"Los paisajes de la Quinta Región inspiran muchos de mis cuadros"
Si hay algo de lo que la Quinta Región puede jactarse es formar a grandes artistas. Uno de ellos es Hernol Flores, pintor criado en Rinconada, comuna de la Provincia de Los Andes. Entre árboles y cerros, desde su infancia este hombre, que en 2017 celebra 25 años de carrera, se maravilló con los parajes que lo rodeaban, los cuales durante toda su trayectoria han sido la inspiración de sus cuadros.
A pesar de vivir hace casi dos décadas en Temuco, Flores no olvida los lugares que motivaron su afición por la pintura. Fue así como esta semana llegó hasta el puerto para presentar su exposición "El azul del alma... mientras más profundo, más azul", que inauguró la temporada 2017 de la sala El Farol de la Universidad de Valparaíso y que podrá visitarse hasta el 28 de abril.
-¿Cuáles son las características que definen su estilo pictórico?
-La corriente que yo desarrollo es la pintura naif, también conocida como ingenua o primitivista. En el país soy reconocido en ese estilo porque siempre ha sido la temática principal de mis obras. Gran parte de mis cuadros se basan en el campo porque fue donde mi crié, entonces mi inspiración usualmente tiene que ver con el mundo rural y la naturaleza, lo que se ha potenciado desde que me fui a vivir a Temuco.
-Para usted la Quinta Región es entonces un recuerdo recurrente al momento de pintar sus cuadros.
-Por supuesto. Mis recuerdos más lindos fueron en Rinconada, porque estuve cerca de la naturaleza y el campo. En la Quinta Región vivía rodeado de vacas y gallinas y así aprendí a amar a los animales. También me maravillé con la naturaleza porque mi casa estaba rodeada de parronales, trigales y un estero. Los paisajes de la Quinta Región han inspirado muchos de mis cuadros.
-¿En esta exposición el público puede apreciar alguno de esos obras inspiradas en esta zona?
-Sí, hay varios de ese estilo. Principalmente de Valparaíso, ciudad que siempre pinto pero no de forma realista sino como yo la imagino, con muchos colores y referencias a la corriente naif.
-¿Es difícil realizar arte desde regiones, considerando que la mayoría del circuito cultural y las galerías de arte se concentran en la Región Metropolitana?
-Eso es algo que no puedo negar. Ser pintor y vivir en regiones implica perder mucho, porque dejas de ir a inauguraciones, museos, galerías de arte y todo ese circuito que te hace mantener vigente. En la región, en cambio, la vida cultural es mucho más lenta y eso genera que de alguna forma vayas quedando fuera de la prensa y las invitaciones, como que te invisibilizas. Cuando me fui a Temuco y después volvía a Santiago o a la Quinta Región mis colegas y los periodistas creían que ya no estaba pintando, porque me dejaron de ver. Tuve que dar muchas explicaciones y aclarar que no por vivir en el sur mi carrera había terminado. En ese sentido, vivir lejos de la capital juega un poco en contra, pero la paz y tranquilidad de Temuco siento que es impagable y de todos modos siempre he mantenido el contacto con la zona central, gracias a las amistades del mundo del arte que aún conservo en Santiago, Valparaíso y Viña del Mar y que me han permitido seguir desarrollando mi trabajo.
-¿Qué significa para usted volver a la Quinta Región a exponer sus obras?
-Para mí es un gran honor porque es la primera vez que hago una exposición individual en la Quinta Región y también en un lugar tan importante como la sala El Farol de la Universidad de Valparaíso, en la que además estoy abriendo el año de exposiciones. El Farol es un lugar que tiene un gran peso curricular y una gran importancia dentro de la plástica nacional, por lo que estoy muy honrado de que me hayan invitado.
-¿La exposición tiene cuadros a la venta o sólo se trata de una muestra que rememora sus 25 años de carrera?
-Hay de lo uno y lo otro. Hay obras que pedí prestadas a coleccionistas privados y entidades públicas justamente para mostrar la evolución de mi trabajo y celebrar mis 25 años. Esos cuadros no están a la venta, pero la gran mayoría de los que estoy exponiendo sí y pueden ser adquiridos por cualquier persona a la que le guste coleccionar arte.
"Ser pintor y vivir en regiones implica perder mucho, porque dejas de ir a inauguraciones, museos y galerías de arte. En la región, en cambio, la vida cultural es mucho más lenta" "La sala El Farol es un lugar que tiene un gran peso curricular y una gran importancia dentro de la plástica nacional, por lo que estoy muy honrado de que me hayan invitado""