su juicio son válidos, "pero su figura ya está demasiado desgastada. En ese sentido, para sectores desengañados con los partidos, claramente Sichel se convirtió en una opción más creíble y se le dio una votación casi recíproca en términos de porcentaje, a la que tuvo Gabriel Boric frente a Jadue, reproduciendo en este caso a Lavín".

"De alguna manera -continúa-, tanto Boric en Apruebo Dignidad, como Sichel en Chile Vamos, fueron matadores de dragones, es decir, fueron capaces de imponerse a liderazgos tradicionales muy fuertes y salir vencedores de manera rotunda, con porcentajes realmente muy grandes, tanto de votos como en porcentajes generales de la votación de cada sector. Ahora, en esa situación, claramente el mensaje es de contención, moderación, y lo que irónicamente tantas veces repitió Lavín, en el sentido de querer cambios dentro de las instituciones y la democracia".

En la misma línea, subraya que ambos nombres "deberían tener la pole position en términos de liderar las expectativas de paso a la segunda vuelta, por la contundencia de sus votos, pero podemos esperar perfectamente ocho millones de votos para la presidencial en noviembre y se requerirían más de cuatro millones para pasar a segunda vuelta, lo cual significaría que en ambos casos están bastante cortos. Sobre todo por la oposición que suscitó Boric en los grupos de ultra izquierda que no estarían dispuestos a votar por él. Todo esto implica dispersión de voto de izquierda y una complicación para Boric, que tiene que optar entre reconquistar a la izquierda dura o buscar a apuntar hacia el centro; pero en esa situación, sus credenciales centristas no son particularmente buenas".

Recambio en las coaliciones

Para la académica Javiera Arce, lo principal de la victoria de los ganadores de las primarias, es que ambos representan "un recambio dentro de ambas coaliciones. De hecho, yo diría que para la centroizquierda incluso, Gabriel Boric encarna un recambio bastante más fuerte que Jadue, que ya tiene cincuenta y tantos años, y que no es precisamente una persona nueva en política".

"Con Sichel pasa una cosa parecida y él tiene una historia política cercana a Orrego, es bien indeterminado, como bien vacío. Se lleva de acuerdo a sus intereses, el contenido político. Él es bien flexible, mucho más que Gabriel se podría decir, y en este escenario, Sebastián Sichel tenía opciones de crecer hacia el centro; y en el caso de Gabriel Boric, yo creo que puede disputar algunos votantes de la izquierda, pero no me desgastaría con la Lista del Pueblo", complementa la integrante de Red de Politólogas.

Por su parte, Jorge González suma al análisis una eventual participación -principalmente desde la logística- del Presidente Sebastián Piñera en la campaña de Sebastián Sichel, quien "fue el candidato que menos se distanció" del Mandatario, a juicio del analista. "Es el que tiene la historia política más parecida, en el sentido que viene de la DC, estuvo derechamente contra Pinochet e incluso mostró que tenía una distancia con el Gobierno Militar, y en eso contribuye a la memoria y el legado de Piñera de que a Sichel le vaya bien, y mucho más si lograra ganar, lo que no se ve fácil hoy día", detalla.

En cuanto al diputado magallánico, el ingeniero sostiene que podría verse complicado frente a rostros como Sichel y Provoste, cuando tenga que debatir, por ejemplo, su política económica, sobre todo luego de que uno de sus asesores indicara que están viendo en Portugal un camino para transitar hacia un estado de bienestar.

"Una candidatura de Provoste o cualquier candidatura a la derecha o al centro de Boric, lo va a sacar al pizarrón en ese tema, porque Portugal es una economía mucho más de mercado que Chile. Cuando estás compitiendo con Jadue eso no te complica, porque estás simplemente marcando que hay países reales con bastante igualdad, armonía y avanzados en materia de género, despenalización de drogas y otras variables que la juventud ha mostrado que incide en su conducta electoral. Entonces, se le va a hacer más difícil a Boric, que es el que en este momento tiene las mejores posibilidades, y se le va a hacer más fácil a Sichel", cierra González. 2

DISPERSIÓN DE VOTOS: IRRUPCIÓN DE KAST Y nuevos CANDIDATOS INDEPENDIENTES

E-mail Compartir

El mismo día que se iban conociendo los resultados de los comicios, un nuevo integrante se sumaba a la carrera presidencial: el timonel del Partido Republicano y excontendor en 2017, José Antonio Kast, quien hacía oficial el anuncio que también se rumoreaba desde hace tiempo. Pero no es el único, ya que a falta de definiciones, sectores independientes cercanos a la Lista del Pueblo (LDP) -incluida la plataforma política del alcalde Jorge Sharp, Territorios en Red-, han expresado también sus intenciones de competir. Todo esto, cuando se habla igualmente de otros nombres sobre la mesa, como Eduardo Artés (UPA) o Franco Parisi (PDG).

En este escenario con varios candidatos, sobre todo con las primeras alternativas mencionadas, Javiera Arce indica que, por ejemplo, Boric "no tiene nada que hacer con la LDP, no hay un feeling, lo odian, le sacaron una funa el mismo domingo. Sí con los electores de esa lista, porque ojo, esos votos no son de ellos, ellos responden a un malestar generalizado, pero si continúan con el comportamiento que tienen, no sé si esto los va a poder restablecer".

Por el otro lado, la politóloga considera que Kast podría quitarle a Sichel "votos más de la derecha dura", aunque advierte que el exministro "tampoco es que genere tantas reacciones y anticuerpos en esos votantes, para que no nos engañemos; porque detrás de él también está gente como Marcela Cubillos, Chadwick, Allamand, precisamente el ala más regalona de la UDI. Puede mantener su apoyo, lo que sí no va a crecer hacia el sector más radical de derecha; pero el desafío que tiene él es distinto, es cuadrar a los partidos detrás él y yo entiendo que los partidos quedaron medio lastimados".

En tanto, Fernando Wilson plantea que "para Sichel, Kast es una figura no tan complicada, en términos de que sin pactar con él, le permite perfilarse mucho más nítidamente y conquistar el voto de centro de manera más directa; es decir, estoy pensando en un voto DC huérfano. Sichel podría decir 'miren, yo soy realmente de centro, rechacé el acuerdo con Kast', sabiendo positivamente que en segunda vuelta el voto de Kast lo va a preferir a él antes que a una alternativa de izquierda". 2