Valparaíso
Con el riguroso término de "castigo" el intendente Gabriel Aldoney se ha referido al recorte presupuestario 2016 que el Estado de Chile pretende implementar para Valparaíso y juiciosamente ha levantado la voz llamando a otras autoridades locales a sumarse en contra de esta determinación. Entre ellos, el alcalde Castro y los congresistas Chahuán y Lagos Weber también han vertido su preocupación y rechazo.
Lo curioso y contradictorio es que todos ellos están a favor del T2 -que es urbanísticamente un mal diseño portuario-, avalando de esta manera a la EPV, que es sin duda la empresa estatal que no solo ha recortado, sino trasquilado la billetera de la riqueza natural de Valparaíso, como es su mar y su puerto, desde 1997 hasta el presente.
Más allá del arbitrario y azaroso presupuesto que el Estado destina a cada región anualmente, lo que debiera importar es lo que cada región genera a la riqueza nacional, riquezas que por lo demás nunca retornan. Ahí está "la madre del cordero" y la verdad es que mientras nuestras autoridades no lideren junto a los porteños la exigencia que la EPV deje una buena parte de las ganancias portuarias en nuestra ciudad (comenzando necesariamente con un buen diseño de puerto que contemple molos de abrigo en los costados y una costanera abierta a la ciudadanía en el centro del anfiteatro como gran oportunidad de diversificar la economía), en Valparaíso continuaremos siendo "castigados" al rincón de la pobreza y seguiremos incendiándonos porque los incendios son el último eslabón de toda decadencia. Por eso para la Iglesia Católica el gran incendio se llamaba Infierno.
Gonzalo Ilabaca Vocero del pacto Urbano La Matriz
Mil Tambores
Habiendo presenciado el concierto de la orquesta de André Rieu (desarrollado en Santiago) y ciertos parajes de los "Mil Tambores" (en Valparaíso), más lo leído en la prensa escrita y televisiva, le sugiero al organizador de este último evento que solicite recursos al Consejo de la Cultura y/o al Gobierno Regional para contratar al famoso violinista para que eleve el nivel cultural del carnaval, que por de pronto mucha falta que le hace.
Pedro Pietrantoni Navarro
Palabras de conveniencia
Uno de los grandes problemas que aqueja a Chile es el uso de palabras que esconden el fondo de los hechos, lo que busca engañar a quien las lee o escucha, acostumbrándonos a ellas. Tanto es así que nos minan la conciencia. Como un ejemplo recordemos: interrumpir el embarazo para matar al feto, ficción jurídica para hacer justicia sin pruebas fehacientes y así muchas otras.
En estos días se rehúye a utilizar la palabra terrorismo y terroristas para los hechos de embestida organizada en La Araucanía y en cambio se utilizan las de violencia, violentistas, delincuencia y delincuentes para hechos que sin duda son de terrorismo, ese que la Real Academia lo define en sus tres acepciones como: Dominación por el terror, sucesión de actos de violencia ejecutados para infundir terror y actuación criminal de bandas organizadas que reiteradamente pretenden crear alarma social con fines políticos. La autoridad debe dar el ejemplo y usar la palabra terrorismo antes que sea tarde.
Marcos Concha Valencia
Asamblea constituyente
Si bien ha sido objeto de discusión, la Constitución de 1980 ha sido legitimada. En efecto, al utilizarla reiteradamente como parámetro interpretativo y aplicarla de forma constante, reconocemos en ella a la norma suprema de validez de nuestro ordenamiento jurídico. De este modo, si se desea crear una nueva Constitución, resulta esencial respetar los preceptos de la vigente.
Nuestra actual Carta Fundamental requiere para su reforma la concurrencia de voluntades del Congreso Nacional y el Presidente de la República, de forma que para crear una nueva Constitución a través de una Asamblea Constituyente con plebiscito aprobatorio supone, imperativamente, una reforma a la Constitución de 1980 en la forma prevista por ella misma. Si pensamos lo contrario atentaríamos contra el propio sistema que hemos validado.
Diego Andrés Molina Conzué
Sabas Chahuán
Espectacular la declaración del fiscal nacional Sabas Chahuán. Da la impresión de tratarse de un Robin Hood moderno. Lamentablemente, quedan muchos delincuentes de cuello y corbata, pero no son mediáticos, no entregan réditos. Además creo que el país estaría más agradecido si hubiese perseguido también a los que no usan cuello y corbata como los asaltantes, los portonazos, los terroristas, en fin, toda la multitud de delincuentes que aterrorizan a la población.
Le hubiésemos levantado un monumento.
Mario Soto Real