La ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, ingresó ayer a la Cámara de Diputados el proyecto que legaliza la interrupción voluntaria del embarazo hasta las 14 semanas, uno de los más emblemáticos del actual Gobierno.

La secretaria de Estado destacó que "a 36 años de que se ilegalizara el aborto terapéutico en nuestro país, a través de un decreto dictatorial, hoy vamos a abrir la discusión en el Congreso". Añadió que a las mujeres que han abortado, "el Gobierno de Chile considera que no deben seguir siendo tratadas como criminales. Ninguna mujer se embaraza para abortar".

Orellana invitó a todos los actores políticos "a que demos un debate respetuoso", añadiendo que "a quienes están en contra, les invito a que se abran al debate y que no se sigan imponiendo los vetos".

También expuso que el costo financiero estimado de este proyecto es de 2.600 millones de pesos.

"En muchos países del mundo esto, bajo condiciones sanitarias seguras, no en la clandestinidad y sin condiciones base de riesgo, es un procedimiento que puede ser ambulatorio", detalló la ministra.

Sobre la urgencia del proyecto, dijo que la decisión se tomará en las próximas semanas, tomando como base el debate en las comisiones del Congreso. Y reconoció que es muy poco probable que se avance antes del término del actual Gobierno: "Si bien queremos que se ponga en tabla acá no vamos a avanzar a tropezones; queremos que se debata, que se dé un debate razonado, donde todas las posiciones puedan expresarse. Por supuesto, sería ingenuo pensar que eso va a alcanzar a ocurrir en nueve meses".

Posiciones iniciales

La presentación de este proyecto de ley fue respaldada por la presidenta del Frente Amplio, Constanza Martínez, quien afirmó que "Como mujeres estamos acostumbradas a que cuando queremos debatir la ampliación de nuestros derechos, siempre hay voces que dicen que no es tiempo. Ya no más. Hoy día se presentó el proyecto de ley de aborto y lo celebramos".

Sus argumentos fueron dos: "Primero porque se hace cargo de un asunto de salud pública donde son principalmente las mujeres pobres las que sufren, y en segundo lugar, porque frente a dos candidatos de derecha que plantean el retroceso incluso en el aborto de tres causales un mínimo civilizatorio en el mundo, acá estamos y vamos a seguir peleando".

Pero en una demostración de que no hay consenso en el oficialismo, el senador socialista Gastón Saavedra afirmó que "yo sigo sosteniendo mi opinión, creo que no es el tiempo de esa legislatura. Hay otras urgencias, tales como esta que estamos comentando de Salas Cunas para Chile".

El diputado Eric Aedo (DC) fue enfático en su oposición a la iniciativa: "Este proyecto no cuenta con los votos en la Cámara de Diputados, va a ser rechazado. El Gobierno, si quiere hacer un acto testimonial, está en su derecho a hacerlo. Pero no tiene los votos para aprobar este proyecto, y ya por lo menos con este Parlamento, y yo, para serte bien franco, dificulto más que en el próximo Parlamento tener los votos para sacar este proyecto".

Mientras que desde la oposición, la secretaria general de la UDI, María José Hoffmann, dijo que "el Gobierno insiste que con el proyecto de aborto está cuidando a las mujeres, pero la realidad es otra: en Chile mueren más mujeres por cáncer de mama y cervicouterino que por cualquier otra causa oncológica, y muchas ni siquiera acceden a diagnóstico o tratamiento a tiempo. No se cuida a las mujeres con discursos ideológicos mientras se las deja morir esperando atención médica básica".

El Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago decidió ayer mantener bajo la medida cautelar de prisión preventiva al abogado Luis Hermosilla, investigado por varios delitos de corrupción y económicos, incluyendo soborno y cohecho, en el llamado caso Audios.

De acuerdo con lo expuesto por el defensor y hermano del imputado, Juan Pablo Hermosilla, luego de que su representado volviera a la cárcel el 30 de marzo por orden de la Corte de Apelaciones de Santiago, ha sufrido descompensaciones que comprometen su salud.

"No es necesaria la prisión de Luis, y está poniendo en riesgo grave la salud de Luis. Esto ya no es una cuestión teórica, como era antes", pues hubo "un evento que tuvo lugar hace una semana, que, además, dejó muy complicada a Gendarmería", advirtió el defensor.

Considerando "las operaciones y los ataques al corazón que ha tenido Luis, que le pase una subida de presión de ese nivel implica que tiene que partir rápido a la clínica, porque tiene una de dos posibilidades inminentes: o un nuevo ataque al corazón, que es lo más probable que lo mate, o un derrame cerebral o algo similar", indicó.

Juan Pablo Hermosilla además expuso que otro factor es el hecho de que ya no esté preso el exsubsecretario Manuel Monsalve, quien es médico y que el 19 de mayo, tras seis meses, fue excarcelado. "Imagínese lo tranquilizador que fue para él (Luis Hermosilla, durante el alza de presión) tener un médico en la pieza de al lado, que le permitiera tomar las medidas necesarias mientras llamaban a los enfermeros de la Enfermería de Capitán Yáber", enfatizó el abogado.

Sin embargo, el tribunal señaló que el estado de salud de Luis Hermosilla "no es antecedente suficiente" para revertir la prisión preventiva y ordenará controlar dos veces al día su presión arterial.