"Carmen Castillo pagó el costo por los platos rotos de la catastrófica gestión de Helia Molina"
"Hay que desdramatizar el uso de la interpelación. Ojalá se utilizara de manera más frecuente, y aunque suene feo, se abusara de esta herramienta de fiscalización como ocurre en los países desarrollados, donde los ministros no van una, sino que varias veces al año a dar explicaciones de sus carteras", advierte el exministro de Salud, Jaime Mañalich, a horas de conocerse la decisión de la Cámara de Diputados de interpelar a la ministra Carmen Castillo.
Con conocimiento de causa, ya que en el año 2013 también fue interpelado, Mañalich reconoce que a él le sirvió "para ordenar, para entender, para investigar". Tampoco, agrega, hubo consecuencias importantes desde el punto de vista político. "Las amenazas de que tras una interpelación se pase a una acusación constitucional no ocurrieron e imagino que tampoco ocurrirá en el caso de la ministra Carmen Castillo. El llamado es que ella revise la cartera en detalle y vea qué es lo que de verdad está pasando", advierte.
- ¿La ministra merece ser interpelada?
- Reconozco que vi con mucho entusiasmo la llegada de Carmen Castillo tras la catastrófica gestión de su predecesora, Helia Molina. Ella es una profesional idónea, muy bien formada y que tiene una mejor voluntad para construir y no destruir, pero por razones de cuoteo político o las que fueren, no ha sido capaz de realizar los cambios de los equipos del Minsal para lograr mejores resultados.
- ¿Como cuáles?
- Al término de este periodo, se ha acrecentado la crisis de la gestión hospitalaria que se traduce en que no se puede cumplir con la promesa de los nuevos hospitales, en que el calendario cambia cada 15 días, en que no se presentan empresas interesadas en las licitaciones o lo hacen a precios exorbitantes para incorporar la incertidumbre, la lista Auge ya está creciendo, el malestar de los gremios de salud es enorme. Ha habido que tener negociaciones con el Colegio Médico muy complejas y ahora está el problema de las matronas, los químicos farmacéuticos y los dentistas. En ese sentido, creo que es lamentable que la ministra no haya tomado la decisión de cambiar a un equipo que no estaba funcionando. O sea, lo que ocurrió el domingo con la entrevista del ministro Eyzaguirre es muy grave. Cuando él dice, como ministro secretario general de la Presidencia, que la gestión en salud de este gobierno es inaceptable qué quiere decir, porque si él, que está en el comité político, señala que lo que hace su gobierno está mal, entonces, bueno, cuáles son las consecuencias de esto y cuáles son las medidas para corregirlo, porque de lo contrario es una declaración al viento. Esa no es una declaración que pueda decir un ministro que está en el comité político y que además ha fracasado en la gestión del Ministerio de Educación.
- ¿Está a tiempo la ministra Castillo para hacer cambios?
- Creo que el tiempo ya pasó, que es imposible corregir el rumbo. Quizás se pueden minimizar los daños, y en ese sentido el llamado fundamental es que el equipo que la acompaña es insuficiente para los desafíos de la salud pública.
- ¿Por dónde debieran ir esos cambios?
- La Subsecretaría de Redes Asistenciales. Ese equipo tiene que ser cambiado a como dé lugar, porque de lo contrario nada va a ocurrir.
- ¿Ahí está entonces a su juicio el centro neurálgico del problema?
- Claramente, e imagino que la interpelación va a ir por ese lado y no para preguntarle por vacunas. Creo que todos los cuestionamientos que Eyzaguirre y otros personeros de la propia Nueva Mayoría apuntan a esta Subsecretaría, que administra los recursos, que es responsable de la deuda y la gestión hospitalaria, de la compra de hospitales y de la formación de especialistas que el país necesita.
- Usted que vivió en carne propia una interpelación, ¿le ve sentido?, ¿puede ayudar en algo?
