Sofía Navarro Martínez
Dentro de los próximos días, se cumplirá un año del accidente que tuvo como víctima fatal a Benjamín Lillo, joven estudiante de la PUCV que fue chocado por Tomás Vives. El autor enfrenta a la Justicia bajo la conocida Ley Emilia, luego que los exámenes pertinentes indicaran que al momento del hecho tenía 1,6 gramos de alcohol por litro de sangre. Sin embargo, pese a ser reincidente, no se consideró esta situación en el caso de Benjamín.
Esta semana, la Corte de Apelaciones de Valparaíso rechazó recurso de nulidad presentado por la defensa y confirmó la sentencia que condenó a Tomás Vives Viveros a la pena de 4 años de presidio, como autor del delito de no detener la marcha, prestar la ayuda posible y dar cuenta a la autoridad de un accidente de tránsito, ilícito perpetrado en marzo de 2016, en Reñaca.
Hoy, la responsabilidad al volante, el reconsiderar la decisión de eliminar los antecedentes y fortalecer la fundación "No más Benjas", son los ejes en los que trabajan sus más cercanos. Su padre, Gastón Lillo, no se rinde en la búsqueda de cambios luego de lo ocurrido con su hijo.
- Desde que ocurrió el accidente, ¿Cuál es la prioridad por Benjamín y otras víctimas?
-El tema es atacar la causa, es lograr que se tome conciencia de que si bebe no debe conducir. Cuando fallece Benjamín y dado el porqué falleció, que fue en la vía pública, a pesar de estar en el Hospital Naval, al Servicio Médico Legal y ahí se le realizó el alcotest y toxicológico que marcaron cero. Esa fue la guinda de la torta.
- ¿Cómo ha sido, para el núcleo familiar enfrentar el proceso judical?
-Difícil, cada vez que nos citaban a las audiencias era recordar el hecho. Además que el juicio comenzó entre navidad y año nuevo. Con eso luego, vinieron las declaraciones del inculpado, después Gastón (hermano mayor de Benjamín), la mamá y yo. No es fácil escuchar que venía la etapa de los testimonios. De todos modos, asistí porque quería cerrar este ciclo, escuchando todo. En cada proceso uno va reabriendo la herida pero eso es un proceso, creo yo, que hay que vivirlo hasta cerrar con la Corte.
¿Cuáles han sido los avances en tribunales en la búsqueda de la justicia para Benjamín?
-La corte de Apelaciones rechazó, de forma unánime, el recurso de nulidad presentado por la defensa... que el juicio haya sido como fue, con un voto disidente en contra de haber aplicado atenuante, da cuenta, a mi juicio, que la justicia también pensaba que debía haberle aplicado más todavía, pero que no se pudo por razones legales. Lo acepto y en ningún caso lo criticamos, al contrario, creo que la justicia lo hizo muy bien.
- ¿Cree que queda alguna tarea pendiente, considerando que el responsable es reindicente?
-Lo único que queda pendiente es intentar modificar que cuando una persona cometa un delito de este tipo, no pueda borrar sus antecedentes anteriores respecto al mismo tema. Esto hay que ponerlo en el tapete, que se discuta en el parlamento.
- ¿Qué consecuencias trajo en el juicio el estado de Vives?
-En vez de condenarlo diez años fueron cinco, lo que rebaja en un grado la pena por el hecho de tener conducta 'intachable'. Para esos efectos, eso no cuenta.
Tras el accidente, se creó "No más Benjas" fundación que tiene como idea fuerza concientizar sobre si bebe alcohol no conduzca. ¿Cómo funciona?
-La manejan mis dos hijos y unos amigos, cada cual tiene su trabajo. Dentro de las cosas que han hecho en este tiempo, asistieron a universidades para contar sus testimonios y así, conseguir socios para dar este mensaje
- ¿Es la educación, la fundación y el cambio de la ley los ámbitos que espera que se cambien y se potencien en el futuro?
-Si, ahí se podrá decir que la muerte de Benjamín no fue en vano. El sacerdote en la misa de Benjamín dijo: no hay que preguntarse por qué, sino para qué. Si tú dices que se logró no poder borrar los antecedentes anteriores, y que se está en los colegios educando en temas, donde la conducción no es compatible con el beber, se cumpliría ese para qué. Hay que hacer una potente campaña...
- ¿Cómo ha sido el trabajo con organizaciones externas?
-Con fundación Emilia trabajamos de la mano y con el apoyo absoluto. No tan solo ellos, sino de los familiares de diversas víctimas que hay producto de este tipo de delitos. La gente de la Universidad Católica tuvo una reacción inmediata. 'No se preocupen, el caso es nuestro', nos dijeron de inmmediato.
- Se ven múltiples campañas apuntando a la idea "si vas a beber, pasa las llaves" ¿Por qué cree que aún así el panorama de accidentes no cambia?
-Esto es transversal en la sociedad, es un problema de nuestro país, de nuestra cultura etílica. La gente no se da cuenta que hay una incongruencia en el tomar y conducir. Nadie está diciendo que se conviertan en abstemios. Haz tu vida como la haces pero si tomaste un trago y andas manejando, deja de manejar. Es simplemente eso, pero es difícil.
"En vez de condenarlo diez años, fueron cinco, lo que rebaja en un grado la pena por el hecho de tener conducta 'intachable'"
Gastón Lillo, Padre de Benjamín"