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En esta labor ha sido fundamental la Dirección de Plan Maestro, que cuenta con un equipo de arquitectos, dibujantes y constructores en permanente especialización en infraestructura universitaria, que encabeza el arquitecto PUCV, Juan Pavez, quien remarca que un aspecto central es mantener una permanente comunicación con los vecinos de las obras en construcción, sobre todo cuando se instalan en sectores urbanos como ocurre con los campus Recreo y Brasil.
"Las normas urbanísticas constituyen la base de cumplimiento de deberes en función de nuestra instalación en un determinado sector, pero adicionalmente reconocemos que nos constituimos en un vecino más de un barrio o área urbana y por tanto debemos mantener una correcta comunicación y atención con las comunidades con las que convivimos, las necesidades y aportes que podemos entregar en materia de seguridad y cuidado del entorno", expone.
Permanencia segura y confortable
Para lograr estos avances, la PUCV ha desarrollado una serie de mecanismos destinados a identificar requerimientos, priorizar adquisiciones, asegurar mantención y evaluar el uso de equipamiento y los recursos didácticos que demandan las actividades de docencia e investigación.
Por otro lado, los nuevos espacios construidos responden a estándares que se han ido actualizando acorde a políticas institucionales, como sostenibilidad ambiental e inclusión, y todas las obras que desarrolla la Dirección de Plan Maestro incorporan elementos arquitectónicos que aportan al desarrollo urbanístico, proporcionando infraestructuras que se integran con la comunidad y potencian su desarrollo.
Uno de los sellos centrales de las nuevas obras, expone el arquitecto Pavez, corresponde a una permanente búsqueda y evolución para generar edificios que favorezcan la permanencia segura y confortable de los alumnos en los espacios universitarios.
"En particular las obras que serán entregadas en el último periodo y las que se encuentran en etapa de diseño, han incrementado significativamente las áreas destinadas al estudio, ocio, recreación y encuentro social. Con esto queremos perfilar un sello que responda a la necesidad de nuestros estudiantes de vivir la experiencia universitaria de manera más prolongada y confortable en el día a día en nuestros edificios", precisa.
El segundo sello se traduce en entregar a la ciudad donde se ubican las sedes una serie de construcciones que se constituyan en un aporte urbano a sus entornos y que sean reconocibles como inmuebles institucionales de calidad.
Criterios de sostenibilidad
El director de Plan Maestro destaca asimismo la incorporación de criterios de sostenibilidad, en particular en relación al control de sistemas mecánicos, para lograr ahorros energéticos reales, disminuir la huella de carbono y mejorar el confort de los edificios en relación a los usuarios.
Ese proceso "se ha realizado de manera paulatina pero constante, iniciando con una completa utilización de iluminación LED, siguiendo con sistemas de climatización eficientes e inteligentes, hasta nuestro último proyecto donde estamos implementando sistemas de recuperación de aguas grises", complementa Pavez.
Si bien hoy existen costos adicionales que se deben asumir al atender los desafíos del cuidado de medioambiente en la construcción, se considera que los beneficios asociados a la sostenibilidad son a mediano y largo plazo. "Es una inversión que genera retornos positivos en los ahorros energéticos, en los consumos hídricos y en el respeto con la situación climática imperante, es por esto que seguiremos en esta vía, aumentando el desempeño medioambiental de nuestras nuevas construcciones", explica el director.
Inmuebles "personalizados"
Al momento de diseñar un nuevo edificio, la Dirección de Plan Maestro establece como primera condición que el diseño se adecúe a las necesidades programáticas y disciplinares de las Facultades y sus respectivas unidades académicas que abarcan diversas áreas del conocimiento.
"Debemos tener una gran flexibilidad de diseño para poder dar respuestas funcionales y estéticamente valoradas a una alta variedad de disciplinas. No es lo mismo un edificio con una alta necesidad de laboratorios y requerimientos de sistemas mecánicos, que otro para Ingeniería o un espacio para el Instituto de Música", donde hay interpretación de instrumentos y se necesitan condiciones acústicas especiales y protección sonora, detalla el arquitecto.
En esa misma línea, agrega, se busca entregar construcciones con amplios accesos y áreas de circulación, con iluminación natural y sol, uso predominante del hormigón y colores neutros, de líneas atemporales definidas y cuidadas, que aseguren una vida útil larga y con flexibilidad, debido a que los edificios universitarios van mutando en el tiempo y deben acoger nuevas líneas de investigación, nuevas carreras y modificaciones curriculares.
El futuro Instituto de Música que se levanta en el Campus Sausalito y que debería estar listo el próximo año es un ejemplo de esas consideraciones. Con una superficie de 2.596 mt2 en cinco pisos, tendrá tres subterráneos, de los cuales solo el -3 queda completamente bajo tierra, ya que los otros tienen un frente abierto con vista a la laguna. En su parte superior culmina en una terraza abierta de 200 metros cuadrados, con vista privilegiada a la misma. El acceso peatonal y conexión con la avenida Juan Luis Trejo se encuentra en el nivel -2, en tanto que en el -1 está la vinculación con el campus, dándole continuidad desde sus extremos. 2