Comercio porteño no cree que multas eviten destrozos
21 DE MAYO. Alcalde Castro propone cobrar a padres de autores de daños.
Los comerciantes de la zona cercana al Parque Italia, en Valparaíso, son escépticos frente a la efectividad de las nuevas multas que el municipio de Valparaíso busca aplicar -si las conversaciones con el gobernador provincial, Omar Jara, dan resultados- desde el próximo 21 de mayo a los padres de los menores autores de destrozos a la ciudad.
La medida, impulsada por el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, tiene como objetivo cuidar el comercio y los edificios patrimoniales. Para identificar a los autores de desmanes, el municipio se apoyará en el sistema de televigilancia que ya cuenta con unos 100 aparatos instalados en la ciudad.
Sin embargo, los locatarios del entorno del Congreso tienen dudas sobre la efectividad de este anuncio y propusieron medidas alternativas, como cambiar el trazado de las marchas o aplicar penas de cárcel a los jóvenes que rayen o destrocen inmuebles.
Alessandra Mazzino, dueña del restaurante Marco Polo, dice que hace algunos años el 21 de mayo era la mejor fecha de ventas del año junto al Día de la Madre. "Ahora es la peor", se lamenta. "Ahora nadie baja porque es muy peligroso".
En la Panadería Francia, ubicada en calle Pedro Montt, la sensación es similar. Catherine Morgado, cajera del local, cree que la medida anunciada por el alcalde es buena, pero "no sé si será suficiente. La marcha o la cuenta pública debería ser otro día y pasar por otro lado".
César Fuentes, del local comercial "El palacio de la fruta", dice que "ojalá funcionara (la multa), pero los jóvenes son porfiados, van a destrozar igual. Deberían meterlos presos varios días, además de multarlos".
El quiosco de Francia con Pedro Montt sufre siempre por los ataques en las marchas. Luis Flores, su dueño, dice que "no por multas a los padres dejarán de dañarnos".