Tuvieron que pasar 43 años para que Chile volviera a jugar frente a Rusia en Moscú, luego de aquel polémico y hasta misterioso partido de repechaje disputado con miras al Mundial de Alemania de 1974.

Y lo cierto es que la de ayer fue una visita un tanto ingrata. En un encuentro donde le costó hacer su juego habitual frente al orden táctico de su rival, la Roja terminó igualando 1-1, dejando más dudas que certezas con miras al inicio de la Copa Confederaciones, donde el elenco dirigido por Juan Antonio Pizzi debuta el próximo domingo 18 de junio frente a Camerún.

Fueron los dueños de casa los que arrancaron mejor parados el compromiso, y rápidamente comenzaron a inquietar el arco de Johnny Herrera, titular ante la ausencia de Claudio Bravo, quien todavía no se recupera de su lesión.

La más clara en ese inicio fue un remate de Kombarov, quien luego de una pared perfecta definió con un disparo que rozó el palo del meta azul.

Pero tras ello, Chile reaccionó. A los 13', un centro de José Pedro Fuenzalida encontró a Mauricio Isla, quien casi cayéndose remató exigiendo la respuesta del golero Igor Akinfeev.

La Roja siguió intentando, pero su amplia posesión no derivó en mayor peligro para el rival. El orden táctico ruso, con un equipo corto, con dos líneas bien juntas entre defensa y mediocampo, parecía infranqueable para la escuadra nacional.

La única receta que parecía efectiva eran los desbordes de Jean Beausejour por izquierda y los cabezazos de Arturo Vidal, jugada que se repitió al menos dos veces.

Con el correr de los minutos, el dominio de la Roja sobre la pelota crecía, pero la imprecisión y las malas decisiones en los metros finales mostraban a un equipo poco punzante, y sin mayor sorpresa ni cambio de ritmo como para romper el cerrojo ruso. Salvo un gol de cabeza de Vidal, injustamente anulado, poco más ofreció el equipo de Pizzi.

El plus de Alexis

Ya en el segundo tiempo, los rusos avisaron de inmediato exigiendo a Herrera. Sin embargo, el punto de inflexión vino con el ingreso de Alexis Sánchez. Apenas un minuto llevaba en cancha, y en la segunda pelota que tocaba, el tocopillano metió un gran pase para Isla, quien solo en el área marcó el 1-0. Poco después, el propio Sánchez dejó solo a Martín Rodríguez, quien no supo definir ante el golero rival.

Así hasta que vino el empate. Tiro de esquina desde la izquierda y Vasin, de cabeza y aprovechando su 1,90 metros de estatura, estableció el 1-1.

Con el correr de los minutos, Chile estuvo muy lejos de lo que mostró en el primer tiempo, poca posesión y todavía menos incisivo, salvo por las pinceladas de Sánchez.

Y los cambios también jugaron en contra, la Roja fue perdiendo protagonismo y dinámica, y el partido se hizo cada vez más trabado y con pocas llegadas en los arcos.

Al final, una igualdad que sembró ciertas dudas que deberán despejarse en el amistoso del martes con Rumania, el último antes de la Copa.