Alexis Paredes R.
Desde el año pasado, el nombre del exdiputado Edmundo Eluchans sonó como la más segura carta de la UDI en la región para competir por un cupo al Senado. El abogado y empresario contaba con un macizo respaldo de parlamentarios, alcaldes y concejales del gremialismo local; sin embargo, tras la oficialización de la candidatura de Andrea Molina a la Cámara Alta, finalmente Eluchans declinó postular, sembrando incertidumbre respecto de quién será el nombre que acompañará a Molina en la papeleta para las elecciones de noviembre.
- ¿Qué lo llevó a declinar una postulación?
- Son razones personales, familiares y laborales. En enero comuniqué que no iría de candidato y ahí muchos dirigentes del partido, todos los diputados, excluida la diputada Molina porque ella está involucrada en esto, pero los otros tres diputados -Osvaldo Urrutia, Arturo Squella y María José Hoffmann-, más un número importante de alcaldes, todos los cores del partido y muchos concejales y dirigentes de base me pidieron que reconsiderara mi decisión. Estuve dispuesto a revisar mi decisión, pero el viernes pasado comuniqué oficialmente que no estoy disponible para ser candidato.
- ¿Está molesto con la directiva por no haber sido más expedita la resolución para que se oficializara su nombre?
- El partido, como casi todas las estructuras de este país, son muy centralistas a veces, en Santiago se demoran en tomar decisiones, pero siempre me he sentido muy apoyado por la región y eso es lo que a mí me importa. Diputados, alcaldes, concejales, cores y muchos dirigentes me pidieron reiteradamente ser candidato. No me importaba mucho la demora o duda que pudiese haber en Santiago.
- ¿El haber apoyado en las elecciones internas a Jaime Bellolio le pudo haber pasado la cuenta?
- No, yo supongo que no. No creo que deba ser así y que haya sido así, porque realmente el partido es uno. Ciertamente apoyé públicamente y con mucho entusiasmo a Bellolio, porque creo que era lo mejor para el partido, pero ganó la actual senadora Jacqueline van Rysselberghe. En la directiva a todos los conozco, por cierto, no creo por ningún motivo que eso haya sido una causa.
Escenario electoral
- ¿Está complejo el escenario para Chile Vamos de poder conseguir dos senadores en la región, tomando en cuenta que Lily Pérez va por Amplitud?
- Estoy muy seguro de que si yo hubiera ido, hubiera ganado. Tenía el apoyo del 90% de las bases regionales del partido de la UDI, eso para mí no estaba en discusión. Le deseo mucho éxito a la diputada Molina en su candidatura, pero me parece que es muy necesario que la UDI lleve un buen candidato que encabece la lista y le dé peso. Estamos hablando del Senado, donde se requiere gente preparada y con experiencia, por algo en la Nueva Mayoría se está conformando una lista con políticos de mucha trayectoria. Por eso me parece indispensable que, además de la diputada, vaya algún candidato que pueda dar la pelea, cuando los candidatos del Gobierno y de otras listas de izquierda son gente de peso y trayectoria.
- ¿Usted cree que la UDI se apresuró en estas elecciones de llevar como candidata a Andrea Molina, tal vez no era el momento propicio?
- No, yo no quiero pronunciarme sobre eso y no quiero hacer ningún comentario que pueda parecer adverso respecto de ella, no es lo que corresponde. Lo que sí sé es que es necesario buscar un buen candidato para la lista, además de ella.
- ¿Hay nombres que reúnan el perfil que usted señala para tener una lista competitiva?
- El candidato que se me ocurrió en primer lugar, se lo dije a él pero no ha querido, y creo que habría que insistirle, es el diputado Osvaldo Urrutia, un hombre de mucha trayectoria en el partido y en el servicio público, que ha sido un excelente diputado por Viña del Mar. Él no ha querido, pero a lo mejor es el momento de decirle que lo piense. También la diputada María José Hoffmann ha sido una muy buena parlamentaria, sería una buena candidata. Tiene trayectoria en el servicio público, antes de ser diputada fue concejala, tiene trayectoria en nuestro partido. Ahí hay dos excelentes nombres, pero aparentemente ninguno de los dos tendría interés.
- ¿La idea es que el nombre surja de la propia región?
- Por supuesto, en eso soy categórico, creo que no es necesario que nos traigan candidatos de Santiago para la región. Nosotros tenemos gente valiosa, de peso, capaz de defender nuestras ideas. Lo que se viene en el próximo periodo es muy importante y necesitamos gente con trayectoria y clara convicción acerca de lo que representamos nosotros políticamente.
- ¿Esta sería su despedida definitiva en sus intentos por llegar al Senado?
- Yo creo que sí. Tengo 67 años de edad, si yo fuera candidato y ganara, como creo que habría ocurrido casi con certeza, estaría asumiendo a los 68 años para terminar a los 76. Usted comprenderá que a esas alturas de la vida uno piensa más bien en otras cosas que en una posible candidatura.
"Nunca he disimulado mi interés de ser senador. En el pasado estuve disponible y mi partido no quiso, ahora el partido quiere y yo no puedo ni quiero""