Un sondeo de opinión sobre la construcción del mall Puerto Barón, encargado a Adimark por el Grupo Plaza y realizada en diciembre del año 2016, arrojó sorprendentes resultados.
Primero que nada, el cuestionado proyecto cuenta con un alto grado de conocimiento (93% por parte de la población, seguramente aupado por la polémica que ha mantenido al nuevo centro comercial en los medios de comunicación regionales e incluso nacionales).
Lo más importante, sin embargo, se esboza en la pregunta -directa, sin ningún enrevesamiento- que hace la citada encuestadora: ¿Debe el proyecto Puerto Barón llevarse a cabo? El 77% de los encuestados responde que sí, marcando un masivo 30% de crecimiento respecto del mismo sondeo (47%, en agosto de 2015).
Los atributos, como tanto gustan de medir los candidatos hoy, también suben, como por ejemplo la evaluación del proyecto después de la presentación de los conceptos e imágenes (51% en 2015 a 60% en 2016), la adhesión al mismo (intención de visita, 71% en 2015 a 78% en 2016); principalmente entre personas de 36 a 50 años y los segmentos medios y bajos.
Pese a que todavía se le asocia con un centro comercial (hecho que tampoco tendría nada negativo, para ser sinceros), se reconoce como un proyecto que aportará trabajo, turismo y desarrollo para la zona, y se valoran los atributos asociados al proyecto integral, con todos los beneficios del mejoramiento del borde costero prometidos, tales como parques, plazas y un paseo.
Los detalles que generarán resquemores son quizás las alusiones a la Unesco y sus recomendaciones sobre la zona patrimonial (sólo un 35% conocía que el proyecto quedaba fuera de esta área), las mismas que una vez argumentadas tampoco hacen variar las opiniones.
Por contraparte, los detractores, como el pintor Gonzalo Ilabaca, apuntan a "todas las irregularidades del contrato", un supuesto subsidio estatal respecto del cuidado de jardines y áreas verdes, y eventuales "vicios" que eternizarían la licitación para el Grupo Plaza.
Asimismo, plantea el artista en cuestión la siguiente duda: ¿Cuál es el mejor modelo económico, social, urbanístico y de desarrollo para ese lugar?, pregunta que, a su juicio, deslegitima la encuesta.