Inédita ordenanza regulará comercio ambulante en Quilpué
DEBATE. En votación divida, Concejo Municipal aprobó normativa que otorga permisos restringidos y acotados.
Tras un intenso debate y en votación dividida, que se inclinó solo con el apoyo de la alcaldesa Valeria Melipillán, el Concejo Municipal aprobó una ordenanza que regulará el comercio ambulante en Quilpué. A través de la normativa, solo se extenderá el permiso a personas que vivan en la comuna y por un periodo limitado de tiempo, en un inédito acuerdo para ordenar las calles y uso del espacio público.
La iniciativa tuvo detractores. De hecho cuatro de los ochos concejales la rechazaron: Renzo Aranda, Mónica Neira, María Paola Olguín y Patrick Retamales. Aprobaron la ordenanza Carolina Contreras, Paula Castro, Francisco Villegas y Mary Foster.
Evitar segregación
Tras finalizar la sesión, la alcaldesa Melipillán sostuvo que era imperioso regular el comercio ambulante y que, actualmente, existe una ley que mandata a los municipios a "regular y generar una ordenanza para ordenar el comercio informal".
Añadió que también se tomó en cuenta el "malestar y opiniones recibidas a la llegada de nuestra administración, que nos pedía regular el comercio informal en el centro de la ciudad. Históricamente se ha segregado el comercio informal, donde no hay gran concurrencia de personas, criminalizar y reprimir, creemos que esa no era la solución".
Con la medida, recalcó, "proponemos que estos comerciantes informales se integren en el quehacer de nuestra comuna, se consoliden en dos calles específicas, por lo tanto reducimos la cantidad de ambulantes y que se puedan formalizar y, finalmente, puedan salir de las calles".
La ordenanza se elaboró en base a un catastro que partió en octubre de 2021 para identificar e individualizar a las personas que actualmente ejercen el comercio ambulante en el centro de la comuna y determinar quienes cumplen con los requisitos para obtener el permiso, de tal forma que, solo este listado específico de personas, podrá acceder al permiso y no nuevos interesados en ejercer el comercio en la vía pública.
"Estamos trabajando con 149 trabajadores informales que son históricos dentro de nuestra comuna, algunos llevan más de 20 años trabajando en el mismo sector donde hoy podrán obtener su permiso. Buscamos que ellos hoy adquieran todas las herramientas para formalizarse y salir de las calles", puntualizó la autoridad comunal.
Dos calles habilitadas
Entre otras cosas, la ordenanza restringe a solo dos las calles habilitadas para la instalación de los comerciantes ambulantes y establece una ocupación acotada de 1,5 metro de largo, 1 metro de ancho y 0,8 metros de altura del bien nacional de uso público, a esto se suma que, los bienes que comercialicen a diario, no podrán superar las 3 UTM (170.000 aproximadamente) y deberán ser dispuestos en una mesa o mueble que los mantenga alejados del suelo y debe estar cubierto por un paño o mantel que favorezca la presentación de los productos.
"Reducimos la cantidad de cosas que pueden tener en exhibición y también ordenamos que la mercadería que ellos vendan no sea la misma que está vendiendo en el mismo lugar el comercio establecido", explicó sobre la medida Melipillán.
El permiso no es ilimitado, tiene una duración de seis meses prorrogable de manera excepcional. Durante el período que la persona lo posea, estará obligada a participar de las capacitaciones y talleres que la municipalidad ofrecerá para efectos de concretar su trayectoria laboral. Se busca que finalmente se formalicen y no perpetúen su trabajo en la calle.
El concejal Renzo Aranda (DC) se opuso a la medida. Afirmó que contiene "varios vicios. Se habla de una amplia participación y tuvimos presentes a representantes de la Cámara de Comercio, de la agrupación de comerciantes de calle Blanco que están en contra de esta ordenanza".
El edil afirmó que no se traducirá en "ninguna mejora, ya que el comercio se mueve de una calle a otra. No se les establecen mejores condiciones para ejercer el comercio. No veo que este papel aguante la realidad del comercio ambulante en Quilpué".
La concejala María Paola Olguín (PS) también rechazó la iniciativa. Su propuesta apunta a agrupar a los ambulantes en un solo lugar, como lo es la Feria de El Belloto. "Un terreno municipal comprado en $1.300 millones, de los cuales $700 millones se pagaron por adelantado por la concesión de los parquímetros", aseveró.
"Proponemos que estos comerciantes informales se integren en el quehacer de nuestra comuna".
Valeria Melipillán, Alcaldesa de Quilpué
"La ordenanza liderada por la alcaldesa Melipillán no va a resolver ningún problema en el espacio público".
Renzo Aranda, Concejal de Quilpué