"La demanda por cobre que viene es grande y se necesitan hacer todos los proyectos que podamos"
Varios son los desafíos que debe enfrentar el sector minero de cara a los próximos años. A ello se suman exigencias inmediatas que se relacionan, además, con la necesidad de aumentar la producción de cobre. "La electromovilidad, el desarrollo de la inteligencia artificial, la necesidad de data centers va a requerir una cantidad importante de cobre en los próximos años", remarca el presidente de la Sociedad Nacional de Minería (SONAMI), Jorge Riesco.
En tal escenario, surgen problemáticas que deben ser abordadas como la permisología o el uso del agua, recurso básico para otras actividades económicas de la región como la agricultura. "Se nos ha visto como rivales a veces irreconciliables, pero mi experiencia es bastante distinta. Hay diferentes situaciones en distintas regiones. Por ejemplo, en Atacama uno ve faenas mineras al lado de plantaciones de uva en el valle de Copiapó. (…) En la Región de Valparaíso hay faenas antiguas que han podido convivir perfectamente con el sector agrícola", explica Riesco.
- A su juicio, entonces, son actividades compatibles.
- Pienso que sí y donde se nos ha tratado de enfrentar mucho es en el tema del agua. (…) No vamos a decir que son dos actividades que hayan tenido un pasado muy eficiente en su uso, pero creo que tanto los mineros como los agricultores hemos aprendido que el agua es un recurso tan valioso que hay que cuidarlo y hemos mejorado en mucho en su aprovechamiento. En el caso de la minería reutilizando el agua a niveles muy importantes. En promedio hablamos de sobre un 70%. (...) Habría que pensar en combinar infraestructura y medios como para aprovechar y generar sinergias, entre una actividad y la otra. Asociarnos con miras a poder hacer sustentables ambas actividades.
- La desalación también es un aspecto en este tema.
- Creo que es el llamado hoy día en algunas zonas, probablemente en Valparaíso o Coquimbo por la escasez hídrica. Eso es importante y también el reúso del agua donde la tecnología ha ayudado mucho. Todo lo que es agua domiciliaria, por ejemplo, que se daba por perdida, hoy existen intercambios de agua grises -que pueden ser a lo mejor usadas en algunos procesos- por agua fresca que las mineras o la agricultura puedan generar porque además hay que tener los recursos, ya que se requiere habilitar los pozos, hacer obras de construcción. Todo eso en la medida que se asocia a proyectos grandes es viable.
- ¿Cómo se ha avanzado en seguridad, sobre todo en relación con el cambio climático? El año pasado vimos en la región un socavón que se produjo en un relave.
- Lo primero es que todas las obras en una empresa minera o faena minera, tienen resguardos respecto a estas situaciones, por lo tanto, la primera tranquilidad que hay que tener es que si viene una lluvia grande, eso está previsto y hay técnicas como los canales de cintura o de contorno que permiten conducir el agua en exceso. Ahora, esa lluvia superó todos los pronósticos y por lo tanto, uno podría pensar que las instalaciones no estaban preparadas para esa cantidad de precipitaciones y por ese produjo un deslizamiento en la pared del relave. Pero mire, lo curioso de esto es que se deslizó la pared que es de material que no es minero, sino que es un material de empréstito, pero el relave mismo no sufrió ningún derrame. ¿Por qué? Porque son relaves pesados, a los cuales se les ha quitado prácticamente toda el agua y que han sido depositados de una manera tal de que resultan prácticamente inexpugnables, digamos, para estos fenómenos.
PUNTA DEL ICEBERG
- ¿Cómo ven desde el sector la tramitación del proyecto contra la permisología?
- El proyecto que ha impulsado el ministro Grau, concretamente el de los permisos, lo hemos respaldado fuertemente porque creemos que va en el sentido correcto. Si se aprueba, haría una buena diferencia en cuanto a esa parte de la tramitación, porque elimina varias trabas, ordena el asunto y le da un marco. Pero eso es la punta del iceberg. El inconveniente mayor es el que se da en la tramitación ambiental (…) mientras no ataquemos eso, no vamos a estar yendo a la raíz del problema.
- Y respecto al anuncio de fast track que hizo el ministro de Hacienda.
- Es interesante porque entendemos que apunta a todo el conjunto de la tramitación. O sea, en el fondo lo que se necesita aquí es que nos aseguremos de que los proyectos que se proponen, se adecuen a los estándares, y que no le demos oportunidad a la burocracia de frenarlos, a veces por detalles que son insignificantes al lado de su beneficio (...) Esperamos que sea también para grandes proyectos mineros, porque lo que se nos viene en términos de demanda por cobre en el mundo es tan grande, que necesitamos hacer todos los proyectos que podamos. Y para eso necesitamos darle velocidad, porque no podemos esperar 10 años a que una iniciativa se pueda empezar a construir.
- ¿Cuál es el nivel de demanda que se prevé?
- Nosotros como país estamos estancados en los 5 millones y medio de toneladas de cobre fino de producción al año. Eso es entre un 20 % y un 25 % de la producción mundial. Se habla de entre 6 y 10 millones de toneladas más. Y creo que si pudiéramos tener algunas medidas que no significan ni siquiera modificaciones legales, podríamos aspirar a incrementar un 20% más nuestra producción.
- En la región hay mucha pequeña y mediana minería. ¿Qué medida podría beneficiar en específico a ese sector?
- Para nosotros, si esta idea del fast track se mantiene, ya es un movimiento aunque se limite a algunos proyectos. Eso habrá que verlo, pero ya se movería el cerco. (…) No tengo ningún antecedente, pero ojalá hubiera algo en términos similares que abra un poco la llave para la pequeña minería, en términos de poder eximirla también de una serie de permisos muy limitantes que tienen a un nivel muy bajo de producción. Hay que recordar que sólo hasta 5.000 toneladas un proyecto está exento de ingresar al servicio de evaluación ambiental y creemos que es un límite muy bajo.
- Debería aumentar ese límite.
- Hoy día la las leyes son mucho más bajas que antes. (...) Así que necesita trabajar con volúmenes más altos si quiere automatizar una faena y eso no necesariamente va a traer impactos. Pueden tenerlo en general, pero no lo suficientemente importantes como para justificar poner en movimiento una burocracia tan pesada como es la ambiental, en torno a esta tramitación de permisos. Entonces, nosotros creemos que hay una razón ahí no sólo económica, sino que además social.
- ¿Eso impactaría en la región?
- En la Región de Valparaíso tenemos mucha pequeña minería que sería muy beneficiada con estos procesos, porque además está más cerca de áreas industriales, teniendo una buena oportunidad de poder acercar un poco más de tecnología a estas explotaciones. Entonces, creo que ahí hay una opción de crecimiento que debería ser tomada en cuenta.
- Ustedes como gremio hicieron una propuesta de modernización de Enami. ¿Cómo ha sido la recepción en las autoridades?
- Ha sido muy buena porque la propuesta es súper razonable, muy moderada y, además, no sólo propone medidas o acciones concretas en materia de estabilizar la situación productiva de Enami, primero de mejorarla y después de que pueda crecer, sino que además hemos hecho varias sugerencias en torno a cómo se podría financiar. (...) Creo que esto nos va a permitir ordenar la discusión y, si no se alcanza en este gobierno a solucionar enteramente el tema, nos va a dejar muy bien encaminados para darle una continuidad, porque estos son temas de Estado.
"Creo que con algunas medidas podríamos aspirar a incrementar un 20% más nuestra producción".