LA TRIBUNA DEL LECTOR El jubileo de la Reina Isabel II: monarquía en clave feminista
POR MIRKO SUZARTE SKARICA, ABOGADO E HISTORIADOR POR MIRKO SUZARTE SKARICA, ABOGADO E HISTORIADOR
Isabel II de Reino Unido e Irlanda del Norte ha iniciado este 6 de febrero las conmemoraciones por sus 70 años en el trono. A este accedió luego de que su padre, Jorge VI, muriese mientras ella iniciaba su gira por la Mancomunidad de Naciones, enterándose del deceso durante su estadía en Kenia. Como es usual, para junio han sido agendadas las grandes festividades que conmemorarán este acontecimiento, al ser el primer soberano británico que alcanza la marca del Jubileo de Platino.
Se sea monarquista o no, es innegable la trascendencia histórica que Isabel II tiene, lo que permite reflexionar en el papel que otras grandes reinas, mujeres líderes y vanguardistas, han jugado en la historia universal, definiendo los destinos de muchas naciones. Se trata, en muchos casos, de mujeres empoderadas que hicieron uso de estrategias políticas y retóricas para afianzar y conservar su poder, además de impulsar el progreso de las naciones y de haber marcado la vanguardia intelectual de la época.
¿Cómo se entiende la historia británica sin hablar de sus reinas? Otra Isabel, la primera, permitió en el siglo XVI la estabilidad, el progreso y la expansión inglesa. No por nada la época es conocida como la Edad de Oro isabelina, así como al siglo XIX se le llama "victoriano", en honor a la reina que estuvo a la cabeza de uno de los mayores imperios del mundo.
Un tercera Isabel, la de Castilla en el siglo XV, inspirada en el humanismo y en su espíritu cristiano, marcó un punto de inflexión al sostener que los nativos de la América recién descubierta merecían ser defendidos y conservados. Fue ella quien los reconoció tan súbditos como los hispanos que habitaban en Europa, inspirando a la Corona española a prohibir la esclavitud indígena desde el comienzo, algo de lo que muy poco se habla.
¿Cómo hablar de los movimientos ilustrados sin la mención de monarcas como Catalina la Grande y María Teresa de Austria; emperatrices ambas que gobernaron Rusia y Austria durante el siglo XVIII?
Fueron capaces de consolidar imperios, centralizar gobiernos, promover codificaciones civiles y penales, y se enfrascaron en disputas con los terratenientes de la época para intentar acabar con la servidumbre. Fueron mecenas, además, de artistas y financiaron instituciones científicas y exploraciones geográficas.
Si se mira la situación actual, son 44 los países del mundo que son monarquías. En Europa, Dinamarca ha sido regido durante cincuenta años por Margarita II y, Reino Unido, setenta por Isabel. Holanda tuvo una sucesión ininterrumpida de reinas entre 1890 y 2013, mientras que en Tonga, pequeño reino polinésico, Salote Tupou III gobernó el archipiélago por casi cincuenta años.
Aún más destacable es el hecho en que se encuentran Felipe VI de España, Carlos XVI Gustavo de Suecia, Felipe I de Bélgica y Guillermo Alejandro de Holanda: todos ellos serán sucedidos por una mujer, sus hijas. Leonor en España, Victoria en Suecia, Isabel en Bélgica y Catalina Amalia en Países Bajos.
El futuro de las monarquías es, sin duda, femenino.