Ayer estaba previsto el término de la huelga que mantienen desde hace 23 días los trabajadores que construyen el nuevo hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar, quienes además mantienen tomada la obra. Sin embargo, tras comprobar que no se cumplió el acuerdo económico que habían suscrito con el consorcio español OHL, que ejecuta las faenas, la rabia cundió entre los obreros, al punto que uno se quemó a lo bonzo y una turba atacó las oficinas, desalojando a los administrativos y rompiendo documentos y computadores.

Los hechos comenzaron cerca de las 9 de la mañana, cuando el trabajador de OHL José Francisco Garay Roblero, de 25 años, intentó quemarse a lo bonzo, luego que al ingresar a la obra no recibiera su sueldo y el bono de 200 mil pesos acordado para el miércoles.

El obrero resultó con un 2% de quemaduras tipo A y 2% de quemaduras tipo AB en sus manos, cuello y cara, por lo que fue atendido en el hospital Fricke, para luego ser dado de alta a su domicilio.

A su vez, a raíz de esta situación fueron alcanzados por las llamas los trabajadores Francisco Sánchez Costa, de 28 años, y Carlos Salinas Fierro, de 24, quienes resultaron con quemaduras de carácter leve, siendo también dados de alta.

turba enardecida

Tras los dramáticos incidentes, un numeroso grupo de trabajadores subió hasta las oficinas de OHL en la obra, donde procedieron a desalojar a los empleados administrativos que se encontraban laborando y luego de ello comenzaron a derribar escritorios, destruir documentación, computadores y lo que encontraban a su paso.

"Se nos escapó de las manos, la gente reaccionó, se vino a las oficinas, dejó la embarrada, apedreó, botaron todo, porque la empresa está negando todo lo que negociamos. ¿Por qué no pagaron? El jefe general de terreno, Luis Burgos, se jactaba ayer (el martes) de que nos habían ganado, de que éramos de cartón, nos cerró las puertas hoy día para ingresar a trabajar, eso motivó el enojo de la gente, que se manifestó", relató el presidente del Sindicato de Trabajadores de OHL en Viña del Mar, Diego Villagra.

"La empresa no respetó una negociación en que tenía que pagar hoy los sueldos, la gente se desesperó y se quemaron tres personas a lo bonzo. El conflicto comenzó porque pedíamos que sacaran a Luis Burgos, que trajo gente de afuera y desvinculó a trabajadores de acá, pero nunca sacaron a este personaje, prefieren pagar la multa de 7 millones de pesos diarios que le está aplicando el Servicio de Salud antes de acceder a nuestras demandas", remató Villagra.

Por su parte, la dirigenta de la Fenats del hospital Fricke, Juana Wikee, aseveró que la violenta situación, que incluyó una agresión al abogado de OHL, Javier Díaz, se produjo "porque los trabajadores se sienten humillados en sus derechos. Esta gente no tiene un pan que llevar a la mesa para sus hijos, y por eso es que terminamos en esto, es una pena que la gente se esté quemando para luchar por sus derechos".

Wikee demandó que "las autoridades tienen que hacerse presentes, no pueden descartarse mientras tenemos gente que está sufriendo de esta forma y termina en esto".

acciones legales

El director del Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota, Francisco Acevedo, reiteró que "esto sigue siendo un conflicto entre privados. Nosotros, como Servicio de Salud, tenemos que asegurar solamente la salud de la población que atendemos, y ésta en general no se ha visto afectada por este conflicto, pero hoy día (ayer), desgraciadamente -a pesar de que dábamos el conflicto por solucionado- ocurrió un incidente en que se incendiaron unas maderas y resultaron tres trabajadores quemados".

Respecto de la destrucción causada por la turba, Acevedo enfatizó que "ahí tuvimos un desencuentro con los trabajadores, porque ellos ingresaron ilegalmente a dependencias del hospital, con el objeto de destruir las oficinas -que están en el hospital pero pertenecen a OHL-. Ahí destrozaron computadores, mobiliario, vidrios, de todo, pero nada que fuera de propiedad de nosotros, pero eso nos pareció un acto de fuerza y por eso llamamos a Carabineros, quienes los desalojaron, así que vamos a ejercer todas las acciones legales por los hechos que ahí ocurrieron".

En este sentido, el jefe de la Quinta Comisaría de Miraflores, mayor Felipe Neira, adelantó que solicitarán las grabaciones que obtuvieron los equipos de televisión que registraron los hechos, para adjuntarlas como medios de prueba ante el Ministerio Público.

"A lo menos tenemos delito de daños, hay destrozo de material informático importante", indicó Neira, quien recordó que los trabajadores que estaban protagonizando la destrucción "al percatarse de la presencia policial se dieron a la fuga desde el interior", por lo que no hubo detenidos.

En un comunicado, la empresa afirma que a las 17 horas del martes, "OHL Chile alcanzó un consenso con el sindicato de los trabajadores que consistía en el anticipo de un bono de producción de 200.000 pesos y en la recuperación de la mitad de los días paralizados. Durante la mañana del 1 de abril, mientras los ejecutivos de OHL viajaban a las instalaciones (...) ni siquiera tuvieron la oportunidad de sentarse en la mesa a firmar el acuerdo, pues desde la primera hora de la mañana, los trabajadores, incumpliendo el acuerdo del día anterior, se volvieron a tomar la obra". En este sentido, recalcaron que "OHL Chile no incumple ningún acuerdo, puesto que ni siquiera se ha dado la oportunidad de poder firmar el mismo, condición indispensable para poder hacerlo efectivo".

Cristián Rojas M.