Tras siete meses desde que asumió como presidente de Santiago Wanderers, Reinaldo Sánchez asistió la noche del miércoles por primera vez a presenciar un partido del equipo caturro.

Aprovechando la cercanía de su parcela en La Cruz, el empresario microbusero y agrícola realizó un pequeño viaje hasta el estadio Lucio Fariña de Quillota, donde el Decano enfrentaba a San Luis por la cuarta fecha del torneo de Primera B y terminó rescatando un empate 1-1 agónico.

Su gesto al abandonar el coliseo ahorraba comentarios. Al igual que el resto del directorio de la sociedad anónima, quedó intranquilo con el desempeño del once dirigido por Jorge Garcés.

Al interior de la mesa central wanderina existe consenso respecto al diagnóstico: el equipo juega mal. Sin embargo, hay una división respecto a la forma de abordar este pésimo arranque del campeonato que tiene a los verdes relegados al puesto doce en la tabla de posiciones con apenas dos puntos en tres duelos.

Mientras en el ala relacionada con los Sánchez aún le queda algo de crédito a "Peineta", entre los representantes de la Corporación la paciencia se agotó y piden un cambio en la banca "antes que sea tarde". La facción ligada a Rafael González, por su parte, observa con atención cómo se desencadenan los hechos, pero también ha representado su inquietud por la forma en que se está jugando.

Carlos Toro, quien ocupa un sillón en el directorio en representación del accionista mayoritario, dijo que en Quillota vio al Decano "bastante mal en el primer tiempo y un poquito mejor en el segundo".

"Estoy esperando que Jorge Garcés entregue más respuestas para lo que está pasando, porque no ha dado", dice el abogado.

El dirigente se pregunta además las razones que tuvo el entrenador para dejar fuera del once estelar a Thomas Amilivia en el partido frente a San Luis.

"Hay cosas que tenemos que ver más profundamente, el tema de los plazos al entrenador hay que estudiarlos a medida que vayan pasando las cosas", señala, añadiendo a modo de sentencia que "no creo que en Valparaíso haya alguien que esté contento con Wanderers en estos momentos".

Pese a que la situación del DT es tratada con sumo cuidado en el bloque mayoritario de la sociedad anónima, porque no quieren repetir los errores de la temporada pasada, cuando el equipo tuvo cinco entrenadores distintos, sí reconocen que en la medida que se repita el juego errático será más difícil seguir sosteniendo a "Peineta".

"El partido con Rangers en Playa Ancha puede marcar un poco la situación. ¿Plan B? Siempre tiene que existir, pero en este momento estamos con Garcés", dicen desde el interior del club.

CRÍTICA de la corporación

Esta postura no es compartida por los representantes de la Corporación Santiago Wanderers en el directorio. Así lo deja en claro la presidenta de la organización que agrupa a los socios caturros, Angélica Escudero.

"Se ve bastante perdido el equipo en general, y en términos de responsabilidades creo que lo que corresponde es preguntarse cuál es el límite para esta situación, porque el torneo de la B es sumamente competitivo y Wanderers es el rival a vencer. Se acaba el margen de error, estamos en los últimos lugares y no se ve un cambio de rumbo", señala la dirigenta.

Mario Oyer, extimonel de la Corporación caturra y quien fue designado como el segundo representante de los socios ante el directorio de la S.A., es más duro en sus juicios y afirma que el relevo en la banca se debe realizar ahora.

"Tenemos jugadores para tratar de hacer algo mejor, pero lo que no tenemos es un cuerpo técnico, ni Jorge Garcés ni Héctor Robles son los llamados a comandar esta Operación Retorno, si no se realizan cambios radicales ahora, el ascenso a la vuelta de la esquina puede convertirse en una quimera", señala el ingeniero en construcción.

A la hora de señalar posibles candidatos a reemplazar a Garcés, tanto Escudero como Oyer mencionan a Pablo Sánchez y Juan José Ribera. Otro que seduce en la Corporación es Miguel Ramírez, sin embargo el expresidente de la agrupación lo ve como una opción más lejana por sus aspiraciones y la forma en que se fue de Valparaíso.

"No creo que en Valparaíso haya alguien que esté contento con Wanderers en estos momentos".

Carlos Toro, Director de Wanderers SAD

"Se acaba el margen de error, estamos en los últimos lugares y no se ve un cambio de rumbo".

Angélica Escudero, Pdta. Corporación Wanderers

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La camiseta de Santiago Wanderers sumó un nuevo auspiciador esta semana. Se trata de la firma Logistic Food Service, pyme ubicada en Placilla que es cien por ciento porteña y que estará presente en una de las mangas de la polera del Decano. El gerente comercial de la empresa, Marco González, se mostró complacido por oficializar la relación con un club que es "patrimonio cultural de Valparaíso". El ejecutivo, quien fue parte de las cadetes de la institución porteña, define el momento de las pequeñas y medianas empresas porteñas como un "resurgir de las cenizas, como el ave Fénix", agregando que "para nosotros es muy gratificante hacer esta sinergia y transmitirle a la comunidad y al hincha porteño que Wanderers está abriendo las puertas. Esto es un sueño que se está consolidando". Por su parte, el gerente general de Logistic Food Service, Gonzalo Silva, manifestó que "esta apuesta nace por la idea de realizar un apoyo al club de nuestros amores".