Administradora municipal fue imputada por cohecho
NOGALES. Funcionaria de confianza de la alcaldesa quedó con arraigo nacional, así como el empresario que le transfirió dineros, a quien se le imputa soborno.
Por el delito de cohecho fue formalizada ayer, en el Juzgado de Garantía de La Calera, la administradora municipal de Nogales, Paola Moya Córdova, mano derecha de la alcaldesa de dicha comuna, Margarita Osorio, quien está formalizada por estafas reiteradas en otra causa y se mantiene con arresto domiciliario nocturno. En la ocasión también fue formalizado el empresario de la construcción Leonardo Guerra Herrera por soborno. Ambos quedaron con arraigo nacional y se fijó un plazo de investigación de 150 días.
En la audiencia, el fiscal jefe de la Unidad Regional Anticorrupción (URAC), Claudio Rebeco, detalló que desde 2017, Moya, quien ha tenido diversos cargos en el municipio, entre ellos el de jefa de gabinete de la alcaldesa, y actualmente administradora municipal, "ha ejercido tales funciones estando siempre dentro de la esfera de confianza la alcaldesa, doña Margarita Osorio Pizarro, autoridad que se ha mantenido en el cargo desde su primera elección, en diciembre del año 2016".
Funciones claves
Asimismo, indicó que mediante decreto alcaldicio, "el 2 de noviembre del 2017 se autoriza delegación de funciones a Paola Moya para ejercer la siguientes funciones en el Departamento de Salud Municipal: supervisión o fiscalización de materias financieras y contables; revisión previa de procesos de compras o adquisiciones; supervisión en la administración de los recursos humanos materiales y financieros del Departamento de Salud".
Por otra parte, el fiscal detalló que Guerra "es dueño y representante legal de Mantenciones y Obras Civiles Leonardo Guerra Herrera E.I.R.L. (...) Desde el año 2017 y al menos hasta el año 2020, la referida empresa prestó servicios propios de giro a la Municipalidad Nogales, incluido el Departamento de Salud y otras áreas municipales, siendo contratado por el municipio en el marco de licitaciones y tratos directos".
Rebeco precisó que "en el periodo comprendido entre noviembre de 2018 y mayo de 2020, Paola Moya Córdova, desde las funciones municipales descritas en la Ilustre Municipalidad de Nogales, aceptó recibir del particular Leonardo Guerra (...) diversas sumas de dinero en razón del cargo y de las funciones que aquella debía cumplir, cantidades de dinero que el particular mencionado ofreció y entregó a la empleada municipal".
Agilizar estados de pago
Advirtió que "los traspasos de dinero se realizaron sin que exista una causa como no sea la intención de Guerra de congraciarse con la funcionaria municipal Paola Moya, quien por su posición dentro de la estructura y organización del municipio, contaba, en los hechos, con la posibilidad de adoptar decisiones, impartir instrucciones o ejercer influencia para que otros funcionarios municipales realizarán gestiones en favor de la citada empresa, como por ejemplo, cursar o acelerar estados de pago".
Rebeco también precisó que en el periodo indicado, la empresa de Guerra "mantenía contratos vigentes con la entidad municipal", y en 2019 y 2020 sumó varios contratos más. Además, detalló las diversas transferencias de dinero desde la cuenta bancaria de Guerra hacia la de Moya.
La magistrada Celeste Serrano tuvo presente que ambos imputados tienen irreprochable conducta anterior, por lo que "el tribunal accede a lo solicitado por el Ministerio Público, en cuanto se decreta como medida cautelar el arraigo nacional mientras dure la investigación".
"Desde las funciones municipales (...) aceptó recibir del particular Leonardo Guerra diversas sumas de dinero",
Claudio Rebeco, Fiscal jefe de la URAC
"Se decreta como medida cautelar el arraigo nacional mientras dure la investigación".
Celeste Serrano, Jueza
150 días fue el plazo fijado por la magistrada Celeste Serrano para la investigación de los delitos.