Claudio Ramírez
El gasto de traslado que realiza una persona para movilizarse en el Merval, en un ascensor porteño para bajar al plan de Valparaíso o el costo del pescado serán algunos de los indicadores que serán medidos a partir de este mes y hasta el próximo año, en el marco de la Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF) que efectuará el INE Valparaíso.
Una acción indispensable para ya, a partir de 2018, comenzar a actualizar la medición del IPC. De hecho, la región aporta con un 10% de la muestra nacional para lo cual serán encuestados 1300 hogares de Valparaíso, Viña del Mar, Concón, Quilpué y Villa Alemana. "Tiene una representatividad mucho mayor porque se diferencian los distintos patrones de consumo asociados a cada territorio. Y se hace cada cinco años para tener una actualización mayor, ahora esperamos saber que productos en el caso puntual de la región se consumen ahora", comentó el director regional del INE, Mauricio Serrano, quien agregó que también se observarán algunas conductas particulares como, por ejemplo, si la gente de la región acostumbra ahora a salir más a comer afuera que antes.
Percepciones
"Saber por ejemplo si se gasta más dinero en bencina o en pasaje de locomoción colectiva ya sea bus o tren, que en el caso de la zona mueve una gran cantidad de pasajeros. En fin son percepciones que vamos a confirmar con los resultados de esta medición", precisó el personero, recordando que esta es la única encuesta que mide los gastos del hogar durante un año calendario.
"Los indicadores que se registren en la zona son muy importantes, ya que es la segunda muestra más grande después de la Región Metropolitana y es relevante ser precisos pues el IPC es clave para muchas variables como las pensiones, los sueldos, los arriendos, en fin ", remarcó. En el marco de la actualización será relevante saber si se mantienen los parámetros de la anterior que se realizó hace cinco años donde el mayor nivel de gastos apuntó a alimentos y bebidas (18%), transportes (16,4%), vivienda (13,5%) y educación (7,9%).
Dado que la EPF implica un estudio detallado sobre los gastos e ingresos de los hogares, la metodología de aplicación contempla cuatro visitas de un encuestador del INE a cada vivienda seleccionada, en un periodo de quince días donde se aplicarán las seis libretas que componen la encuesta.
Estas libretas abarcan el registro y características sociodemográficas de las personas que componen el hogar, los gastos individuales diarios que realiza cada integrante de 15 o más años durante los días que dura la encuesta, los gastos en servicios mensuales del hogar como agua, luz, arriendo y educación, entre otros.
A ello se suman los egresos denominados del recuerdo, que son los realizados 3, 6 y 12 meses antes de la aplicación de la encuesta y que hacen mención a bienes y servicios de baja frecuencia de compra y de alta importancia dentro del presupuesto del hogar, como muebles, automóviles, artefactos de línea blanca o viajes. Se agregan los ingresos con los que cuenta el hogar y, por último, los gastos financieros en los que incurre.
Además de servir como base para el IPC, la encuesta también tiene otras utilidades que sirven para las políticas públicas que se deben adoptar. "Proporciona importante información al realizar una actualización de las líneas de indigencia y pobreza para la medición oficial de ésta por ingresos del país, de allí la necesidad de ir renovando los datos cada cierto tiempo", enfatizó el seremi de Economía, Aland Tapia. Debido al tipo de información que se requiere y al plazo que toma responderla, el INE contempló varias medidas de seguridad. La información solicitada es anónima, además, no se solicita nombre completo ni RUT de los encuestados, de tal forma que se garantiza la confidencialidad de los datos.
Los funcionarios de la institución se comunicarán directamente con los hogares seleccionados, entre 7 y 20 días antes, para avisarles que serán encuestados, y también se les informará sobre los datos del encuestador.
¿Es factible un IPC regional?
"La muestra que se analiza es demasiada pequeña para calcular un IPC regional", comentó el director del INE, Mauricio Serrano, aunque aclaró que sí permite hacer estudios, por ejemplo, para analizar patrones de alimentación de la gente o medir la canasta básica de alimentación que define la línea de la pobreza. Aclaró que para medir un IPC local "se requeriría una muestra mayor y no sé si sería útil porque, como tenemos la misma moneda, no creo que haya mucha diferencia".
2018 el primer semestre de ese año estarían disponibles los datos de la encuesta para actualizar IPC.
22 personas conforman el equipo del INE Valparaíso que trabajará en esta recopilación de datos.