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Servicio público
El reciente informe de la Contraloría reveló que más de 25 mil funcionarios públicos viajaron al extranjero mientras se encontraban con licencia médica, lo que significó un gasto estimado superior a los US$ 300 millones.
Lo alarmante no es sólo la magnitud de las cifras, sino la normalización de un abuso que pareciera no distinguir cargo ni institución, dejando de ser un problema laboral y volviéndose una cuestión de confianza.
Cada peso defraudado no sólo significa hospitales que no se construyen o niños que no tienen sala cuna, cada peso defraudado erosiona la confianza y profundiza nuestra crisis moral. Un "caiga quien caiga" no basta. Debemos devolverle el sentido al servicio público y recordar que, así como los pesos, la confianza también es un recurso finito y pareciera que a este gobierno se le olvidó.
Sebastián Olivares A.
Letra muerta
Las licencias falsas para viajar al extranjero son la punta del iceberg de muchísimas otras en que los licenciados se mantienen en el país, desarrollando otras actividades. Auspician esta aseveración las estadísticas que muestran las cantidades de licencias otorgadas y su duración.
Los servicios públicos rasgan vestiduras y aseguran que con una investigación sumaria exhaustiva se sancionará a los culpables; aunque así fuese, no solucionará el problema que aqueja a la sociedad.
Sin duda, los actos de corrupción que se investigan en diferentes ámbitos lleva a pensar a algunos ciudadanos que "si ellos lo hacen, por qué no puedo pedir una licencia para ayudarme".
Las medidas coercitivas que se tomen para evitar estas licencias falsas, tarde o temprano serán nuevamente letra muerta.
Finalmente se llega a la conclusión que es un problema ético y sólo es posible solucionarlo educando en el tema a los niños y jóvenes, junto a sus padres y apoderados. Es a muy largo plazo, pero vale la pena intentarlo.
Marcos Concha Valencia
Legislación
La circunstancia que 25.000 funcionarios públicos hayan salido del país estando con licencia médica nos llama a revisar la legislación actual. Desde el punto de vista del profesional de la salud, existen instituciones que inhiben emitir dichos documentos sin fundamento médico (reciente Ley 21.746 e ilícitos penales). Sin embargo, el problema parece ser desde el beneficiario de la licencia médica.
El estatuto administrativo establece que, durante su vigencia, el funcionario continuará gozando del total de sus remuneraciones.
Además, y frente al uso indebido, malicioso o el no cumplimiento de la licencia médica, la atribución de responsabilidad y, por ende, la sanción (incluida la destitución), debe efectuarse mediante un sumario administrativo y luego constar en un acto administrativo, por lo que el incentivo para no caer en estas prácticas es bajo. Es decir, se mantiene la remuneración durante la licencia y la posible sanción no es inmediata.
Christopher Gotschlich Abogado y académico U. Central
Supermercado en Zapallar
La reciente controversia por la eventual instalación de un supermercado en el centro de Zapallar ha suscitado un debate que va más allá del comercio. Zapallar no es un conjunto de construcciones pintorescas: es una comunidad con alma. Fue fundada con visión y propósito por don Olegario Ovalle en el siglo XIX, como un refugio de armonía entre el ser humano y el paisaje.
Es importante recordar que el cambio no es, por sí solo, negativo. Zapallar mismo significó un cambio. Un asentamiento humano que alteró el borde costero y su ecosistema, pero que lo hizo con sentido, con una propuesta de valor social y cultural.
No se trata de rechazar toda inversión o cerrarse al progreso, sino de exigir que se ajuste a las reglas y principios que protegen la integridad de nuestros territorios. Es legítimo preguntarse si la instalación de una infraestructura comercial -cualquiera sea- se condice con el instrumento de planificación territorial vigente, y si respeta no sólo su legalidad formal, sino su espíritu.
Los instrumentos de planificación no son meras formalidades. Son pactos sociales y técnicos que buscan dar coherencia a la evolución de los lugares. Romperlos o forzarlos, sin considerar a las comunidades que le dan vida a los territorios, no es desarrollo: es desarraigo.
Zapallar tiene algo que muchos otros lugares ya han perdido: un equilibrio frágil pero vigente entre historia, paisaje y comunidad. Ese equilibrio no es enemigo del cambio, pero requiere, para mantenerse, respeto y cuidado.
Francisco Javier González Cruz Abogado de González, Guzmán y Matthei
Necesidad impostergable
La muerte de un niño de segundo medio en el patio de un colegio en la comuna de Quilpué hace un par de años, a causa de un paro cardiorrespiratorio, conmocionó a toda una comunidad. ¿Qué ocurriría si su hijo sufre un paro cardíaco en el recreo? ¿Quién sabría actuar en esos minutos críticos? ¿Cuántos colegios en Chile cuentan efectivamente con personal capacitado en reanimación cardiopulmonar (RCP) y con desfibriladores externos automáticos (DEA) operativos, tal como exige la Ley 21.156?
Según la American Heart Association, aplicar RCP de inmediato puede duplicar o incluso triplicar las posibilidades de sobrevivencia. Pero si nadie sabe cómo reaccionar, esa oportunidad se desvanece.
El Ministerio de Educación aún no exige capacitación obligatoria en RCP y primeros auxilios para la comunidad escolar, ni fiscaliza con rigurosidad el cumplimiento de la normativa vigente.
Enseñar matemáticas o historia es fundamental, pero enseñar a salvar vidas debería ser igual de prioritario. La preparación ante una emergencia de salud no es un lujo: es una necesidad impostergable. No podemos permitir que la vida de un niño dependa del azar o de la improvisación.
Francisca Irarrázaval Académica Escuela de Enfermería, Universidad de los Andes