Cientos de turistas llegados desde diversos rincones del mundo y del país se maravillan a diario con los paisajes que ofrece Valparaíso, contemplando el panorama desde uno de sus tantos miradores o recorriendo sus escalas y callejuelas en los 42 cerros. Algunas, como la de la foto principal, son utilizadas lúdicamente como resbalines por los niños, otras, como el pasaje Bavestrello, recientemente restaurado,son transitadas por visitantes y por dueños de casa, pues ahí existe un conjunto de viviendas, que son el marco de aquella escala que conecta la calle Urriola con el sector del cerro Alegre donde está el paseo Yugoslavo. El magnetismo que ha ejercido la ciudad a lo largo de su historia ha servido de inspiración para cientos de artistas, que lo han plasmado en pinturas, novelas, cuentos, poemas y canciones, y es la misma atracción que los turistas sienten por la ciudad declarada por lña Unesco Patrimonio de la Humanidad el año 2003.