Juan Carlos Moreno A.
Marcelo Oyarzún no había hablado de manera pública desde su arribo a Valparaíso como preparador físico de Miguel Ramírez en Santiago Wanderers a mediados del 2018.
Sin embargo, el profesional terminó su mutismo en las últimas horas para referirse no sólo a lo que será la pretemporada del Decano hasta el próximo 12 de enero, sino también a las graves dificultades con que se encontró al momento de asumir el cargo, la decepción que significó el no ascender en la campaña pasada y la expectativa que existe de cara a la Operación Retorno 2019.
El preparador físico de Mirko Jozic en el título de Colo Colo en la Copa Libertadores 1991 parece tenerlo todo controlado. Habla con seguridad y acabado conocimiento antes de referirse a lo que serán las próximas semanas de trabajo para un plantel del Decano que ayer arrancó muy temprano la jornada en las dependencias del Complejo "Don Elías" (sector de Santos Ossa), hasta donde arribó antes que el reloj marcara las 7.30 de la mañana, para luego realizar trabajo físico en el hotel Diego de Almagro (lugar de concentración) y finalizar con fútbol en Playa Ancha.
"Nosotros ya llevamos diez entrenamientos. Partimos el día 21 de diciembre con evaluaciones y la semana pasada hicimos ocho entrenamientos. Esta semana pretendemos hacer alrededor de diez y la próxima semana queremos hacer 18 jornadas en seis días. Entonces, desde el 21 hasta el 12 de enero, que es cuando termina este periodo de concentración, habremos completado 40 entrenamientos. Esa es la base con la que nosotros estructuramos la parte física, para luego hacer la parte futbolística con amistosos para que los jugadores lleguen de buena forma al primer partido, que será a mediados de febrero", explica el preparador físico del Decano.
Al profesional, hijo del fallecido entrenador Nelson "Consomé" Oyarzún, se le nota entusiasmado, adelantando que en los próximos días "haremos algo que hacía mi padre hace 40 años atrás, que es salir a trotar por el plan de la ciudad", destacando además la posibilidad de contar con el plantel completo.
Un cambio
Sin embargo, hay un tema que va más allá lo físico y que a Marcelo Oyarzún evidentemente lo entusiasma: La relación entre Wanderers y la gente de Valparaíso.
"Queremos devolver el cariño y el apoyo que nos dio la gente, especialmente en los últimos diez partidos. Mucho cariño, apoyo y energía positiva que para esta campaña vamos a necesitar, especialmente durante los partidos de local".
Para el PF la clave para entender el masivo respaldo con que el equipo caturro terminó jugando la temporada pasada se debe "a un cambio en la propuesta física y futbolística que se venía teniendo".
"En el Santiago Wanderers que nosotros queremos ver en cancha la intensidad se debe dar desde el primero y hasta el último minuto de juego, nosotros salimos a aplastar a los rivales", confesando que el objetivo "es llegar físicamente en un cien por ciento al primer partido del torneo".
Durante el diálogo, el PF no escatima en elogios para sus dirigidos. "Desde el primer momento, este grupo, especialmente los canteranos aunque también los que vienen desde afuera, han mostrado una nobleza impresionante para el trabajo. Ellos estaban carentes de un trabajo desde lo físico", agrega, concluyendo con una confesión que no deja de doler: "El no ascender y la derrota en El Salvador pasó por un tema físico".