"El plan es para 5 años, pero las viviendas se deben abordar en un máximo de 24 meses"
Siete semanas después del megaincendio y cuando muchos ya levantan sus viviendas por iniciativa propia, el gobierno aparece con su Plan de Reconstrucción que, según la seremi de Vivienda, Belén Paredes, es integral. Lo es, dice, porque se piensa generar un entorno urbano, con prevención de riesgos y planificación de accesos, más allá de lo meramente habitacional.
Que lo habitacional es lo prioritario para las miles de familias que hoy duermen en carpas, no lo niega la seremi. Sabe que las viviendas se tienen que parar pronto y su meta es que sea en un máximo de 24 meses.
- Primero quiero preguntarle por el clima, porque los días otoñales aparecieron y el temor de estar sin techo ante las lluvias se hace carne. ¿Qué están haciendo para que los damnificados duerman en algo sólido?
- Cada organismo del Estado tiene distintas funciones y en el caso de las viviendas de emergencia y las soluciones transitorias están a cargo de Senapred. Sin embargo, es un desafío de Estado poder llegar lo antes posible con las medidas transitorias ya dispuestas, el bono de acogida y la vivienda de emergencia, u el bono de hotelería para familias con dificultades especiales. Sólo así podemos dar seguridad, que es nuestra prioridad actual.
- Cada vez hay más expresiones de molestia y frustración por parte de los afectados.
- Estamos frente a una catástrofe sin proporciones en los últimos años en el área metropolitana de Valparaíso, que significó un despliegue gigante por parte del Estado en todos sus ámbitos y en todos sus niveles, para poder normalizar las ciudades. Sabemos que existe una gran preocupación y, sobre todo, un estado de alerta en las familias damnificadas, para que estos procesos sean lo más rápido posible. Y en eso hemos estado trabajando de manera coordinada, entre todos los sectores, con los municipios y por supuesto con el gobierno completo.
Plan de reconstrucción
- La Corte de Apelaciones dictó una orden de no innovar y paralizó las demoliciones en El Olivar. ¿Cuánto puede impactar esta medida en la ejecución del plan de reconstrucción?
- Lo primero que hay que decir es que el proceso de demolición en esta emergencia fue inédito, ya que quisimos adelantarlo con recursos extraordinarios del Ministerio de Obras Públicas y que los municipios generen decretos de demolición de manera masiva.
- Precisamente, en ese contexto, 11 vecinos de El Olivar presentan este recurso de protección, para que primero les den certezas antes de demoler.
- Por supuesto que se requiere de un acuerdo con cada una de las familias, ya que todos los decretos de demolición son apelables, porque este es un tema sensible. Y así como en algunos sectores hemos podido avanzar sin dificultades, entendemos que en El Olivar plantearan esta reposición ante los tribunales, en la búsqueda de mayores certezas, que esperamos entregarles. El Olivar tuvo casi 800 viviendas afectadas, pero sabemos que el proceso de reconstrucción no se verá truncado con esta orden de la Corte, porque lo que estábamos buscando con estas demoliciones masivas era adelantar tiempo.
RELOCALIZAr en riesgos
- A días de la emergencia, la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, se comprometió a impedir la reconstrucción en zonas de riesgo. ¿Cómo lo evitarán?
- La normativa actual identifica dos elementos de zonas de riesgo, la remoción en masa y el riesgo por pendiente, y sabemos que hay emplazamientos de viviendas que cumplen estas dos condiciones. Frente a esto, tenemos dos formas de actuar, ya sea generar obra de habilitación para evitar riesgos o relocalizar a las familias.
- ¿En qué casos se plantea la relocalización?
- Cuando hay riesgo de incendio y, además, están los riesgos identificados por la Conaf. Pero estas zonas de riesgo no se pueden declarar así como así, sino que hay que darles oportunidades a las personas para la relocalización. Por eso, estamos generando nueva oferta habitacional en terrenos mejor ubicados, con mayor área de consolidación y que eviten catástrofes como las que vivimos.
- ¿Esta relocalización para las zonas de riesgo está en el Plan de Reconstrucción que se presentó el sábado?
- Entre las 170 medidas del plan, una tiene que ver con la actuación, en dos ámbitos, en las zonas críticas o en las zonas de riesgo. Ya sea mediante la instalación de áreas de protección vegetal o construyendo muros de contención, o bien generando nuevos proyectos habitacionales. Para nosotros, las áreas críticas afectadas por el megaincendio son conocidas y están declaradas en nuestros instrumentos de planificación. Por el emplazamiento del incendio son pocas las áreas de afectación que necesitan relocalización, pero sí hay que mitigar el riesgo en la mayoría de ellas.
Construcción propia
- El plan definitivo del gobierno llega varias semanas después del incendio, cuando hay muchas familias que iniciaron la reconstrucción por iniciativa propia. ¿Cómo el Estado se enfrenta a ese ímpetu espontáneo de los damnificados?
- Este plan de reconstrucción estuvo en tiempo récord en comparación de otros, pero no es cuestión de tiempo, sino de un proceso bien pensado. Que familias apremiadas y preocupadas por la incertidumbre partan individualmente con la reconstrucción pasa en todos los procesos de esta naturaleza. Sin embargo, el plan de reconstrucción presentado tiene en consideración a las familias que comenzaron su proceso y es importante acompañarlas para que esas viviendas cumplan con la normativa y ese esfuerzo invertido no se pierda.
- ¿Ese esfuerzo será compensado?
- Lo que nos gustaría siempre es que el proceso parta de cero guiado por el Estado y que desde un principio lo acompañemos con la asistencia técnica para que las autoconstrucciones siempre estén en norma. Sabemos que eso no siempre ocurre y nuestro objetivo es dar un apoyo posterior y asistencia técnica a las familias que partieron con la construcción, para que cumplan con la ley. Sólo así es posible que reciban un pago posterior al subsidio y que su vivienda esté regularizada.
Acortar procesos
- Retomando el plan de reconstrucción, ¿por qué se dice que es integral?
- Porque tiene un componente urbano, social y habitacional y pretendemos trabajar estos tres ámbitos de manera paralela. No se trata sólo de la reconstrucción habitacional, sino de generar un entorno urbano, pensando en la accesibilidad de calles y pasajes, prevención de riesgos, manejo de quebradas.
- El plan integral está pensando para cinco años. ¿Cuándo deberíamos ver las primeras viviendas?
- Tenemos claro que una vivienda no se levanta de la noche a la mañana, porque necesita de un proceso técnico y esperamos acortar todos los plazos posibles. El plan que se presentó considera una ejecución de 5 años, pero en las viviendas debe ser más corto, porque es la primera necesidad y se deben abordar en un máximo de 24 meses. Para eso, pusimos a disposición todas las viviendas que se encuentran certificadas. También es verdad que se necesitan obras de habilitación, porque son terrenos complejos.
"Este plan de reconstrucción estuvo en tiempo récord en comparación de otros, pero no es cuestión de tiempo, sino de un proceso bien pensado".