"El muelle de cruceros y el cabotaje pueden marcar diferencias"
VALPARAÍSO. Presidente de Asociación Internacional de Líneas de Cruceros, Marco Ferraz, destacó a la región.
Tras los años más oscuros que vivió la industria de cruceros con la pandemia, la actividad retomó la normalidad y va en ascenso. Así al menos lo indican las cifras entregadas por el presidente de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA) Sudamérica, el brasileño Marco Ferraz.
"Como región tuvimos un incremento cercano al 15 % superando los 1,1 millones de pasajeros en Sudamérica y tenemos muchos barcos nuevos en la cartera de pedidos. Ya tuvimos 81 la temporada pasada y muchos estuvieron en Chile, donde despierta mucho interés y también Valparaíso por el recambio de pasajeros", subrayó el ejecutivo que comenzó una visita al país acompañado por Eric Petri, timonel de la Corporación de Puertos del Cono Sur, entidad que agrupa a todos los puertos nacionales que reciben a estas naves y también a algunos operadores del sector.
La visita de Ferraz se enmarca en la idea de aportar al desarrollo y difusión de la industria de cruceros en esta parte del continente, cubriendo Brasil, Uruguay, Argentina, Chile, Perú y Ecuador, países donde la organización espera consolidar su presencia y potenciar esta industria a nivel regional.
Medidas proindustria
En ese contexto, el ejecutivo en su visita a la región, destacó el proyecto que tiene la Empresa Portuaria de Valparaíso (EPV) de contar con un muelle para cruceros frente al actual terminal de pasajeros.
"Eso hace toda la diferencia. Con certeza las navieras vas a buscar más los lugares en que tengan más facilidades. Es algo muy importante", comentó, agregando que otro aspecto que puede ser un gran apoyo al desarrollo de la industria es el cabotaje. Actualmente en el país existe una limitación para los barcos con capacidad para más de 400 pasajeros, algo que se está revisando a nivel legislativo.
"Con toda seguridad eso puede impulsar el sector y estamos aquí proponiendo a la Corporación de los Puertos del Cono Sur para trabajar juntos en el Congreso, hablar un poco de las limitaciones, abrir el mercado y llamar a las navieras para estudiar los destinos, los itinerarios", subrayó.
En ese sentido puso como ejemplo lo que sucede en Brasil donde la industria cuenta con más de 200 itinerarios, 800 recaladas, 79.000 empleos y US$ 1.000 millones de dólares de impacto económico directo e indirecto.
"En Brasil son nueve barcos que están haciendo seis meses de temporada por el nordeste de Brasil, Argentina y Uruguay. Entonces hay un circuito con seis puertos de embarque en Brasil más uno en Uruguay y otro en Argentina con 800.000 pasajeros. Entonces una operación de cabotaje convoca mucho. Los barcos son cruceros de entre 3 y 8 noches y son prácticamente 13 destinos. Estamos buscando más interés de las navieras para venir a Sudamérica y hacer otros países, otros itinerarios, necesitamos destinos e infraestructura", detalló.
Agregó que con los atractivos que tiene Chile la apertura del cabotaje podría por ejemplo abrir itinerarios en conjunto con países vecinos como Perú recalando en diversas ciudades.
"Es una posibilidad, una ruta "one way" con Perú; Galápagos es muy importante, pero son barcos chicos (...) están las rutas de Chile o Argentina. El problema es que la travesía cuesta mucho. Para que venga un barco desde Europa hasta América del Sur son 14 o 15 días de navegación a un costo de millones de dólares diarios. Entonces es importante trabajar para mantener unos barcos acá y para ello es importante bajar los costos", explicó el ejecutivo.
Desafío: los costos
En esa línea profundizó que ese es uno de los grandes aspectos que hay que desarrollar para atraer la atención de la industria porque el resto ya existe.
"Estuve en Santiago, en San Antonio y acá en Valparaíso, y pude ver los homeports y hay toda la infraestructura para hacer cruceros desde aquí. Necesitamos otros destinos y tenemos que trabajar un poco para reducir los costos de recalada. Mientras lleguen más cruceros podemos bajarlos, entonces hay que trabajar juntos con la Asociación y la Corporación en los destinos y los puertos para atraer la atención", enfatizó Ferraz.
Agrega que la competencia es dura porque se trata de un mercado global y muy exigente. "No es nada fácil porque no hay muchos barcos, tenemos como 316 y existen otros destinos que están llamando la atención como el sur de Asia. China estaba cerrada, recién abrió y con certeza habrá barcos que van a operar en ese país y lo mismo pasa por ejemplo en Australia que tiene barcos todo el año y tiene más cruceristas que toda Sudamérica", cerró el directivo.
"Necesitamos otros destinos y tenemos que trabajar un poco para reducir los costos de recaladas".
Marco Ferraz, Pdte. Asociación Internacional Líneas de Cruceros, Sudamérica
1,1 millones de pasajeros movieron los cruceros por Sudamérica la temporada anterior.