"Nuestra agua sí es para consumo humano"
La compañía construye la primera planta desalinizadora multipropósito de la zona central de Chile, que contribuirá con una nueva fuente de agua segura y sustentable para empresas y comunidades extremadamente afectadas por la sequía en la Región de Valparaíso.
Con un avance cercano al 46%, la planta desalinizadora de Aguas Pacífico es una obra de infraestructura en construcción en la comuna de Puchuncaví, Región de Valparaíso, y una vez habilitada contará con una capacidad de producción de 1.000 l/s de agua dulce, que será transportada a través de un acueducto de 105 km que va desde la costa hasta el sector de Quilapilún, en la Región Metropolitana. El agua producida será destinada a diversos usos como el industrial, agrícola y consumo humano, esto último a través de convenios que ya se han suscrito con APR y Sistemas Sanitarios Rurales en la zona de Limache y Olmué.
Jorge Sanhueza, director de Sustentabilidad de Aguas Pacífico, entrega detalles del proyecto.
- Se dice que el agua que van a producir no va a beneficiar a las personas, ¿es así?
- Lamentablemente se van instalando ciertos mitos que es importante aclarar. Nuestra planta generará agua dulce apta para consumo humano solo dosificándole cloro y flúor en el punto de distribución. Hemos sido muy transparentes en decir que tenemos un proyecto que es multipropósito/multiclientes desde su origen. De momento, hay 500 litros que están ya comprometidos y vendidos a AngloAmerican, lo que nos permitió tener los principales recursos de inversión para financiar el proyecto. Paralelamente hay un acuerdo con una empresa eléctrica que está en la zona de Quillota y estamos en un proceso de conversaciones con otros interesados. Pero en paralelo hemos comprometido la entrega de agua a servicios sanitarios rurales (ex APR) de Limache y Olmue. Produciremos agua para múltiples clientes, empresas y personas, y justamente eso es parte de la sustentabilidad del proyecto, porque en la medida que las empresas se abastezcan con el agua desalinizada producida por la planta, liberarán al ecosistema el agua dulce que actualmente extraen de ríos y pozos. Ese es un importante beneficio indirecto para el medioambiente en todas las zonas donde el proyecto entregará agua desalinizada a clientes.
- ¿Y el agua será suficiente para cumplir con los convenios que hay con los APR?
- Absolutamente. Nosotros hemos dicho desde el primer minuto que el agua para los APR, los actuales servicios sanitarios rurales, es un agua que está comprometida, reservada y asegurada. De hecho, tenemos acuerdos por cerca de 30 litros por segundo y estamos buscando la fórmula de poder comprometer mayores cantidades en la medida de la urgencia y la factibilidad que tengamos. Lo que tenemos como acuerdo con los APR de la zona de Olmué y Limache es agua que está asegurada, y no es real que no tengamos disponibilidad. Este nuevo suministro permitirá además aumentar su oferta de abastecimiento, disminuyendo su dependencia de los camiones aljibes.
- ¿El agua que van a producir es de calidad industrial?
- No. El agua desalada que va a producir la planta de Aguas Pacífico es agua dulce potabilizable y cumplirá con todas las exigencias de la actual norma chilena. Lo único que no hacemos, y que está a cargo de los APR, es agregarle una dosis muy pequeña de cloro y de flúor. Un proceso que además no es ajeno a ellos, porque al agua que se extrae de los pozos o de derechos de agua siempre requiere este proceso de incorporación de cloro y fluor. Queremos reiterar: nuestra agua sí es para consumo humano una vez que se potabiliza, agregándole estas dosis de cloro y flúor, que es lo que normalmente los APR hacen´en su operación cotidiana.
- ¿Y los APR tienen recursos para transportar y potabilizar el agua?
- El compromiso de la empresa es llegar a un punto de conexión, no al cliente final. Tenemos convenios firmados con los siguientes APR de Limache y Olmué: Cooperativa Los Maitenes, APR Lo Gamboa, Cooperativa El Granizo, Cooperativa La Campana, APR El Arco, APR Esperanza del Agua, APR Las Palmas y APR La Vega. Para todos ellos se van a implementar tres puntos de conexión de entrega de agua desde el acueducto: uno en la comuna de Limache y dos en la comuna de Olmué, los que se determinaron considerando variables técnicas, económicas, ambientales y sociales, para cumplir de forma efectiva con el suministro de agua potabilizable. Paralelamente nos hemos comprometido a financiar y desarrollar estudios técnicos de la infraestructura necesaria para empalmar a los APR al punto de conexión y, de ser necesario, proveerlos de estanques de acumulación de agua. El compromiso es no solo entregar 30 litros de agua por segundo a $1, sino también apoyarlos en todo el proceso, conformando una mesa de trabajo conjunta para levantar el financiamiento público-privado para las obras de empalme. El desafío que estamos abordando juntos es que para la mayoría de los APRs el agua se comience a entregar ojalá el mismo día que pongamos en operación nuestra Planta desalinizadora.
MINIMIZAR
INTERVENCIÓN
La construcción del acueducto busca minimizar los tiempos de interferencia a los propietarios de tierras y reducir el impacto a las comunidades durante la construcción, por lo que se desarrollan obras en varios frentes de trabajo en simultáneo.
El acueducto avanza utilizando un diseño que aprovecha un trazado en zonas que ya han sido intervenidas, reduciendo al máximo los impactos a la flora y fauna de los distintos sectores que contempla el proyecto. Por ejemplo, desde Puchuncaví hasta Quillota se trabaja junto a lo que es el gasoducto ya existente.
"El agua desalada que va a producir la planta de Aguas Pacífico es agua dulce potabilizable y cumplirá con todas las exigencias de la actual norma chilena".