Jefa comunal acusó haber sido desvirtuada
VIÑA DEL MAR. Por dichos en que desliza posible vinculación de algunas ollas comunes al narcotráfico. Expertos opinan.
Sigue al rojo vivo la polémica en Viña del Mar tras los dichos de la alcaldesa, Macarena Ripamonti, ante la prensa, en que deslizó que algunas ollas comunes habrían sido financiadas por el narcotráfico, declaraciones que, junto a la publicación que de ellas hizo La Estrella de Valparaíso, serán analizadas mañana en el Consejo Regional del Colegio de Periodistas. Al respecto, destacados académicos de Periodismo exponen sus puntos de vista.
El presidente regional del Colegio de Periodistas, Nicolás Ramírez, señaló que "el lunes tenemos Consejo Regional y ahí veremos el tema con los demás consejeros. Se habla de sacar de contexto pero tenemos que verlo en profundidad con todos los antecedentes como para poder consensuar alguna acción o declaración por parte del Colegio al respecto, si así lo estiman los consejeros".
Consultado sobre qué tipo de acciones podrían ejercer, explicó que "nosotros no somos jueces, pero si estimamos que el Diario o la periodista están en lo correcto, no tenemos ninguna atribución en el caso de la alcaldesa, sólo podemos emitir alguna declaración. Ahora, si por el contrario, se estima que la periodista o el Diario pudo haber entrado en algún conflicto o falta, por decirlo así, el curso de acción sería derivar el caso con todos los antecedentes al Tribunal de Ética regional".
"es complicado"
A su juicio, el tema "es complicado", porque la alcaldesa no dice que el narcotráfico financió a las ollas comunes de Viña, sino que "podría" haber financiado a algunas de ellas. "El problema sería de los titulares, con esa transición del 'podría ser', a la afirmación", planteó Ramírez.
La directora de la Escuela de Periodismo de la Universidad Adolfo Ibáñez, Karen Trajtemberg, subrayó que "el Colegio de Periodistas tiene todo el derecho y el deber de pronunciarse sobre distintas materias que, eventualmente, puedan atentar contra la ética periodística".
Para ello, precisó, debe hacerse "un análisis en profundidad que tiene que ser hecho de manera ecuánime, de manera desideologizada, como debe ser el trabajo de las instituciones que se dedican, precisamente, a autorregularnos como periodistas, no solamente el Colegio de Periodistas, sino también el Consejo de Ética de los Medios, donde la alcaldesa o quien sea puede presentar una denuncia para que se investigue la situación".
La académica añadió que "un segundo tema tiene que ver con las autoridades y el deber político que tienen cuando hablan. Efectivamente, la alcaldesa no dice exactamente 'el narcotráfico financió las ollas comunes', pero sí lo deja entrever muy claramente, por lo tanto, tiene que ver también con una responsabilidad política de las autoridades: Si aquí hay alguna duda o alguna sospecha respecto de que hubo algún delito asociado, entonces eso corresponde llevarlo a la justicia y no anunciarlo por los medios".
Similar al caso siches
Trajtemberg hizo notar que esto "fue lo mismo que sucedió con la ministra del Interior, Izkia Siches: Si tenía alguna duda o alguna información al respecto, eso debió haber ido a la justicia antes y no haber sido deslizado -muy claramente, a mi juicio- en las declaraciones de la alcaldesa".
En ese sentido, agregó que "se entiende que la alcaldesa, al igual que otros alcaldes y otras autoridades, están recién partiendo en este tema del mundo político, pero uno de los temas es tener mucho cuidado con lo que uno habla, y cómo lo dice".
Por otra parte, Trajtemberg remarcó que "aquí también hay un tercer tema que quizás es mucho más relevante que los otros dos, y que tiene que ver con el trabajo que efectúan las organizaciones -como lo dice la alcaldesa en su Instagram- de mujeres, que se sacaron la mugre trabajando durante la pandemia, para poder alimentar a gente que no tenía como alimentarse, y donde no sólo el Estado abandonó a esos sectores, sino que los municipios también, ojo ahí. Entonces, deslizar algo que pueda enlodar eso es muy complejo, y no me queda claro que se solucione sólo con reunirse con las dirigentas y hacer un Live en Instagram".
