Patricio Guzmán entrega detalles de su nueva película "El botón de nácar"
CINE. El realizador chileno estrenará su documental el 15 de octubre en las salas del país.
En su calidad de presidente del Festival Internacional de Documentales de Santiago, Patricio Guzmán (1941) acaba de estar en esa ciudad presidiendo el 19° FIDOCS. Fue allí donde decidió exhibir por primera vez su más reciente obra: "El botón de nácar", ganadora del Oso de Plata al mejor guión en el Festival de Cine de Berlín de este año.
Ahora, se prepara para el estreno en salas de esta producción chileno-franco-española que dura 82 minutos y será distribuida por Market Chile, el cual está fijado para el 15 de octubre.
Si en la primera parte de la trilogía, "Nostalgia de la luz" (2010), el cineasta chileno indagó en los delicados lazos entre la exploración del cosmos y la tenaz búsqueda de familiares de detenidos desaparecidos en el desierto; en "El botón de nácar" Guzmán posa la mirada en el agua y su presencia vital para el universo, así como en el mar y su memoria de los crímenes que atestigua. La historia de despojo y crueldad en contra de los indígenas de la Patagonia, en tiempos de colonización, y su casi total exterminio, encuentra un símil en los 1.400 detenidos desaparecidos arrojados desde helicópteros al mar, atados a rieles ferroviarios para que no flotaran y no aparecieran en las costas.
Parte del documental cuenta una historia que acaeció en los días de la colonización de la Patagonia, cuando un grupo de ingleses comandados por el capitán Fitz Roy, subió a uno de sus barcos a un trío de jóvenes yaganes. Uno de ellos accedió al viaje a cambio de un botón de nácar y de allí recibió su nombre de Jeremy Button.
La cinta, además, incluye las voces del historiador Gabriel Salazar y del poeta Raúl Zurita, quienes reflexionan sobre estas correspondencias y cruces.
Diálogo abierto
Aunque todavía no debuta comercialmente, algunas personas de la región tuvieron la posibilidad de ver ya la película gracias a una proyección especial realizada en la sala Condell de Valparaíso el domingo pasado, y en la que el cineasta radicado en Francia dialogó con el público.
En la oportunidad fue consultado por varios temas ligados a esta producción, como por ejemplo una supuesta similitud entre él y Jeremy Button. "Entendí la metáfora que había detrás en el sentido de ser alguien que vive fuera y se preocupa de su tiempo. Por cierto que estoy fijado en los problemas chilenos, en lo que pasa aquí", afirmó el cineasta, quien reconoció que le gusta mucho volver a Chile y pasear por su geografía.
También hubo espacio para ahondar en otros temas de su trabjo.
-En "Nostalgia de la luz" y "El botón de nácar" aludes frecuentemente, y se nota que te gusta mucho, a la astronomía, ¿por qué haces esos cruces?
-Porque es una manera amena, si tú quieres, o una manera auténtica -porque me interesa la astronomía-, de contar lo que pasó aquí como un hecho espacial. Porque la explosión de una supernova cerca de la Tierra fue un fenómeno espectacular, enorme, que barrió con una parte del espacio y sucedió al igual que el golpe aquí. De tal manera que yo creo que son equivalencias imaginativas que ayudan al relato, para que el espectador no se sienta acogido siempre solo por el tema chileno si no para que esté un poco más abierto.
-Como documentalista te nutres de muchas fuentes como antropólogos, pintores, e historiadores. También recurres a poetas y ahora tomas la figura de Raúl Zurita, ¿cómo nació ese nexo?
-Zurita es genial. Cuando le hice la primera entrevista no me di cuenta de lo genial que era y la hice sin saber para qué. Pasó un año y ya estaba montando el documental cuando pensé que había que volver a ver a Zurita y hacerle más preguntas. Desgraciadamente me encontré con un hombre muy enfermo, que además no se medica como debe y entonces es un caos, pero hice lo que pude.
-¿Cómo va la tercera parte de la trilogía?
-Nada, no va en nada, porque todavía no he hecho casi nada.
-¿No hay algunos esbozos?
-Tengo la idea, ya escribí un esbozo para conseguirme plata pero es un esbozo, un invento. A veces invento cosas, invento diálogos que no he tenido, para convencer a que me den dinero. Después lo hago y es casi igual, eso es lo cómico.
-La imagen de la cordillera es algo que te ronda
-Sí, yo quiero hacer eso. Primero quiero entrar un poco y ver desde dentro la cordillera, quiero ver ese conjunto de montañas.