Director del Van Buren: el último dictamen de la Contraloría es un "rayado de cancha"
VALPARAÍSO. Informe revela "malas prácticas" de dirigentes. Organismo instruyó restituir más de $ 12 millones.
Un examen de cuentas realizado por la Contraloría Regional de Valparaíso al hospital Carlos van Buren, tras una denuncia por diversas irregularidades cometidas al interior del centro asistencial y la falta de adecuados controles internos para el registro de asistencias laborales de funcionarios y dirigentes de asociaciones, así como de permisos gremiales otorgados por la dirección, prácticas que derivaron en millonarios pagos a dirigentes gremiales, generó fuertes críticas por parte de los propios trabajadores del recinto.
El actual director del centro asistencial porteño, Juan Patricio Castro, aseveró que el personal implicado en estos hechos ya fue notificado y se aplicarán las sanciones una vez que se cumplan los plazos de apelación.
El informe de investigación especial N° 57 de 2014, sobre presuntas irregularidades en el hospital Carlos Van Buren, da cuenta que la dirigente de la Fenats Unitaria, Cecilia Alday Riveros, utilizó el auditorio de dicho recinto para realizar clases particulares a un centro de formación técnica, durante julio y agosto de 2014, "en jornadas que coinciden con las horas extraordinarias pagadas por el hospital a dicha funcionaria", por un monto de $ 41.691.
Debido a que la dirección del hospital "no adoptó medidas concretas" sobre este hecho, Contraloría Regional realizará un proceso administrativo disciplinario "orientado a determinar las eventuales responsabilidades administrativas involucradas en la realización de clases particulares en horarios que coinciden con la jornada extraordinaria de doña Cecilia Alday Riveros y que le fuera debidamente pagada".
CUESTIONAMIENTO
La investigación cuestionó también que la dirección del hospital, por medio de resoluciones exentas, "autorizó extemporáneamente trabajos extraordinarios ya ejecutados" (30 de junio de 2014), a los dirigentes de la Fenats Cecilia Alday, Iván Alday y Raúl Delgadillo, "proceder que no se ajusta a la definición y criterio de aprobación de este tipo de labores".
Se constató que en los días en los cuales dichos funcionarios hicieron uso de su permiso gremial, existían dos registros de salida laboral, utilizándose para el cálculo de horas extraordinarias la diferencia entre ambas anotaciones, lo que impide comprobar las horas extras efectivamente trabajadas.
El informe también resolvió que el dirigente de la Fenats Unitaria, Iván Alday Ramos, además de los miembros del directorio de la Asociación de Funcionarios Profesionales Universitarios del hospital, Moisés Sagredo Bordó y Marcelina González, quienes están adscritos al sistema de "cuarto turno", deberán reintegrar la asignación percibida por dicho concepto el 2014, equivalente a $2.340.810; $ 3.985.698 y $ 6.155.074, respectivamente.
En el caso de Alday, se estableció que "no trabaja en los turnos que le corresponde por rotativa, obteniendo en algunos casos permisos gremiales para ausentarse de ellos y, habitualmente, labora en horarios que no corresponden a esa jornada, percibiendo por esas jornadas el pago de horas extraordinarias". En el caso de Marcelina González, se informa que "no registra cumplimiento de turno alguno en todo el año 2014".
"VARIAS LECTURAS"
El director del centro asistencial, Juan Patricio Castro, aseveró que el informe fue producto de "una extensa lista de quejas" realizadas por requirentes que mantuvieron su identidad reservada y motivó una fiscalización de Contraloría que se extendió por 3 meses.
Respecto al pago irregular de horas extraordinarias, Castro argumentó que tiene "varias lecturas", puesto que el hospital tiene más de 2.300 funcionarios y se detectó "en un pequeño grupo y en una escasa cantidad de horas, por lo que resulta marginal el impacto que podamos tener".
Sobre la situación de los dirigentes gremiales, el personero detalló que "la ley que los rige a ellos es bastante amplia y tiene distintos dictámenes respecto a la oportunidad de los permisos gremiales".
Respecto a los millonarios pagos a dirigentes gremiales, Castro explicó que "se les mantuvo la asignación de cuarto turno y, en ese contexto, se pagó la asignación como si ellos estuviesen haciéndolo en forma ejecutiva. Al no realizar el cuarto turno en forma íntegra, tienen que reintegrar los fondos; en eso hay dictámenes que son contradictorios. Han sido notificados la mayoría de los funcionarios y se les solicitará el reintegro de dichas sumas".
En relación al uso del auditorio por parte de una dirigenta para hacer clases particulares a un instituto, el director Castro afirma que "era imposible que pudiésemos tener conocimiento que la funcionaria estuviese percibiendo una remuneración por un organismo privado. El sumario administrativo lo realizará Contraloría".
Castro declinó emitir juicios sobre situaciones ocurridas con los gremios antes de asumir el cargo, sin embargo reconoce que el pronunciamiento de Contraloría le entrega un "rayado de cancha" y "los lineamientos sobre los cuales nos tenemos que regir y darle cumplimiento a la normativa que exige Contraloría".
El presidente de la Fenats Histórica del hospital, Juan Pereira, cuestionó el accionar de los dirigentes de la Fenats Unitaria a quienes "hace mucho tiempo se les vienen haciendo cargos, sin embargo los antiguos directores del establecimiento no han hecho nada. Sabemos de dirigentes que venían, marcaban y se iban y acá tampoco venían a trabajar los sábados y domingo".
El presidente de la Fenats Histórica, Juan Pereira, criticó las acciones en que incurrieron sus colegas del Van Buren: "Lo que hacen estos dirigentes es una práctica antisindical y enloda el trabajo honesto de todos los trabajadores del Van Buren. Como dirigente es algo inaceptable, es una mala práctica que se viene repitiendo en el tiempo. Esperamos que el director tome cartas en el asunto, adopte sanciones y no se escuden en el fuero gremial para caer en estas irregularidades. No todos somos ladrones y sinvergüenzas".
"Es un informe complejo que pasó en un periodo difícil para el hospital, que se traduce en múltiples quejas"
"Lo que hacen estos dirigentes es una práctica antisindical y enloda el trabajo honesto de todos los trabajadores del Van Buren"
Alexis Paredes R.