A juicio de la secretaria de Estudios de la carrera de Periodismo de la Universidad Autónoma, Marcela Porto, "lo ocurrido visibiliza la necesidad de tener controles éticos rigurosos en el tratamiento de la información, así como una permanente vigilancia con el uso del lenguaje. En este sentido es importante pensar el ejercicio del periodismo como algo más que el uso de variadas técnicas de elaboración de mensajes, sino que también como una mediación relevante en la construcción del presente social para lo cual debes tener y desarrollar competencias analíticas y de comprensión de la realidad. En este sentido, si las escuelas de Periodismo siguen centrándose puramente en el buen manejo de la técnica, estamos haciendo un flaco favor a la sociedad".
Para el secretario académico de la Escuela de Periodismo de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), Claudio Elórtegui, "cualquier información o declaración que tenga relación con elementos tan complejos como la relación del narcotráfico con cualquier área social, política y cultural, siempre requiere de un tratamiento especial, tanto de la fuente que las emite -en cualquier forma verbal-, como también el tratamiento que se le da posteriormente desde el punto de vista de lo periodístico".
Respetar la dignidad
Elórtegui, quien es doctor en Ciencias de la Comunicación y Periodismo y académico e investigador en Comunicación Política, puntualizó que, tanto el emisor como el retransmisor del mensaje, siempre deben "velar por los cánones deontológicos que están involucrados en este tipo de situaciones, y también por la dignidad de las personas que están involucradas, sobre todo cuando esa dignidad puede estar relacionada con una situación de vulnerabilidad socioeconómica, entonces se requiere de una dignidad en el tratamiento de la información, tanto de quien expresa, como quien reproduce".
Por otra parte, el académico de la PUCV destacó que "habla muy bien del Colegio de Periodistas el que se preocupe y que pueda esto también plantearlo, compartirlo con la comunidad, abrirlo también al debate con las diferentes unidades académicas que tienen que ver con el Periodismo a nivel regional, y que también la ciudadanía pueda tener la información tan relevante y pertinente que pueda emanar del Colegio de Periodistas".
Tras la publicación de la nota en La Estrella de Valparaíso, la alcaldesa subió un video a su Instagram en el que aparece con varias dirigentas de ollas comunes y culpa al medio de desvirtuar su declaración al ocuparla sólo parcialmente. Desde el equipo de comunicaciones de la alcaldesa viñamarina enviaron la declaración completa que dio ante los medios, en la que agregan la parte en que dice "no vamos a generalizar y decir que todas las ollas comunes fueron así, obviamente la mayoría de ellas fueron por gestión autoconvocada de las comunidades".
Caso Ripamonti continúa en el centro de la polémica
"Es complicado (...). El problema sería de los titulares, con esa transición del 'podría ser', a la afirmación".
Nicolás Ramírez, Presidente regional del, Colegio de Periodistas
"La alcaldesa no dice exactamente 'el narcotráfico financió las ollas comunes', pero sí lo deja entrever muy claramente".
Karen Trajtemberg, Directora Escuela Periodismo UAI
"Lo ocurrido visibiliza la necesidad de tener controles éticos rigurosos en el tratamiento de la información".
Marcela Porto, Secretaria de Estudios, Periodismo U. Autónoma
"Se requiere de una dignidad en el tratamiento de la información, tanto de quien expresa, como quien reproduce".
Claudio Elórtegui, Secretario Académico Escuela de Periodismo PUCV
Dirigenta: "Me da vergüenza haberme prestado para salir en el video"
Una de las dirigentas de las ollas comunes que apareció en el video que la alcaldesa Ripamonti subió a su Instagram es Susana Ruminot, presidenta de la Junta de Vecinos Nuestro Barrio Palmas Chilenas, de Forestal, quien antes de la reunión con la jefa comunal, la había criticado en los medios. Consultada sobre la cita con la alcaldesa y otras dirigentas, Ruminot sostuvo que "nos volvieron a utilizar, si hay algo que no soy es una dirigenta vendida. Ella dijo que el tema había salido en reportajes, y claro, yo vi esos reportajes, pero ocurrió en Santiago, así que todo lo que yo dije en los diarios se lo repetí a ella en su cara. De la reunión me fui descontenta, le dije que no ha hecho nada de lo que prometió y que espero que antes de volver a decir algo similar, lo piense primero, y si tiene alguna información, que vaya a la justicia".
Ruminot agregó que el video surgió luego de que "una dirigenta de Manuel Bustos le sugirió que lo hiciera , para aclarar toda la situación, pero yo no quedé conforme, me siento arrepentida y me da vergüenza haberme prestado para salir en ese video".