"Se lo dije a Evelyn Matthei, que ojalá ella sea capaz de hacer una copia de lo que hizo la Concertación"
Sintiéndose más bien un legislador "acompañado" que un "llanero solitario", como algunos lo catalogan, el presidente del Senado, Manuel José Ossandón (RN), asegura que no usará su cargo para perjudicar al Gobierno ni convertir la testera en una plataforma electoral.
- Hace unos días estuvo en Quilpué y fue testigo del proceso de reconstrucción posmegaincendio. ¿Cuál fue su objetivo?
- Mire, creo que el presidente del Senado representa una institución que puede ayudar en la construcción de un Estado ágil, humano, más flexible en sus propuestas. Lo que pasa con la reconstrucción da cuenta de una de falta de experiencia de este Gobierno, que yo lo llamo amateurismo, pero también hay una reglamentación poco moderna y poco flexible, incapaz de adecuarse a las urgencias.
- Más allá de la reconstrucción, la desafección alcanza varios planos, no sólo de este Gobierno, sino de la oposición. ¿Cómo se recupera la confianza?
- Puedo decirte que como vicepresidente del Parlamento Andino me toca trabajar todos los meses con varios parlamentarios de Latinoamérica, y la verdad es que el mundo político chileno es muchísimo mejor de lo que todos creen. Pasa que también hay una política nacional de echarle la culpa a todos los políticos y del desprestigio de la política como arte de gobernar. Hoy día, por ejemplo, tenemos el gran problema la delincuencia y nadie puede decir que no existen las leyes ni las herramientas para combatir la delincuencia. Lo que necesitamos es una voluntad política fuerte de quien está gobernando para poder darle impulso a estas medidas.
- ¿Hasta qué punto llega su crítica al Gobierno, o es menos dura que la de otros actores de la derecha?
- He sido siempre súper crítico con este Gobierno, pero una cosa es ser oposición y otra es ser destructivo. Mi objetivo en la presidencia del Senado fue dar gobernabilidad, porque el rol del Congreso en una recta final de un gobierno es muy importante. Nosotros nunca más podemos permitir que se improvise desde el poder, tenemos que dar certezas desde el Congreso ante un gobierno que hizo un magíster con los chilenos, que ofreció cambios profundos y terminó improvisando.
- Cuando ganó la presidencia del Senado se habló de su cercanía con el oficialismo.
- Yo no soy del oficialismo, pero Chile necesita honestidad y proteger sus instituciones. Si transversalmente me eligieron en este rol, fue porque me comprometí a que nadie va a usar este Senado como plataforma política para una campaña, ni de izquierda ni de derecha. Y lo dije, mi candidata es Evelyn Matthei, pero no por eso voy a usar el Senado para la campaña.
- ¿Algunos le pidieron eso?
- No, nadie lo planteó, pero era evidente que esto se iba a usar de alguna manera para fines electorales. Mi planteamiento en cambio fue de gobernabilidad y los senadores me creyeron.
CRÍTICAs A KAST Y KAISER
- ¿Cuestiona estos relatos que hoy se ubican a la derecha de Chile Vamos?
- Más que hablar de la derecha, hay grupos de personas que están buscando una reelección y le hablan al miedo. La gente ya tiene miedo y cuando un político llega con soluciones fáciles para problemas difíciles, eso no es más que populismo electoral. Atacan a Marcel por su relación con Tohá y esto se transforma en farándula. A mí lo que me importa es que seamos capaces de ayudar a Marcel para sacar los proyectos de permisología y otros que ayuden a impulsar la economía que hoy está estancada. Lo mismo con el acuerdo de paz en La Araucanía, que es una bisagra y no una llave mágica. Como presidente del Senado, yo no puedo apagar los incendios de este país con bencina, todo lo contrario.
- En un contexto de polarización y descontento, ¿se puede ganar la presidencial ofreciendo acuerdos?
- Mire, para mí, hay dos candidatas firmes, que son Evelyn Matthei y Tohá, por tres razones: su currículum, su experiencia y su conocimiento. Porque, ojo, Kaiser tiene mucho apoyo en sectores informados, pero en el resto de Chile no lo conoce mucha gente. Lo importante es que quien sea, sea capaz de dar gobernabilidad al país. Y si Matthei demuestra experiencia, agallas para tomar decisiones duras y un equipo con soluciones de sentido común, creo que esta elección se gana.
- ¿Qué opciones les ve a José Antonio Kast y Johannes Kaiser?
- Son dos candidatos que han sido muy inteligentes en su estrategia populista de soluciones fáciles a conflictos difíciles, aprovechándose de los miedos de la gente. Eso son Kast y Kaiser. En ese escenario, Matthei debe ser garantía de gobernabilidad, que no implica soluciones fáciles. Además, si gana Kaiser va a llegar a aprender al cargo y es cosa de mirar su currículum. Nunca ha administrado algo ni tiene equipo. Y el caso de José Antonio Kast es más grave todavía, porque le quedó grande el poncho de darle a Chile una gran Constitución para Chile.
Proyecto de unidad
- ¿Qué le recomendaría a Evelyn Matthei?
- Yo siempre he soñado, y se lo dije a Evelyn Matthei, que ojalá ella sea capaz de hacer una copia de lo que hizo la Concertación. Siempre hay que copiar las cosas que hacen bien los otros. Frei, Lagos, formaron la Concertación y lograron hacer un proyecto de unidad, como el que debería pensar la derecha. La DC era archienemiga del PS y, aun así, lograron hacer un gobierno de coalición. ¿Por qué no podemos hacer lo mismo nosotros?
- Por último, varios dicen que usted es un llanero solitario. ¿Lo es?
- Me da risa cuando me dicen solitario. Saqué 27 votos de 50, de todos los colores políticos. Entonces, es al revés; en vez de solitario deberían decirme el acompañado, porque me votaron personas que piensan distinto a mí y eso me da peso político. Me votó Fabiola Campillai, Isabel Allende, Lagos Weber, y no sólo mis compadres, y por eso no tengo nada de solitario.
"Si Matthei demuestra experiencia, agallas para tomar decisiones duras y un equipo con soluciones de sentido común, creo que esta elección se gana".
"Kaiser va a llegar a aprender al cargo y es cosa de mirar su currículum. Y el caso de José Antonio Kast es más grave todavía, porque le quedó grande el poncho de darle a Chile una gran Constitución".