(viene de la página anterior)
Respecto de estos hechos, el director ejecutivo del Instituto Res Pública (IRP), José Francisco Lagos, consideró que la baja de la candidatura de Gino Lorenzini "podía ser previsible por la ley 'antidíscolos' que impide presentarse como independientes a quienes militaban recientemente en algún partido político; pero al igual que muchos, aseveró que lo acontecido con Ancalao "es una situación completamente sorpresiva".
"Esto es grave, no solamente por el hecho mismo de presentar firmas ante un notario fallecido, sino también porque siembra un manto de dudas respecto a lo que ha pasado con las inscripciones previas. Además, el desorden que presenta la lista del Pueblo a poco más de dos meses de ser electos ya configura una especie de prontuario. Políticamente es complejo que aquellos que venían revestidos con un espíritu inquisidor, terminen incurriendo en las mismas o peores prácticas que quienes los antecedían", remarcó el abogado y magíster en Estudios Públicos.
En una línea similar, el vicedecano de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo (UDD), Rodrigo Arellano, estima que lo sucedido con las excartas a La Moneda "demuestra la fragilidad de nuestro sistema político y la inmadurez de la Lista del Pueblo, que en menos de cien días ha rozado el éxito y también el fracaso, como lo del día de ayer (jueves). Es muy raro: hace dos días estaban celebrando su candidatura y ahora estaban anunciando que se iban querellar contra su candidato. Entonces, al final, LDP ha representado lo mismo o peor de la política que vinieron a cambiar y un fracaso de las estructuras que han tratado de armar.
Partiendo desde atrás
Antes de que la información del Servel acaparara todas las portadas, los ojos estaban puestos en la ahora expresidenta del Senado y presidenciable de la centroizquierda, Yasna Provoste. La legisladora por la Región de Atacama hizo oficial su candidatura luego de imponerse con el 60,8% de las preferencias. Pero sin duda lo que más llamó la atención fue la bajísima participación que hubo -alrededor de 150 mil personas-, lo que a juicio de los analistas, no deja en buen pie la candidatura de la parlamentaria.
Al respecto, el académico del Centro de Análisis Político (CAP) de la Universidad de Talca (UTalca), Mario Herrera, pone la pelota contra el piso y asevera que lo acontecido la semana pasada "no constituye un piso electoral para ella", argumentando que no es comparable con una primaria legal, "así como tampoco para los candidatos que fueron a las primarias porque hay votos para el NPS que perfectamente pudieron ir para Boric o Sichel en esa jornada. Frente al debate público puede quedar debilitada su posición, pero no significa que vaya a obtener esa cantidad de votos o que sea relación en torno a eso".
De todas formas, el cientista político vislumbra que en la oposición "va a haber una competencia por el mismo tipo de electorado. Si ya era complicado para Provoste tener a Sichel posicionado desde el centro a la derecha, va a ser más difícil ahora, teniendo más candidatos en competencia disputándose la centroizquierda. Lo que tiene que hacer es posicionarse desde un centro-centro y tratar de captar ese electorado que es mayoritario en Chile. ¿Cuál es la diferencia? Que ella representa a un partido político y es lo que la distingue de todos los que han surgido que son de centroizquierda".
Rodrigo Arellano, máster en Acción Política y Participación Ciudadana en el Estado de Derecho, Universidad Francisco de Vitoria, Madrid, subraya la desventaja con que comienza su carrera presidencial la exministra de Educación. "La candidatura de Provoste, en términos deportivos, parte varios metros atrasada. No solamente por la baja participación que tuvo la primaria, sino que además porque ella misma tardó más tiempo en tomar la definición, lo que le restó competitividad frente a los candidatos más potentes como Sichel y Boric; recordemos que ellos tuvieron una primaria legal, por lo tanto, franja electoral, publicidad en las calles, financiamiento y eso, en términos técnicos, significa que la campaña para ellos partió mucho antes", sostiene.
La inesperada irrupción de meo
Un tema que ha sacado ronchas en la centroizquierda fue el anuncio de la candidatura presidencial Marco Enríquez-Ominami, toda vez que el fundador del PRO integraba uno de los partidos que conformaban la ex Unidad Constituyente, que tras la exclusión de los progresistas, pasó a llamarse Nuevo Pacto Social. Eso sí, y al margen de las críticas por el "camino propio" que tomó el cineasta, hace pocos días se confirmó que el senador Alejandro Navarro y varios militantes de la colectividad en la Región del Biobío abandonaron sus filas.
José Francisco Lagos puntualiza que la aparición de MEO plantea dos cuestiones complejas. En primer lugar, indica que "muestra la incapacidad de Unidad Constituyente de institucionalizar sus diferencias, y el camino propio que han elegido algunos se ha hecho bastante común. Esto ha tenido consecuencias no solamente de que se levantara un candidato de la coalición sin participar en las primarias convencionales, sino que también impide llegar a un acuerdo parlamentario sólido, perjudicando a aquellos que decidieron apoyar a Marco Enríquez-Ominami".
La segunda arista, dice relación con la baja votación que ha tenido desde su primera carrera presidencial (20,13% en 2009) hasta la última ocasión (5,71% en 2017). En ese sentido, Lagos subraya que "es difícil descifrar los intereses que podría tener MEO en una nueva campaña presidencial, considerando que ha ido a la baja desde el 2009 en cada nueva aventura. La supervivencia de su partido queda en la encrucijada debido al impedimento del acuerdo parlamentario y obliga, nuevamente, a personalizar un proyecto que hizo algunos esfuerzos por ser más colectivo. El auge del PRO era MEO, pero también puede ser la razón de su fracaso".
Rodrigo Arellano, en tanto, resta dramatismo respecto del impacto de MEO en cantidad de votos, aunque acentúa que su aparición es importante en términos parlamentarios y en la misma subsistencia de la tienda que ayudó a formar: "Movió las piezas de las parlamentarias. De partida, con la renuncia de Guillier, es muy probable que esto cause la destrucción del PRO como partido, porque va a obtener menos de la representación que requiere en el Congreso. Tengo la impresión de que no va a impactar alguna candidatura particular, sino que va a ser un daño al propio partido, por las posibilidades de hacerlo inexistente".
Una opinión similar es la que expresa Mario Herrera, para quien "el quiebre (en la centroizquierda) solo debilita la posición de Marco Enríquez y su lista parlamentaria. La posición de él mismo, porque es el cuarto intento, igualando a (Salvador) Allende, pero con la diferencia que MEO ha ido reduciendo su votación en cada elección y, además, hay mayor competencia por el mismo tipo de electorado al que apuntaba en su momento. La lista también se debilita, porque por las características del sistema él, con un solo partido, tiene menos posiblidades de resultar electo". 2