Expertos analizan discurso: pobre mención a la región y Presidente "le habló a su nicho"
ACADEMIA. Analistas coinciden en que Mensaje careció de mayores anuncios para la zona, más allá del recuento de lo realizado. Gobierno no quiere perder la agenda en año electoral.
Tras la realización de la última Cuenta Pública del Presidente de la República, Gabriel Boric, El Mercurio de Valparaíso consultó a diversos analistas sus impresiones de los dichos del Mandatario y qué fue lo más destacado de sus palabras.
En el caso del académico de la Escuela de Comunicaciones y Periodismo UAI, Andrés Scherman, destacó que el tono del Presidente "fue moderado y se mantuvo sentido republicano de la cuenta". Sin embargo, no se habrían abierto "espacios de convergencia o colaboración para los próximos meses entre Gobierno y oposición".
El experto además afirmó que gran parte del discurso estuvo dirigido a los adherentes más firmes del mandatario, "a un núcleo duro que, de acuerdo a las encuestas, se ha traducido en un apoyo a su gestión de aproximadamente un 30%", esto ya que "los dos temas que más se han destacado son la ley para despenalizar el aborto y las medidas contra Israel".
Esta opinión coincide con el pensamiento de la analista de ElectoraLab, María José Arredondo, quien afirmó que este último discurso del Presidente "evidencia una estrategia discursiva cada vez más marcada: hablarle a su nicho, consolidar una identidad política propia y proyectarse más allá de la coyuntura".
Promesas
La experta además declaró que, según su análisis, los dichos de Boric estrían "cargadas de promesas sin anclaje", las cuales "si bien pueden ser interpretadas como voluntad política, también corren el riesgo de alimentar aún mas la frustración ciudadana ante un Estado que muchas veces parece no cumplir o estar desconectado".
"La retórica aspiracional puede funcionar cuando se acompaña de hechos, pero en este caso, se siente como una reiteración de compromisos incumplidos, como es el caso del aborto", declaró Arredondo.
Además, una de las mayores críticas realizadas por la experta fue que el Presidente Boric pareciera "obsesionado con su lugar en la historia. Busca que su mandato sea recordado como un punto de inflexión", puntualizando también que "esa ambición, legítima en todo liderazgo, se vuelve problemática cuando reemplaza la necesidad de lidiar con la complejidad de la coyuntura. Gobernar no es solo proyectarse al juicio futuro de la historia, sino enfrentar las urgencias del presente con responsabilidad".
Cohesión
Por otro lado, el experto en comunicación política y académico de la Escuela de Periodismo PUCV, Claudio Elórtegui, explicó que, bajo su análisis, esta Cuenta Pública se focalizó en una serie de "medidas y avances concretos realizados por el gobierno el último año, que pueden concitar el interés de la ciudadanía en un año electoral y bajo el contexto de un gobierno que no quiere perder el control de la agenda a 9 meses de dejar La Moneda, con un fuerte énfasis en mantener el apoyo transversal del oficialismo".
Para Elórtegui, esta y las anteriores Cuentas Públicas de Gabriel Boric generalmente han apuntado a la "búsqueda y la apelación a la cohesión, pues evita como estrategia discursiva la polarización, aunque algunos anuncios, debido a la connotación valórica y las posiciones geopolíticas actuales, provocan lógicas divisiones". Rescata que este discurso en específico habría comprendido "que la gestión de las políticas públicas son parte de un proceso de avance colectivo e institucional, una sumatoria de esfuerzos que se logran forjar con el tiempo y el paso de las presidencias".
"Las refundaciones o creer que la vida política nace con uno, es una mirada que se evitó en esta Cuenta Pública, al igual que los "empates políticos". De hecho, el Mensaje planteó que los problemas son sistémicos y requieren de reformas conjuntas", detalló el experto.
Vacíos
En cuanto a las materias que debieron ser mencionadas, pero no fueron abarcadas en el discurso, Claudio Elórtegui expresó que, en su opinión, faltó algún anuncio relacionado a una "política integral para los adultos mayores y para el envejecimiento del país", además de "comenzar a plantear una perspectiva regionalista que establezca las bases de una adecuada descentralización". Sin embargo, también rescató el "nuevo paradigma con el que el país comenzará a trabajar su gestión de riesgos ante los desastres naturales".
Quinta región
En relación a esto, y en cuanto a la poca mención que se hizo de Valparaíso en el discurso del Presidente, el experto lamentó que nuestra región "fue tocada de forma fragmentada e indirecta en algunos de los anuncios sectoriales", reafirmando su opinión de que "el gobierno central, independiente su color político y en el periodo de los últimos 15 años, no tiene una preocupación real sobre la región, pesa menos que un conjunto de comunas de la Región Metropolitana que siguen teniendo prioridad en las respuestas políticas".
Esta opinión fue compartida por la analista María José Arredondo, quien afirmó que la Quinta Región fue mencionada "cerca de veinte veces en el discurso, pero eso no equivale necesariamente a tener una visión territorial".
"Soporte logístico"
"El nombre de la región fue mayormente vinculado a puertos, transporte o ministerios: pura infraestructura. El territorio aparece como soporte logístico, no como comunidad viva. No hay una lectura política ni social del espacio regional, sino una lógica funcional donde lo local es relevante solo en tanto si sirve al centro", declaró Arredondo.
¿rol de Estadista?
Por su parte, el magíster en ciencia política y académico de la Facultad de Artes Liberales UAI, Fernando Wilson, al ser consultado sobre si el Presidente Gabriel Boric, ya al final de su gobierno, podría ser considerado un "estadista", declaró que este título "lo da la historia", por lo que "difícilmente se puede conseguir a corto plazo".
Sin embargo, el experto apuntó que Gabriel Boric "no solamente no ha cumplido el plan de gobierno que había ofrecido, sino que al mismo tiempo se ha demostrado como errático y confuso en algunas aplicaciones, algunas posiciones".
Es por lo anterior y porque este título "requiere de una carrera política más larga que el Presidente aún no tiene, por decirlo de alguna manera", que el académico afirma que esta será una interrogante abierta "que queda para los 30 o 40 años de carrera política que tiene para adelante".
Misma opinión comparte el ya mencionado experto Andrés Scherman, quien declaró que, si se ganó o no el rango de "estadista", es algo "que el tiempo dirá, pero en su trayectoria Boric ha tomado algunas decisiones difíciles, quizás dolorosas, que lo acercan a lo que se entiende como un estadista".
Un ejemplo de esto, según Scherman, es el haber firmado el Acuerdo por la Paz Social y la Nueva Constitución el 2019, "contra la opinión de su partido o promover el ingreso de figuras del Socialismo Democrático en los principales cargos del gabinete".
"Los dos temas que más se han destacado son la ley para despenalizar el aborto y las medidas contra Israel".
Andrés Scherman, Académico UAI
"Las refundaciones o creer que la vida política nace con uno, es una mirada que se evitó en esta Cuenta".
Claudio Elórtegui, Académico PUCV
"Evidencia una estrategia discursiva cada vez más marcada: hablarle a su nicho, consolidar una identidad".
María José Arredondo, Analista de ElectoraLab
"No solamente no ha cumplido el plan de gobierno (...), sino que al mismo tiempo se ha demostrado como errático".
Fernando Wilson, Académico UAI