"El Presidente Gabriel Boric debe bajar la línea a sus ministros, subsecretarios, a un mayor diálogo"
Convencido que el retorno al periodo legislativo debe ser de análisis para afrontar las crisis del 2023, el diputado independiente-PR Tomás Lagomarsino proyectó lo que será este año en lo político y afirmó que un cambio de gabinete sin estructuras o viraje de prioridades para conciliar visiones en la coalición de Gobierno, no ofrecería nuevas perspectivas.
En este sentido, recalcó que el Presidente Gabriel Boric debe "bajar líneas" desde los ministerios a las direcciones regionales de servicios y seremis, para abrir el diálogo transversalmente a todas las fuerzas políticas y gobernar en función de las necesidades de todos los chilenos y no de intereses partidistas. Con ello, recalcó que se debe dejar de lado la "trinchera política" y avanzar.
- ¿Cómo ve el inicio del año legislativo?
- Espero que el receso legislativo haya sido la oportunidad para que todos quienes ejercemos un cargo de elección popular hayamos reflexionado sobre lo que se nos viene en el 2023 que va a estar marcado probablemente por una crisis económica importante, una crisis en seguridad y por supuesto como presidente de la Comisión de Salud, una crisis en salud que se ve con las listas de espera y la crisis de las isapres que podría afectar a más de 3 millones de afiliados.
- Mucho se ha hablado de un eventual cambio de gabinete, ¿cree que sería efectivo?
- No soy un fanático de los cambios de gabinete, producto de que eso genera que los equipos tengan que reacomodarse y también viene tiempo de adaptación al nuevo cargo, por lo que creo ante el escenario actual no sólo hablaría de un eventual cambio de gabinete; si se requiere -es un criterio del Presidente que es quien toma las decisiones-, que se haga en un giro en torno a un mayor compromiso con los temas país y con las distintas miradas. Si el gobierno se queda atrincherado en sus posturas ideológicas, probablemente no va a poder avanzar en ninguna agenda y tiene que pasar a un segundo año con una apertura más grande, a otras visiones y una discusión más amplia. Si los cambios de gabinete son necesarios, se tienen que hacer, pero no es la única solución y también tienen que mediar otros aspectos como el cambio de prioridades por parte del ejecutivo y la amplitud de visiones.
- ¿Deberían haber cambios a nivel regional en las seremías?
- Creo que todo debe ir paulatinamente, pero con cierta premura, porque las urgencias sociales son ahora. Primero se tienen que ver los cambios de ministros, ministras, subsecretarios y subsecretarias y en un segundo tiempo -pero con bastante premura- tienen que evaluarse las seremías a nivel regional. No veo posible ambas cosas a la vez.
- ¿El cargo de la delegada presidencial por la crisis de seguridad es algo que se debiese renovar?
- Hay que diferenciar los dos roles que tiene la delegada presidencial regional. Uno que tiene que ver con las coordinaciones con las policías, que se está tramitando en el Congreso Nacional, y por otro lado está un Ministerio de Seguridad; considerando esto, creo que la delegada presidencial regional luego de haber sido ratificada en su cargo, la he visto mucho más empoderada, coordinada y clara con las decisiones que se van a tomar, no con el ánimo dubitativo que me tocó verla previo a ser ratificada. Estoy gratamente sorprendido de que ella no se ha visto presa de sus propias visiones ideológicas y ha avanzado.
Apertura al diálogo
- Habló de trinchera ideológica y roces del mundo político, ¿cómo ve la situación del Socialismo Democrático y Apruebo Dignidad?
- La forma en que debemos procesar nuestras diferencias en democracia es dialogando en quienes son parte del gobierno y con quienes están fuera del gobierno. Espero un aumento del diálogo en las distintas visiones que están dentro del gobierno y su ponderación en cuanto a la toma de decisiones, sino uno no entiende por qué habría una coalición de gobierno. El diálogo tiene que ser transversal más aún en el contexto actual donde los parlamentarios de gobierno tanto en la Cámara y como en el Senado son minoría.
- Sin mayoría en la Cámara y en Senado ¿qué se tendría que hacer para conciliar visiones y hacer este cambio de prioridades que usted plantea?
- El Presidente de la República, Gabriel Boric, tiene que bajar la línea a sus ministros, a sus subsecretarios, a sus seremis, a sus directores, de los distintos servicios del país, a un mayor diálogo. Cuando una fuerza política gana el gobierno, si bien, gana con sus ideas, debe tener claro que gobierna para todos los chilenos y chilenas independiente. El cambio de ser un parlamentario que defiende sus posturas a pasar a gobernar, ha sido una cuestión muy difícil para este gobierno y en aquello está el problema que ha tenido este mandato y eso se debe manejar porque en la Presidencia de la República quien es electo - si bien es electo con sus ideas-, gobierna para todos los habitantes y eso obliga a mucho diálogo, acuerdo y conciliación. Cuando uno tiene que gobernar no gobierna para sus fuerzas políticas sino que para todos los chilenos y chilenas, y eso ha sido muy difícil de llevar por parte del Presidente Gabriel Boric.
"Si el gobierno se queda atrincherado en sus posturas ideológicas probablemente no va a poder avanzar en ninguna agenda y tiene que pasar a un segundo año".