"Debemos ser rigurosos respecto de todos los cuestionamientos y no vamos a generar espacio para la duda"
La semana pasada trascendió un preinforme sobre una auditoría que realizó el Ministerio de Salud (Minsal) al Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio (SSVSA), que detectó una serie de irregularidades en contratos de personal y compras, por lo que instruyó a la repartición iniciar un proceso administrativo.
El director del servicio, Fernando Olmedo, abordó la situación y adelantó que ya trabaja en dos sumarios, uno de ellos para abordar los contratos y otro para analizar la situación de la fallida licitación del SAR Quebrada Verde, en Valparaíso, parte de los cinco puntos críticos hallados.
- El 30 de junio se dio a conocer un preinforme. ¿Qué se hará?
- El ministerio sugiere la instauración de procedimientos administrativos para determinar eventuales responsabilidades. Debemos ser rigurosos respecto de todos los cuestionamientos que puedan existir y no vamos a generar ningún espacio para que exista duda respecto a esta gestión. Lo primero que se hace es instruir, a partir de este preinforme, dos sumarios. Uno que partió hoy (ayer) tendiente a verificar situaciones que fueron cuestionadas en recursos humanos y, un segundo sumario, orientado a una licitación de un dispositivo de atención de urgencia, que es el SAR de Quebrada Verde.
- ¿Por qué no se licitó esa obra si tenía aprobación de la Comisión?
- El dispositivo, de acuerdo a la información que tuve a la vista, tenía la participación de una sola empresa que no contaba con ninguna experiencia de construcción en salud, que no tenía el respaldo financiero y que, además, superaba las glosas en el presupuesto de Mercado Público. No obstante, la Comisión que evalúa me recomendó que lo adjudicara y considere que - dado que este proyecto se había caído dos veces, las empresas han quebrado y la obra está a medio terminar- se debiera reevaluar y volver a licitar, que fue lo que finalmente el ministerio nos recomendó.
- ¿Lo detectado en la auditoría tiene que ver sólo con la actual gestión o son situaciones de arrastre?
- Hay cosas que efectivamente se arrastran hace muchos años, pero también hay que reconocer que existen errores de procedimientos que se instalan como prácticas habituales, como por ejemplo, la supervisión y los registros que están trabajando en el proyecto de concreción de San Antonio, el camino de la existencia de manuales o que no se revisan prolijamente los contratos que se realizan y, por lo tanto, los mecanismos cuando se evalúan están duplicados, entonces, efectivamente hay errores y esos errores hay que asumirlos, yo lo asumo en primera persona y, por lo tanto, creo que tenemos la oportunidad de corregirlos porque para eso son estas auditorías.
- ¿Habrá plazo para estos sumarios? A veces los procesos son de larga data y se arrastran por años.
- Claro, cuando asumí, en diciembre pasado, habían sumarios arrastrándose por más de mil días, más de 3 años, lo que no tiene ninguna razón porque los sumarios tienen plazos que son 20 días prorrogables en dos ocasiones y eso se va a cumplir en esta oportunidad. Queremos que haya transparencia, que los sumarios se realicen como corresponde, se den a conocer responsabilidades, si existiesen, y se sancione.
Detalle de casos
- La auditoría da cuenta de cinco puntos críticos, entre ellos, subrogancia de director de Atención Primaria sin respaldo legal y no visar a la Seremi Salud contratos ni a Contraloría. ¿Qué pasó en esos casos?
- La persona derivada en comisión de servicio es un profesional con experiencia de más de 15 años en atención primaria, el titular estaba con feriado legal hasta el 30 de junio, se nombró a este médico -que ahora está contratado- como coordinador de atención primaria. El auditor no tuvo a la vista las resoluciones que daban cuenta que no se trataba de un subrogante sin respaldo legal, sino que era coordinador. Respecto a lo segundo, estamos en una contingencia respiratoria y hay un decreto, (...) lo que se hizo fue que en los contratos de honorarios que se necesitaban por la urgencia fueron contratados y el documento se evacuó a la seremi después de la contratación, lo que es un vicio de procedimiento, situación que está superada, pero estamos intentando mejorar para que esto no ocurra. Otro de los aspectos considerado en el informe observa la contratación de servicios de reclutamiento y selección de personal para proyectos de normalización de los hospitales de Casablanca y San Antonio. Además, se observó la licitación de servicios de un estudio para definir el modelo de atención y gestión que tendrán los dos hospitales que quedarán en desuso a contar del segundo semestre. Dichas licitaciones fueron retrotraídas y se instruyó una investigación sumaria para evaluar el proceso de compra de estos servicios.
- ¿Y por esta misma crisis se superó la glosa de presupuesto?
- La situación particular que se da está asociada a los proyectos que estamos desarrollando. Por ejemplo, el Hospital Claudio Vicuña demanda mucha atención, hay que generar planes de emergencia, planes de evaluación, de infraestructura, equipamiento, por tanto hemos necesitado en ocasiones de incorporar más equipo, más competencias técnicas, pero lamentablemente, a veces, el procedimiento administrativo no fue bien hecho o no fue claro y, por lo tanto, eso genera un cuestionamientos. En eso no hay mala fe. Ha habido errores que se asumen, pero también ha habido una necesidad de acuerdo al momento que estamos viviendo.
"Efectivamente, hay errores y esos errores hay que asumirlos, yo lo asumo y, por lo tanto, creo que tenemos la oportunidad de corregirlos".