A 3 años de la primera Cuenta Presidencial de Boric: las promesas pendientes para la región
DEBATE. En su programa de gobierno, el Mandatario anunció un nuevo sistema de salud pública y avanzar en superar el déficit habitacional. Pero la realidad dice lo contrario, con centros asistenciales en crisis y más campamentos que antes.
A pocos días de la última Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric, la Región de Valparaíso sigue esperando que se cumplan las promesas que el propio Mandatario anunció en su programa de gobierno. En él identificaba como prioridades locales específicas un nuevo sistema de salud pública y avanzar en la solución del déficit habitacional, junto con el compromiso "de distribuir el poder del Estado de forma igualitaria en el nivel territorial".
Ese primer año también fue anunciado el tren rápido Santiago-Valparaíso, mientras que en materia portuaria, un experto de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso analiza los compromisos originales del gobierno y su contraste con los avances reales.
En salud se retrocedió
El programa de gobierno del Presidente Boric puso como una prioridad avanzar hacia un "nuevo sistema de salud pública", un deseo que se quedó en el papel y que difiere tristemente de las complejidades que enfrenta el sistema sanitario en la Región de Valparaíso, con las carencias del Hospital Carlos Van Buren, donde pacientes han denunciado la falta de insumos vitales y hasta partos realizados sin anestesia, o lo que pasa en el nuevo Hospital Gustavo Fricke, con una infraestructura millonaria que se llueve y no responde a las necesidades de la población.
Desde el Colegio Médico de Valparaíso, su presidente, Ignacio de la Torre, mostró su decepción respecto a que "no se ha avanzado en ninguna mejora seria de la infraestructura sanitaria de la Región de Valparaíso en el eje del Servicio Salud Valparaíso-San Antonio".
En ese sentido, recordó que los hospitales de Casablanca y San Antonio fueron heredados de gobiernos anteriores y que ni el Hospital Psiquiátrico El Salvador, ni el Eduardo Pereira, ni el Carlos Van Buren cuentan con proyectos de mejora ni financiamiento asignado.
"Tampoco se ha renovado la infraestructura del Cesfam Mena, de Valparaíso, que sigue funcionando de forma transitoria tras un incendio", señaló, cuestionando, además, que ni siquiera "hemos visto avances significativos en una red ambulatoria de salud mental".
Según el dirigente, estamos frente a "un gobierno que prometió mejorar el estándar de salud y que, de hecho, hablaba de un nuevo sistema de salud para Valparaíso, que no se concretó". Peor que eso, recalcó, "lejos de concretarse un nuevo sistema de salud, este gobierno terminó con un sistema más deteriorado y desmejorado que el que recibió en marzo de 2022".
62% en vivienda
En materia de vivienda, el Ejecutivo asumió su mandato con una Región de Valparaíso que encabeza todos los rankings de campamentos y así lo expuso el más reciente Catastro Nacional de Campamentos 2024-2025, de Techo Chile. Específicamente, la región sufrió un alza de 19,6% en asentamientos informales respecto al último año, con un total de 355 campamentos, y con Viña del Mar liderando la estadística a nivel nacional con 114 tomas activas, seguida de Valparaíso, que es la séptima del país, con 81.
En un análisis de la estrategia impulsada por el Gobierno, la plataforma técnica Déficit Cero, que trabaja con diferentes actores del mundo social, académico, público y privado para enfrentar el problema, se plantea que "el Plan de Emergencia Habitacional (PEH) en la Región de Valparaíso se propuso metas ambiciosas, significativamente más altas que las alcanzadas en años anteriores", pero se reconoce que, en la práctica, los pasos que se han dado más bien son limitados.
Como analista de estudios de Déficit Cero, Saúl Ketterer dice "el avance general ha sido del 62% a sólo un año del cierre del gobierno", ubicando a Viña del Mar "como la comuna más crítica, con casi la mitad de sus proyectos sin iniciar", lo que en números se traduce en que apenas 3.229 iniciativas comenzaron a ejecutarse en la comuna de un total de 6.533.
Sin embargo, Ketterer reconoce que "una de las explicaciones que se han mencionado es que la inversión para la reconstrucción tras el incendio que afectó a Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana ha desviado recursos y atención de los proyectos presupuestados originalmente, impactando significativamente la capacidad de concretar las metas establecidas".
Por lo anterior y para asegurar que nuevos imprevistos no alteren la ejecución de los recursos comprometidos, el investigador de Déficit Cero propone que "Valparaíso, al ser una de las regiones con mayor número de campamentos, requiere un enfoque especial", apuntando a lo "necesario que es priorizar y garantizar recursos específicos para estas zonas críticas".
