Claudio Leiva

Fuertes marejadas se han hecho sentir desde el jueves en la playa de Caleta Abarca en Viña del Mar, un acontecimiento considerado anormal, pero cada vez más frecuente y que ha restringido en un 50%, prácticamente, la posibilidad de que el público pueda bajar a la arena.

Dada esta situación se ha generado una disminución considerable de veraneantes que se acercan durante el periodo estival al balneario, mermando las actividades y ventas del comercio del sector.

La playa, que cuenta con 4 salvavidas, permanece con bandera roja, es decir, no apta para el baño; sin embargo, el público accede de igual forma al mar, pudiendo ocasionar alguna situación de peligro y que, según la propia versión de los salvavidas, ocurre prácticamente todos los días.

Esta condición anormal del mar produce un temor entre los turistas y termina perjudicando directamente al comercio establecido.

Afecta al público

Cristóbal Vergara, uno de los ayudantes del restaurante Caleta Abarca, manifiesta que "las marejadas no ayudan mucho a las ventas. Si bien, este inicio de temporada ha sido bastante auspicioso para nosotros, el hecho de que venga poca gente a la playa por las marejadas, genera menos público también en el local".

Por otra parte, también se refirió al renacer del turismo, tras varios años con poco público. "Veníamos de varios veranos malos, por el estallido social y la pandemia, y ahora estamos empezando a tener el mismo ritmo de hace casi 4 años atrás, sin embargo, situaciones como las marejadas afectan enormemente las ventas", subrayó.

Visitantes

Pese a este fenómeno climático, siempre hay visitantes que llegan de igual forma a la playa a tomar sol o simplemente disfrutar del paisaje o de una buena vista.

Milagros Díaz es una turista argentina que viene desde Buenos Aires a disfrutar de unos días de playa junto a su madre. "Llegamos acá y nos enteramos de que había bandera roja y que estaba muy complicado para meterse al agua, pero aprovechamos de tomar sol y tocar el mar, el día está muy bonito", comentó. También recordó su pasada visita al balneario viñamarino. "Yo ya había venido el 2018 con mis amigas y ahora vine con ella (una amiga). Ahora está todo más bonito que antes, la gente sigue siendo igual de amable y la atención sigue siendo estupenda", comentó.

Ante la peligrosidad de las aguas, existe otra alternativa para quienes lleguen al sector del de Caleta Abarca.

Martina Pardo trabaja hace dos años en el local que se dedica a realizar trenzas, manicure y masajes a todo el público que llegue. "Nosotros estamos acá desde las 10 hasta las 20:00 horas realizando distinto tipos de masajes y de trenzas".

Agregó que "a nosotros no nos afecta el tema de las marejadas directamente porque estamos en un sector seguro. Sin embargo, la situación genera que venga menos gente a la playa".

A pasos del popular balneario viñamarino se encuentra el icónico Reloj de Flores, una parada obligada para los turistas que visitan la Ciudad Jardín.

En este lugar la gente puede fotografiarse y llevarse un recuerdo de las postales más representativas de la zona, además, los más pequeños también pueden fotografiarse con sus personajes y superhéroes favoritos.

Tras superar el periodo de marejadas, los locatarios de Caleta Abarca esperan volver a reencontrarse con sus turistas y visitantes que año a año llegan a disfrutar del centenario balneario viñamarino.

"Ahora empezamos a tener el mismo ritmo de antes. Sin embargo, las marejadas afectan enormemente las ventas".

Cristóbal Vergara, Restaurante Caleta Abarca

"Está muy complicado para meterse al agua, pero aprovechamos de tomar sol y tocar el mar".

Milagros Díaz, Turista argentina

"No nos afecta directamente el tema de las marejadas porque estamos en un lugar seguro, pero esto hace que venga menos público".

Martina Pardo, Encargada de local de masajes

Una joven madre de 29 años, embarazada, habría estado en contacto con cianuro en polvo junto a su hijo de 11 años durante la mañana de ayer. La grave situación ocurrió en la calle Nagalhue, sector Las Torres, en la parte alta de Forestal, en Viña del Mar.

"El día de hoy llegó una denuncia a Carabineros por posible envenenamiento con sustancias peligrosas, cianuro específicamente, por lo que se activó el protocolo dispuesto para manejar este tipo de sustancias", detalló la fiscal de Viña del Mar, Soledad Torres.

El incidente, según información preliminar, habría ocurrido aproximadamente a eso de las 10:30 horas según las redes sociales del Comandante Patricio Brito de Bomberos de Viña del Mar. La entidad se desplegó rápidamente junto a otras cuatro unidades hasta el lugar junto a Carabineros.

Sin embargo, según el capitán de Bomberos, Kevin Bedwell, "un menor habría manipulado un contenedor de materiales peligrosos. Al llegar, pudimos armar equipos de trabajo quienes ingresaron al lugar con el equipo de protección personal para identificar el producto, un kilo de cianuro en polvo. Bomberos aisló, controló y ventiló el producto en base a los procedimientos correspondientes".

"Además, asistió al lugar Bomberos de Valparaíso con un medidor de cinco parámetros que confirmó la presencia de cianuro", agregó.

Preliminarmente, los afectados no presentaron mayores complicaciones al realizarse la evaluación de traumas y otros parámetros de salud, presentando una condición estable según se informó.

Tras el chequeo, Bedwell señaló que "fueron aislados de la zona y el SAMU siguió con el resto del protocolo para que fueran derivados a la unidad asistencial más cercana".

El oficial bomberil enfatizó que las emergencias con materiales peligrosos siempre son procedimientos "de largo aliento, ya que hay que manejarlas con cuidado, en el sentido de la contaminación que involucra a nuestro equipo, pero en términos de acceder a la víctima y hacer la contención del material, el proceso fue sumamente rápido".

"Bomberos aisló, controló y ventiló el producto en base a los procedimientos correspondientes".

Kevin Bedwell, Capitán Cuerpo de Bomberos de Viña del Mar

Un desesperado llamado ha realizado Juan Carlos Rojas, chileno residente en Francia -reconocido como "Condorito Francia"- a través de las redes sociales para lograr dar con el paradero de familiares de Humberto Rojas Salas, oriundo de Viña del Mar y que fue encontrado muerto en su departamento hace una semana, en la capital gala. Las complicaciones surgen porque su cuerpo está desde la semana pasada en la morgue sin nadie que lo reclame. En conversación con este Diario, Rojas detalló que el próximo lunes se va a reunir con la persona que está a cargo del edificio y que encontró muerto al viñamarino.