Luis Cabrera del Valle

Aunque habían pasado muchas horas desde que anotó el tanto del triunfo en el Clásico Porteño, el joven delantero wanderino Gabriel Rojas todavía no creía lo que estaba viviendo.

"Siento una emoción gigante, estoy muy feliz, porque además es mi primer gol en el profesionalismo y qué mejor que hacérselo al clásico rival. Estoy demasiado contento, disfrutando con la familia, pero pensando también en lo que viene el miércoles ante Universidad Católica", confesaba el héroe del 2-1 contra Everton en Playa Ancha.

Alejado de los focos, el jugador oriundo de Ventanas reveló que su celebración íntima la noche del sábado fue con su pareja y su hija.

"He recibido una cantidad increíble de llamados, mensajes, todos me felicitan, pero lo tomo con tranquilidad, feliz, disfrutándolo con la familia, porque ellos siempre han estado conmigo", reflexiona "Gabigol", quien para los hinchas wanderinos ingresó a una galería de jugadores inolvidables en los clásicos de las últimas décadas, que completan Carlos Muñoz, Víctor Cancino, Joel Soto, Paulo Pérez y el "Caldillo" Vega.

- Me imagino que esto es una reivindicación para usted, que siempre fue goleador en las cadetes y cuando le tocó jugar como titular con Miguel Ramírez lo sacaron de su puesto histórico para ubicarlo como lateral.

- Es verdad, como tú dices siempre jugué en la posición de delantero, hice bastantes goles y marcar ahora en el clásico me da más confianza y ganas de seguir en el puesto en que lo hice ante Everton, que es donde más me acomoda.

- Tengo la impresión que cuando le tocó entrar en ataque anteriormente, si bien no consiguió anotar, siempre generó al menos una jugada de peligro.

- Es verdad lo que dices. Yo llevo trabajando mucho tiempo para estar en el equipo y buscando lo mejor en lo colectivo. Cada vez que me toque entrar voy a matarme por el equipo, sean los minutos que sean. Siempre intentaré hacerlo de la mejor manera.

- ¿Es cierto que soñó hacer un gol en este Clásico Porteño?

- No lo soñé, pero antes del partido le dije a mi señora y a parte del cuerpo técnico de Wanderers que sentía que iba a hacer un gol, y así fue gracias a Dios.

- Cómo fue la jugada, vi que iba a patear, pero llega Berríos a marcarlo, le hace un amague y saca el zurdazo.

- La verdad es que me sentí tranquilo y gracias a Dios tomé la mejor decisión, que fue pegarle al arco. Finalmente fue gol.

- ¿Qué fue lo primero que se le vino a la cabeza cuando observó que la pelota se le colaba en el ángulo a Torgnascioli?

- Sentí una emoción inexplicable, felicidad…de todo.

- En quién pensó primero.

- En mi señora y mi hija, pero no sé, en realidad con todo lo que sentí en ese momento me resulta difícil hacer una descripción.

- Hacerle un gol así al archirrival sí que es soñado.

- Sí, la verdad es que es soñado. Como te dije antes, es como un sueño, de verdad. Me siento demasiado feliz.

- Cómo fue la reacción de sus compañeros. Con quién lo festejó más.

- Con todos, somos como una familia, había una alegría enorme en el grupo. Fue maravilloso.

- ¿Le había anotado a Everton jugando en cadetes?

- La verdad, ni me acuerdo. Pero sí hice bastantes goles.

- Me imagino que esta victoria les da un segundo aire en la lucha por salvarse del descenso, después de la derrota con O'Higgins.

- Retomamos las victorias, pero sabemos que esto es paso a paso, partido a partido. Obviamente siempre queremos sacar los tres puntos, eso al final es lo más importante.

- Tras el partido, Emiliano Astorga dijo que la clave para triunfar en el clásico había sido la actitud de los jugadores, que nunca bajaron los brazos. ¿Está de acuerdo con esa apreciación? Incluso el técnico destacó a los que habían entrado desde el banco.

- Sí, es cierto, la actitud que hemos tenido en estos últimos partidos ha sido muy buena. Todos queremos aportar y sacar lo mejor de cada uno para beneficio del equipo, hay que seguir en esto, tirando para adelante y como dijeron por ahí, hasta que choque la micro.

- Me imagino que con este gol tan importante, también se ilusiona en términos personales con tener más minutos en cancha. No le ha había tocado entrar demasiado en los últimos encuentros.

- Sí, obvio, uno siempre quiere tener hartos minutos en cancha. Es cierto que hice un gol importante, pero debo seguir trabajando, seguir metiendo y así ganármelo. Tengo claro que esto no puede ser de un día para otro, todo tiene su tiempo y se gana con trabajo.

"Siempre jugué en la posición de delantero, hice bastantes goles y marcar ahora en el clásico me da más confianza y ganas de seguir en el puesto ".

"Siento una emoción gigante, estoy muy feliz, porque además es mi primer gol en el profesionalismo y qué mejor que hacérselo al clásico rival". "Es cierto que hice un gol importante, pero debo seguir trabajando, seguir metiendo y así ganármelo. Tengo claro que esto no puede ser de un día para otro".