El tren ya no es rápido
En su programa de gobierno, el Presidente Gabriel Boric también se dio el gusto de compartir uno de sus principales compromisos con la Región: el tren de alta velocidad que unirá Santiago y Valparaíso. Según el académico de Ingeniería Industrial de la PUCV y experto en transporte, Franco Basso, lo que hoy existe es "una propuesta que no cumple ninguna de las dos condiciones que se pusieron sobre la mesa en el plan de gobierno".
"Por una parte, no se trata de un tren que va a Valparaíso, pues este tren en realidad va al sector de El Salto, en Viña del Mar, ni se trata de un tren rápido, sino más bien de un tren convencional", indicó el experto. Y aunque reconoce que puede ser útil para quienes viajan entre Santiago y zonas interiores de la región, asegura que "no cumple la promesa de ser una solución para aquellas personas que hacen viajes periódicos entre Santiago y Valparaíso", consciente de que, hasta ahora, el proyecto "no tiene punto de comparación con lo que ocurre actualmente con los buses interurbanos que en una hora y media, más o menos, hacen el transcurso del viaje completo".
Puerto sin ciudad
En materia portuaria, más allá del consenso en torno al Acuerdo por Valparaíso, el académico de la PUCV Leopoldo Santibáñez ve falencias estructurales que, a su juicio, no han sido corregidas. "El Acuerdo por Valparaíso fue un buen impulso que hizo el Gobierno", admite, aunque sabe que "su materialización quedó al debe en dos elementos centrales".
Primero, agrega, "en el punto seis del acuerdo no se incluyó a las ciudades en su participación en la construcción del puerto, ya que por un lado va caminando la licitación y, por otro, va la participación de la ciudad". A su juicio, "el puerto es una industria que necesita incluir a la ciudad en su desarrollo, ya que mientras más crece el puerto, más debería recibir la ciudad", apuntando a la creación de una suerte de "royalty portuario", que, cuestiona, "no está incluido en el acuerdo".
Su diagnóstico también es crítico cuando se refiere a la participación ciudadana, uno de los compromisos más citados del acuerdo y que, según él, no ha pasado del simple discurso. "Lo que sí se ha estado haciendo es tratar de incluir a las comunidades, convencerlas de que el puerto va a funcionar", señala.
"Pero el municipio no tiene hoy una herramienta concreta. No hay un instrumento de participación. No lo tiene", sostuvo, insistiendo en que "hay voluntad de que se participe, pero no hay mecanismos que aseguren una participación efectiva de la ciudad. Y eso es clave.
Bajo su mirada, "si la ciudad no participa del puerto, no se cumplen los objetivos centrales: un puerto sostenible, socialmente participativo, institucionalmente viable y con proyección económica. Hoy, eso no se está logrando".
Centralismo
En materia de descentralización, el pasado domingo, en la sección de Reportajes de este Diario, el gobernador Rodrigo Mundaca daba cuenta del escepticismo que siente respecto a su propio gobierno. "No tengo muchas expectativas" en la Cuenta Pública, afirmó, aunque dice esperar "un anuncio en materia de ley de rentas".
El consejero regional de la UDI Osvaldo Urrutia ve un panorama desolador. "Lo cierto es que ha pasado otro año más y el centralismo sigue siendo una constante estructural de nuestro país", sentenció, criticando lo que define como un compromiso "escaso" y meramente retórico por parte del gobierno del presidente Gabriel Boric.
Según Urrutia, el "más grave de los retrocesos ha sido la persistencia de los recortes presupuestarios a los gobiernos regionales, efectuados durante los últimos tres años en forma imprevista e inconsulta". A lo anterior, le suma "la falta de voluntad política al postergar, una vez más, el debate en el Parlamento de una Ley de Rentas Regionales que les otorgue autonomía financiera a los Gores". En esa línea, cree que "pretender que los Gores impulsen el desarrollo de sus territorios sin disponer de los recursos y competencias necesarios constituye una falta de realismo, irresponsabilidad o populismo".
"Este gobierno terminó con un sistema de salud más deteriorado y desmejorado que el que recibió".
Ignacio de la Torre, Presidente regional del Colmed
"El más grave ha sido la persistencia de los recortes presupuestarios a los gobiernos regionales en forma imprevista e inconsulta".
Osvaldo Urrutia, Consejero regional (UDI)
"Valparaíso, al ser una de las regiones con mayor número de campamentos, requiere un enfoque especial".
Saúl Ketterer, Analista Déficit Cero
"Ya no se trata de un tren que va a Valparaíso, pues en realidad va al sector de El Salto, en Viña del Mar, ni se trata de un tren rápido".
Franco Basso, Académico PUCV