- Su sentido constitucional es que cuando un ministro que tiene responsabilidad política de una cartera y no ha dado explicaciones satisfactorias, bueno, los parlamentarios lo citan para que vaya a entregar explicaciones. Pero para mí el problema más delicado de todos es que ella tiene que hacer un cambio en los equipos que la acompañan. No puede seguir tratando de manejar esta tremenda cartera con personas que están desde el inicio del gobierno y que han demostrado que no tienen capacidades. Tenemos el sistema de alta dirección pública y la exministra Molina lo desmanteló y ha habido mucha dificultad para llenar cargos por ese sistema para los directores y subdirectores de hospitales, para jefes de servicios, habiendo probado que son personas capaces y que han pasado los exámenes que el Estado ha establecido.
- A su juicio, ¿la ministra Castillo está pagando los costos por los platos rotos de Molina?
- Así es, en un 100%, porque la gestión de la exministra Molina fue absolutamente destructiva. Las secuelas de ese daño no se han recuperado. El Ministerio tiene exigencias enormes en políticas públicas y la ministra Castillo apenas ha podido tomar la agenda que incluye, entre otras cosas para ponerlo en contexto, una ley para modificar las isapres, una ley para que se permita el aborto, un proyecto que crea un sistema de financiamiento diferente para Fonasa, y tiene la presión de los parlamentarios para legislar a favor del consumo de la marihuana. O sea, además de todo el tema histórico, tiene una agenda legislativa que ella no maneja, que le ha sido impuesta por fuera y que es un calendario muy agobiante.
Artilugios conceptuales
- ¿Cuál es su posición sobre el proyecto que despenaliza el aborto en tres causales?
- Es un compromiso de campaña que apunta a legalizar el aborto libre. Pero hay una dificultad política entre la DC y el resto de la Nueva Mayoría para avanzar en esa línea, y la ministra del Sernam está permanentemente tomando la temperatura para ver cuánto pueden avanzar y demorarse porque la discusión del proyecto del aborto es una iniciativa que puede quebrar a la coalición de gobierno. Y ellos lo saben. El contexto político en el que se da es muy sensible. Y en la medida que se acerquen las próximas presidenciales y la DC aspire a tener un candidato propio, este argumento de la discusión del aborto les da una llave maestra para decir "no podemos seguir participando de políticas contrarias a nuestros principios" y tener una salida para levantar una candidatura presidencial propia.
- ¿Al estilo Maquiavelo?
- Es que yo creo que a eso aspira la DC: demorar la discusión del proyecto, llevarlo al Senado y en el momento oportuno, hacer ver que es incompatible con sus principios y tener el camino libre para la vía propia.
- ¿No comparte ninguna de las tres causales?
- Ninguna. De hecho, el presidente de la Corte Suprema señaló que la primera causal (aborto en caso de peligro de la vida de la madre) es falaz porque está legitimado desde el punto de vista legal que en ese caso el aborto sea ilegal.
- ¿Pero fue o no un error haber eliminado el aborto terapéutico?
- El aborto terapéutico era una causa enorme de muerte materna en Chile y hoy casi no existe muerte vinculada a aborto. Pero aquí no tenemos un problema médico; el problema real es el de la libre voluntad de la mujer para interrumpir el embarazo versus los derechos del niño que lleva adentro. Y eso es lo que debería transparentar esta discusión y no usando artilugios de falacia conceptual de las tres causales.
"La discusión del aborto es una iniciativa que puede quebrar a la coalición de gobierno. Y ellos lo saben. El contexto político en el que se da es muy sensible. Si la DC aspira a tener una carta presidencial propia, este argumento les da una llave maestra"
"Es lamentable que la ministra no haya cambiado a un equipo que no estaba funcionando. El equipo de la Subsecretaría de Redes Asistenciales tiene que cambiarse a como dé lugar, porque de lo contrario nada va a ocurrir"
ENTREVISTA. JAIME MAÑALICH, tras la aprobación en la Cámara de la interpelación en contra de la ministra de Salud: